Canción actual

Título

Artista


escuelas


Patricia Pines es docente de nivel inicial e integrante de “Vacantes para todxs en las escuelas públicas”, un colectivo de familias y docentes que luchan para que se garanticen las vacantes en la Ciudad de Buenos Aires. En los últimos días salió un fallo judicial que obliga al Gobierno porteño a resolver el problema. Siguiendo el slogan “No sobran pibes, faltan vacantes”, Pines sostiene una lucha por más y mejores escuelas para garantizar el derecho a la educación para todas las personas. La docente habló en el programa radial La Retaguardia y contó respecto a la problemática. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Fernando Tebele    ✍️ Redacción: Gabriela Suárez López 💻 Edición: Diego Adur La educación es un derecho que tiene carácter fundamental porque es esencial para el desarrollo humano, la erradicación de la pobreza y además, es garante de otros derechos y promotor del bienestar individual y colectivo. Ante el reclamo histórico que la comunidad educativa viene realizando sobre la falta de vacantes en las escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires, la Sala N°3 de Apelaciones del Fuero Contencioso Administrativo y Federal de la Ciudad dictó sentencia hace pocos días. Confirmando lo que la jueza Elena Liberatori dictaminó en el año 2019, el fallo dispuso que la administración del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires deberá garantizar el acceso a la Educación Primaria y Secundaria en los Distritos Escolares N° 1, 5, 13, 19, 20 y 21. Patricia Pines, integrante del colectivo  “Vacantes para todxs”, dijo al respecto: “Ojalá el Gobierno ahora acate el fallo con la misma celeridad que acató otros fallos que eran acordes a su política. Eso es lo que esperamos. Básicamente lo que dice el fallo es que tienen que garantizar la escolaridad, particularmente en 20 barrios, que son los más afectados por la problemática de la falta de escuelas, pero entendemos que en realidad es para toda la Ciudad. Deberían destinar el presupuesto y ejecutarlo y construir las escuelas que faltan”. La Convención sobre los derechos del niño aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas y ratificada por la República Argentina a través de la Ley 23.849, contempla los derechos fundamentales de las infancias. En su artículo 28, la Convención reconoce el derecho a la educación para ser ejercido en igualdad de condiciones y declara que los Estados deberán implantar una serie de medidas que garanticen el acceso gratuito a la misma, y velar por el cumplimiento de las condiciones enunciadas para todos los niños y niñas del mundo fomentando el desarrollo integral y el respeto de las libertades fundamentales. El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires parece hacer caso omiso respecto de este derecho fundamental cuando se trata del otorgamiento de vacantes de escuelas públicas de esa jurisdicción. Sobre este tema, Pines explicó: “Nosotros lo venimos denunciando hace mucho. No solo no han dado respuesta favorable a la demanda, sino que en estos últimos años han cerrado cientos de salas, grados, cursos e incluso escuelas enteras”.  Instantáneas del sarcasmo Durante el transcurso de la pandemia y en muchos casos cuando la situación sanitaria no estaba aún controlada, el Gobierno porteño presionaba por la vuelta a la presencialidad en las aulas. Sus argumentos eran variados: que en las escuelas los y las estudiantes no se contagiaban, que el derecho a la educación solo se garantizaba con la presencialidad. Sin embargo, en las inscripciones online las vacantes son un bien escaso para los pibes y las pibas. “El fallo habla de las 54 escuelas de las cuales venimos escuchando ¡hace cuanto tiempo! Están construyendo las mismas 54 escuelas, pero cuando te ponés a revisar dónde están esos edificios te das cuenta que son muy poquitos los edificios nuevos que se inauguraron y la mayoría fueron mudanzas de escuelas que ya existían. Las poquitas obras que se inauguraron se hicieron siempre en años electorales y las abren sin completar la obra, entonces entregan escuelas donde está el agujero del ascensor, sin el ascensor, sin gas, sin teléfono. Con luz de obra, o sea, los cables colgando. Después, si quieren usar algún artefacto de más enseguida salta la térmica y se quedan sin luz”, contó Pines. En un Congreso Internacional que se celebró la semana pasada en la Universidad Católica Argentina, la ministra de Educación de la Ciudad, Soledad Acuña, aprovechó la ocasión para cuestionar el dictamen y seguir sosteniendo que las 54 escuelas existen y relacionó el fallo con la campaña electoral además de responsabilizar al Gobierno nacional por la falta de conectividad en los barrios populares. Ante la consulta por las obras que el Gobierno de la Ciudad se adjudica, la docente opinó: “Hay un gran desinterés por el bienestar y  por la dignidad básicamente de las infancias. El colectivo Vacantes surgió pidiendo que construyan escuelas y después a medida que fue creciendo nos dimos cuenta que en realidad hay múltiples derechos vulnerados de las infancias. No solo el acceso a la educación pública, laica, gratuita y estatal desde los 45 días de vida, que es lo que dice la Constitución de la Ciudad. Además, los comedores escolares también sufrieron muchísimos recortes en estos años, la comida es insuficiente, no es del todo saludable y no se entrega para todos los niveles. Han recortado el plan Sarmiento y el plan Conectar Igualdad”. La educación en el laberinto judicial Frente a las distintas demandas sin respuesta efectiva y la negativa al acceso a la información, el fallo traslada el problema a la Legislatura para resolverlo allí, aprobar presupuesto y ejecutarlo. Sobre el modo en que se resolvió este conflicto y la división de poderes, Pines agregó: “No es incumbencia del Poder Judicial legislar, ni aprobar el presupuesto, ni construir las escuelas. Entonces, en un punto la cuestión está en la voluntad política que es distinta de la voluntad judicial. Obviamente los jueces que le dan vacante a las familias que reclaman están de acuerdo con que hay un derecho vulnerado, pero es tarea del Legislativo y del Ejecutivo hacer

El jueves se realizó un paro y movilización docente a la Legislatura porteña por la situación educativa en la Ciudad de Buenos Aires. Mariana Scayola, secretaria general del gremio Ademys, pasó por el programa Hasta que vuelvan los abrazos, de La Retaguardia y Radio Sur y se refirió a las problemáticas educativas y a la falta de respuestas políticas. Además, comentó que la cuestión salarial es uno de los temas recurrentes en los diálogos entre docentes. Compartimos un fotoinforme. (Por La Retaguardia) 📷 Fotoinforme: Bárbara Barros/La Retaguardia 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Nicolás Rosales

Claudia Korol, comunicadora feminista, integrante de Pañuelos en Rebeldía y educadora popular, recordó al pedagogo brasileño en el centenario de su nacimiento. En diálogo con el programa radial Hasta que vuelvan los abrazos, de Radio La Retaguardia y Radio Sur. Habló sobre la importancia de la figura de Paulo Freire a nivel mundial y de la necesidad de sostener y levantar sus ideas por una educación emancipadora. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Irene Antinori/Julián Bouvier ✍️ Redacción: Julián Bouvier 💻 Edición: Fernando Tebele La referente de Pañuelos en Rebeldía, Claudia Korol, reflexionó sobre la importancia de la figura de Paulo Freire, en el marco de su aniversario número 100: “La fecha del natalicio de Paulo Freire significa una celebración que tiene un carácter mundial. Desde Pañuelos en Rebeldía estamos recibiendo noticias de esto en todo el continente todavía, pero también desde Asia, África, Europa. Es un educador que ha abierto caminos, criticando las formas tradicionales de la educación bancaria. Formas que tienen que ver con el disciplinamiento de los cuerpos y los pensamientos de la vida para poder darlos como parte de la reproducción de la hegemonía de este sistema patriarcal, capitalista y colonial. Y vemos que en su país de nacimiento, Brasil, un tal Bolsonaro (Jair, Presidente de la Nación) pretende borrarlo de todas las currículas educativas y de todas las formas de comunicación”, dijo. Korol destacó algunos de los elementos que posicionan a Freire como una referencia a la hora de pensar a la educación como un lugar de transformación. “Por un lado, Freire ha construido un aporte desde la ‘Pedagogía de la Esperanza’. Cuando se cumplían 25 años de su obra principal a mi entender, que es ‘Pedagogía del Oprimido’, él realizó un ejercicio autocrítico para pensar qué había pasado en esos 25 años desde su texto. Y qué temas deberían reformularse. Yo tuve la posibilidad de hablar con él en el momento en que fue lanzado ‘Pedagogía de la Esperanza’, que era revisitar la teología del oprimido. Y fue maravilloso porque era un momento en los años 90, muy cercano a la crisis de las izquierdas que se produjo por el impacto de la caída del Muro de Berlín, de la desarticulación de lo que había sido la Unión Soviética, en el año 1991. Donde muchos sectores de izquierda pensaron que su servicio se había acabado. Y hablando con él en ese momento, me decía de qué esperanza nos hablaba. Porque siempre la idea de esperanza resuena con un tinte religioso. Y no, no tenía que ver con la espera. No tenía que ver con una esperanza boba, como decía él, sino con la confianza en el pueblo para construir desde una nueva perspectiva emancipatoria que resuene con sus necesidades, con sus experiencias, con sus deseos. Creo que fue muy importante ese aporte y que lo sigue siendo en este tiempo en que nos quieren robar la esperanza; y robándonos la esperanza, nos quieren robar la posibilidad de participación y de lucha por uno, por una sociedad diferente, por las revoluciones que nos faltan”, resaltó. “Otro elemento que quiero marcar es que su libro ‘La educación como práctica de la libertad’, plantea precisamente el sujeto de las transformaciones llamada Teología de los oprimidos’. Pero no para los oprimidos, oprimidas, oprimides. Esta teología construye en los oprimidos, oprimidas, oprimides para emanciparse, en la medida que identifican que esa opresión tiene que ver con una construcción social, cultural. Pero también como una construcción humana. Y como tal puede ser revertida, transformada y modificada. Pero eso va a ser obra de los sujetos. Los sujetos que están viviendo, sintiendo e identificando esas opresiones, que son elementos fundamentales”, comentó. Educación y arte Korol recordó la frase de Freire ‘El educador es un político y un artista’, la retomó y dijo: “Me parece que es fundamental pensar al educador y a la educadora popular como artista, pero no como artista individual, sino como artistas colectivos y como creadores de nuevos mundos, que para poder crearlos también hay que construir con lo existente, desafiarlo, desorganizarlo, estructurarlo. Y rehacernos también nosotras, nosotros, en esa perspectiva creativa, artística, de repintar, de captar el mundo, reencontrarlo, cantarlo también. Porque una de las cosas que podemos pensar es que en muchas zonas de nuestro continente, por ejemplo -para hablar donde nuestros pies pisan, en nuestros territorios- hay desencanto y hay desesperanza. Es producto de los golpes que hemos recibido”. Y agregó: “Una frase que a mí me impacta siempre de Freire es la de ‘Queremos ser sanamente locos y locamente sanos’, porque no se trata sólo de rendir culto a la cordura. La cordura puede ser la normalidad que nos impone el poder hegemónico. Entonces es necesaria esa locura. En su momento se hablaba de ‘las locas de la plaza’, las Madres de Plaza de Mayo y con ellas, todos y todas las que quisieron cambiar el mundo y que el sistema trató de desacreditarlos”. Freire y Pichon Rivière Korol rescató los cruces que existieron entre el pensamiento de Enrique Pichon Rivière, creador de la psicología social, y el pensamiento de Paulo Freire, y comentó sobre el trabajo que realizan en los talleres de formación de educadores de Pañuelos en Rebeldía. “Esos pensamientos los reivindicamos en nuestra forma de hacer educación popular. Construimos y creímos en esa posibilidad de despliegue de todo lo que no se identifica con la normalidad domesticada. Y entonces, a veces, nuestros talleres de educación popular, que es lo que hacemos en la formación de formadores, tienen mucho que ver con romper con esos corralitos de disciplinamiento que se producen a través de una racionalidad que involucra solo un pensamiento cartesiano hegemónico. Ahí no se enseña a involucrar en los procesos políticos y pedagógicos al conjunto de los sentimientos, de las reflexiones, de las emociones a todo el cuerpo: la dimensión lúdica, el juego, el canto, la danza, no solamente como una forma de hacer más divertido el acto pedagógico, sino fundamentalmente porque para hacer revoluciones necesitamos todas las dimensiones de pensamientos, emociones

En diálogo con el programa radial La Retaguardia, Melisa Correa, docente e integrante de la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores, se refirió a la designación de Gustavo Albonico como director de la Escuela 2 del Distrito Escolar 8 “Tomás Santa Coloma”, en Parque Chacabuco. La docente contó que Albonico se ha expresado abiertamente en las redes sociales en defensa de la dictadura militar, entre otros dichos repudiables. La comunidad educativa reaccionó rápidamente y realizó algunas acciones en rechazo. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Agustina Sandoval Lerner ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Diego Adur/Pedro Ramírez Otero 📷 Fotos: Nicolás Rosales/La Retaguardia La comunidad educativa se movilizó en repudio a la designación de Gustavo Albonico como director de la Escuela 2 del Distrito Escolar 8 de la calle Santander 1150 de Parque Chacabuco, en la Comuna 7 de la Ciudad de Buenos Aires. Albonico ha tenido discursos misóginos en reiteradas ocasiones, palabras y actos que van en contra de los derechos de las mujeres y otras identidades de género, según contó en un comunicado la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores. Por otro lado, la comunidad educativa entiende que la modalidad del Ministerio de Educación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires  ha sido rotarlo por diferentes escuelas y comunidades evidenciando complicidad y protección a este personaje. Melisa Correa, maestra e integrante de la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores y parte de la Asamblea de Docentes del Distrito 8 explicó cómo se enteró del hecho: “No conocemos personalmente a este sujeto, sí desde las notas que han salido a raíz de su fallida designación como director de una escuela del Distrito décimo. Ahí se pudo frenar la misma, ya que se dieron a conocer estos dichos y el discurso que hace apología del Terrorismo de Estado y de los crímenes de lesa humanidad. También reivindica el gatillo fácil y tiene dichos misóginos, donde pretende cerrar el Ministerio de la Mujer, Género y Diversidades”. Por otro lado, Correa argumentó porqué es inadmisible que el director asuma el cargo: “No podemos tolerar que ningún integrante de conducción de un equipo escolar tenga este tipo de discurso porque nuestros lineamientos curriculares promueven la valoración de la democracia y de la construcción de la memoria familiar, social y colectiva. Es una ley que tenemos que cumplir, y claramente este sujeto representa lo contrario. Estaría fuera de la ley”. Entre las acciones llevadas a cabo, el miércoles pasado hubo una conferencia de prensa en la Escuela Primaria 2 D.E. 8 “Tomás Santa Coloma” y el viernes una radio abierta en la esquina de las calles Emilio Mitre y Asamblea, en Parque Chacabuco. En la conferencia de la semana pasada estuvieron presentes la ex directora del colegio, madres de alumnos y alumnas, e integrantes del gremio Ademys como la actual legisladora porteña del Frente de Izquierda Amanda Martín, la secretaria general Mariana Scayola, y el secretario adjunto Jorge Adaro. Del gremio UTE (Unión de Trabajadores de la Educación) se hizo presente el secretario de Derechos Humanos, Matías Zalduendo. Por último y en relación a las expectativas luego del repudio de la comunidad, Correa expresó: “Hasta donde sé todavía no hay una respuesta, pero deseamos que se remueva o rechace la designación. Lo del miércoles fue movilizante. Creo que no es una opción seguir rotándolo (de un colegio a otro). De continuar en su cargo se estarían violando los derechos de los y las alumnas”.   DESCARGAR

Lucas Bragan, docente de la Escuela de Danza N°2 “Jorge Donn”, del barrio porteño de Vélez Sarsfield, dialogó con el programa radial La Retaguardia. Allí habló sobre la deplorable situación edilicia y la suspensión de la construcción de un nuevo edificio, por decisión del Ministerio de Educación de la Ciudad. Además, mencionó la imposibilidad de sostener la vuelta a la presencialidad con protocolos y cuidados en el edificio actual que comparten con la Escuela de Cerámica “Fernando Arranz”. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Fernando Tebele/María Eugenia Otero ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero Con el retorno a las clases presenciales, en medio de una carrera acelerada por parte del Ministerio de Educación de la Ciudad para que esto se lleve a cabo, lo cierto es que la realidad de muchas de las escuelas plantea un escenario complejo, donde las condiciones no están dadas para que esto suceda con el cumplimiento de un protocolo sanitario y una planificación adecuada.  Recorte presupuestario La construcción de la Escuela de Danza N°2 “Jorge Donn” ubicada en el barrio Vélez Sarsfield, fue prevista por ley en el año 2008. Comenzó en el año 2015 y estuvo tres años parada.    Lucas Bragan, docente de la escuela, explicó la situación edilicia y el particular contexto que viven, ya que hace años comparten edificio con otra institución artística: “Es un problema histórico en nuestra escuela, como en tantas otras de la Ciudad. Nosotros estamos en un edificio en Margariño Cervantes y Lope de Vega que compartimos con otra escuela, que es la de Cerámica Fernando Arranz y es un edificio realmente en condiciones deplorables”, comenzó. “Como para graficar esto, desde el año 2014 no funcionan los enchufes en las aulas del piso superior, hay goteras que cada vez que llueve cae agua sobre los piso de madera de las aulas de danza. Hay roedores y todo tipo de problemas de infraestructura y de mantenimiento también. Hace años que estamos esperando la construcción de un nuevo edificio. De hecho hay una ley de la venta de los edificios de Catalina Sur, en la cual se asignó una partida presupuestaria del 2008 para la construcción de escuelas, entre ellas la nuestra. Efectivamente la construcción del edificio empezó en el año 2015 con un montón de idas y venidas entre el Gobierno y las empresas que  contrataba por medio de licitaciones. Ahora, hace tres años que la obra estaba paralizada y a través de una resolución y con la excusa de la crisis  sanitaria y económica, la ministra (de Educación de la Ciudad) Soledad Acuña decide directamente suspender el llamado a licitación”, continuó.   El escenario de la vuelta a las clases presenciales Ambas instituciones, el Jorge Donn y el Arranz, por ser Escuelas Superiores de Educación Artística, tienen doble turno por las clases del bachiller y de la especialización, además de  dos profesorados. En este nuevo ciclo lectivo, al reclamo histórico de un nuevo edificio se le suma la situación de los protocolos y cuidados por la pandemia de Covid-19. “Con  lo complejo que es la vuelta a la presencialidad, a la que nos están forzando ahora, ni siquiera tenemos en el horizonte poder vislumbrar si vamos a tener un edificio en condiciones dignas. Ahora, agravado por la situación de la pandemia, es imposible garantizar un protocolo con el distanciamiento y todas las cuestiones sanitarias y de higiene necesarias en el edificio en el que estamos”, aseguró. Bragan contó más detalles de las pocas garantías para comenzar la presencialidad: “Por empezar, las aulas son insuficientes. Convivimos, además de dos escuelas, distintas modalidades. Está el bachillerato, y la carrera de danza. Los chicos y chicas cursan las dos modalidades. Pero además hay un terciario, donde pueden culminar sus estudios después de terminar el nivel medio. Y muchas veces las aulas no alcanzan para la convivencia de los dos niveles. Hay aulas, como las de danza, que no tienen ningún tipo de ventilación, es decir, no tienen ninguna ventana. Aulas del piso superior tampoco. Las paredes son muy finas, son de durlock, hay una contaminación sonora tremenda. Es imposible imaginarse cómo garantizar ese protocolo en esas condiciones”. “Formar artistas no sirve” Respecto a las pésimas condiciones edilicias que tienen las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires, Bragan marcó algunas diferencias de las artísticas: “Estamos en la mira del Gobierno en los últimos años, se ha ido desfinanciado. Con una gestión que tiene una lógica empresarial como la actual, desde hace ya 14 años, la educación pública no es redituable, y la educación artística mucho menos. Porque formar artistas no les sirve, no les cierran los números. Y los avances son sistemáticos. De desgastar a las comunidades e intentar avanzar contra las condiciones de trabajo y aprendizaje de las escuelas artísticas”.  Por último, reflexionó: “No tenemos precisiones de retorno, ni en nuestra escuela y prácticamente en ninguna. Nuestros directivos y la supervisión no tienen aún directivas claras de más arriba. Estamos viviendo una incertidumbre total. En lo personal, como docente y padre tengo un deseo muy grande de volver a la presencialidad, pero es muy difícil dar clases en la situación que nos están proponiendo. La certidumbre es que las condiciones no están dadas desde lo sanitario, lo edilicio y lo pedagógico”.

En diálogo con el programa radial Hasta que vuelvan los abrazos, Patricia Pines docente e integrante del colectivo Vacantes para Todes, expresó su preocupación por un fallo judicial que atenta contra el acceso a las escuelas públicas de la Ciudad de Buenos Aires, y que agravaba aún más la falta de vacantes que se viene sucediendo en el último tiempo. Un revés judicial abre una luz de esperanza. (Por La Retaguardia) ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero 📷 Foto de portada: Tiempo Argentino A finales de diciembre del 2020, el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) falló contra las familias que reclaman una vacante para sus hijos e hijas en las escuelas públicas. Además, había declarado inconstitucional que se exija a las autoridades porteñas la obligatoriedad de las vacantes y  determinaron que solo debían hacer el reclamo por la vía judicial aquellas personas que no puedan abonar la matrícula en la educación privada. Un pequeño giro en la justicia podría revertir la situación. Una luz de esperanza Al cierre de esta nota, el colectivo Vacantes para Todes sacó un comunicado donde se expresa con esperanza:  “En un fallo con perspectiva de género el Dr. Darío Reynoso, Juez a cargo del Juzgado Contencioso Administrativo y Tributario de C.A.B:A. Nº 24 secretaría 47 reconoció y protegió los derechos de una mamá a cargo de manera exclusiva de su hijo. Hizo una combinación de artículos de los Tratados Internacionales incorporados en la Constitución Nacional a fin de hacer reales, es decir, operativos los derechos humanos y sociales para esta mamá y su niño. También tuvo presente el artículo 24 de la Constitución de C.A.B.A. en cuanto a la perspectiva de género. El fallo describe la vida de una mamá sola y pone en evidencia la discriminación, el trato desigual a la hora de salir a trabajar, la dificultad de acceder de manera igualitaria a la oportunidades y el distinto trato que genera el estar a cargo exclusivamente de un hijo. Demuestra que se combinan todas variables insalvables para redundar en pobreza y exclusión de la mujer de ámbitos vitales y productivos”.  Por otro lado, aclaran: “Se aplicó conjuntamente la Convención de Derechos del Niño/a y Adolescente y la Convención Contra toda forma de Discriminación hacia la Mujer. Como resultado se cumple el sueño de acceder a una vacante”.  Mencionan que el Estado es responsable de asistir a las familias en cuanto a políticas públicas que aseguren poder criar, escolarizar, construir aulas, formar docentes con sueldos acordes a la importante tarea de educar, y del diseño de políticas públicas que favorezcan a la mujer.Y finalizan: “Esto permite vislumbrar una legítima demanda de la justicia a Horacio Rodríguez Larreta, el principal responsable de que estos derechos se vean vulnerados sistemáticamente y desde hace años en su gestión a cargo del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires”. Otra vez sopa: cada vez más, menos vacantes “Vacantes para Todes en las escuelas públicas es un colectivo de familias, docentes, miembros de distintas agrupaciones, personas independientes, que desde hace siete años viene luchando por la construcción de escuelas en la Ciudad de Buenos Aires, y denunciando que la situación de las familias que quedan en lista de espera cada año se va agravando”, comenzó explicando Patricia Pines, integrante del colectivo Vacantes para Todes.  “Es cada vez mayor el número de familias afectadas. En 2013, cuando se implementó el sistema de inscripción online en la Ciudad, era ministro Esteban Bullrich y reconocía entre 7 mil y 9 mil niños, niñas y jóvenes que quedaban fuera del sistema educativo. Y ya para el 2020, si bien el Ministerio de Educación de la Ciudad se niega sistemáticamente desde el 2016 a entregar cifras concretas del resultado de las inscripciones, pudimos acceder a ellas y constatar que son alrededor de 15 mil niños, niñas que se inscribieron y quedaron en lista de espera. Y otros 15 mil más asisten a los Centros de Primera Infancia (CPI). Que no son escuelas, porque no dependen del Ministerio de Educación, dependen del Ministerio de Desarrollo Social”, detalló. La justicia “Hasta ahora el colectivo venía haciendo amparos gratuitos para las familias con un conjunto de abogados y abogadas que dentro de todo era el único ámbito, en el poder judicial, donde encontraban las familias afectadas algún tipo de respuesta favorable. Dado que hemos ido numerosas veces a la Legislatura, se presentaron distintos proyectos de construcción de escuelas que nunca se trataron, que no recibieron adhesiones de ningún otro bloque más que del Frente de Izquierda que fueron quienes lo presentaron consecutivamente todos los años. Sabemos también que el Ministerio de Educación viene subejecutando partidas para infraestructura escolar hace años y el presupuesto educativo, incluso para este año (2020), es uno de los más bajos de la historia. En el poder legislativo y ejecutivo, no hay ningún tipo de respuesta favorable para esta problemática. Nosotros habíamos llevado más de 700 amparos dentro del colectivo, más todos los que se hacen por fuera de él, de familias que vienen reclamando en los últimos años”, aclaró la integrante de Vacantes para Todes. Certificado de pobreza, ¿será obligatorio? “Ahora el Tribunal Superior de Justicia dictaminó que las familias ya no van a tener este derecho de poder reclamar por algo constitucional vulnerado de sus hijos e hijas por no poder acceder a la escuela pública. Y solo podrán hacerlo aquellas familias que demuestren, suponemos a través de ANSES, un certificado de pobreza. Este fallo, además de ser escandaloso y aberrante, atenta básicamente a la pluralidad de las escuelas públicas que conocemos desde su formación. Si hay que caracterizar a las escuelas públicas es por la heterogeneidad de los grupos, las clases sociales que asisten a las escuelas. Las familias más vulnerables y sus hijes pueden vincularse con familias trabajadoras, con familias más pudientes. La escuela pública iguala en ese sentido, e incluye a todas las personas independientemente de sus orígenes, prácticas religiosas, nacionalidad, condiciones económicas, culturales o de otra índole”, planteó. Por último, Pines aseveró: “Esto es sumamente alarmante, esperamos

Mariano Corbacho es uno de los directores junto con Marcos Coria del proyecto audiovisual que muestra la lucha del movimiento de estudiantes secundarios en la Ciudad de Buenos Aires. En diálogo con el programa radial A mí no me importa, relató cómo fue el proceso de realización y contó acerca de la próxima proyección, en el Festival Transterritorial de Cine Under de la Provincia de Buenos Aires. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Pedro Tato/Julián Bouvier ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero —La Retaguardia: ¿Cómo surgió y de qué se trata el documental? —Mariano Corbacho: Surgió hace varios años, más llegando al 2015 cuando hubo una serie y considerable de tomas dentro de la Capital Federal. A partir de acercarme a esos conflictos y poder conocer de primera mano lo que estaba pasando, poder compartir algunas tardes y noches con los chicos en toma. Me pareció importante poder generar un relato, vengo haciendo documentales hace un tiempo ya, y me llamaba la atención la falta de participación que tienen los y las jóvenes dentro de la representación audiovisual argentina. Y esa falta es más grande aún cuando se quiere construir a los jóvenes, adolescentes, estudiantes como actores sociales, como sujetos políticos.  Entonces, el documental surge con la necesidad de poder decir: acá hay un montón de pibes y pibas,  una generación enorme que está dando la lucha en defensa de la educación pública. Me pareció sumamente importante y valioso rescatar esos procesos de lucha, y que sean incluso los pibes y las pibas quienes contaran el proceso.   —LR: A diferencia de tu trabajo anterior, “70 y pico”, donde las personas entrevistadas son adultas, ¿cómo fue entrevistar a pibes y pibas de 15 o 16 años? —MC: La verdad que es para sacarse el sombrero con todo los pibes y la pibas. Sabiendo la diferencia de edad como realizadores del documental, y la capacidad de análisis de la realidad y la capacidad organizativa que tienen los jóvenes, nos llamaba muchísima la atención la paciencia para responder preguntas sin bajar el nivel de discusión. Nunca los tratamos como sujetos, como se suele ver en los medios de comunicación, que los tratan de aniñar y de tergiversar. Para sorpresa nuestra incluso, que esperábamos encontrarnos con discursos más prefabricados. Nos dimos cuenta que no era así. Empezamos por el mundo de las tomas, que era el punto de vista más mediático, pero quisimos recuperar un movimiento estudiantil que trascienda. Y retratamos los diferentes procesos que atraviesan los estudiantes, los movimientos estudiantiles, las coordinadoras, las asambleas, festivales, encuentros de debate. —LR: ¿Cómo atraviesa y se ve reflejado en el documental la lucha feminista dentro del contexto joven estudiantil? —MC: Sin duda que la lucha feminista atraviesa la estudiantil. Es interesante ver ese recorrido porque en nuestro interés por la historización, que abarcó desde 2010 a 2018, empezaron a surgir un montón de debates en torno a la Ley de Educación Sexual Integral. Se puede ver a una muy joven estudiante Ofelia Fernández, lo que pasó en el Manuel Belgrano con el doble femicidio (de Nuria Couto y Natalia Grenbenshicova, en 2016). Entonces la discusión de género es transversal a la lucha de los pibes y pibas.  —LR: ¿Cómo respondieron los y las estudiantes a medida que fue avanzado el documental? —MC: Estaban cargados de un estigma mediático que ciertos sectores intentan construir de una generación perdida, o que no tiene proyectos de vida. Y los pibes tienen muchas ganas, hay un montón de proyectos de vida por delante y de herramientas que ellos van construyendo en su propio nucleamiento o encuentro. Y eso se va robusteciendo y complejizando a medida que va pasando el tiempo. Generamos un vínculo previo que nos permitió vivir con ellos estos momentos tan específicos, a diferencia de los medios de comunicación. —LR: ¿Crees que hay algún motivo específico por el que no se encuentra casi material histórico y académico acerca de estos procesos? —MC: El material es escaso, y es como un llamado de atención para los cientistas sociales para poder empezar a poner la lupa para saber qué pasa con estos procesos. Y que vale la pena mencionar que estamos hablando de movimientos que nuclean a más de 4 mil estudiantes. No es un fenómeno espontáneo, se va generando subterráneamente y encuentra sus picos máximos de organización cuando hay algún conflicto que explota o que los confronta muy de lleno. Incluso hay ciertos movimientos estudiantiles dentro de algunas escuelas que tienen una trayectoria de casi diez años. Muchos de estos grupos generan sus propios materiales pero no le dan ese valor documental. Dentro de las redes sociales se puede acceder a un montón de información, fotologs, Facebook que está bastante en desuso. El relato lo fuimos construyendo a partir de los encuentros, sobre la marcha. —LR: ¿El documental se estrenó oficialmente? —MC: La película es de producción completamente independiente, no hemos podido conseguir ningún tipo de apoyo formal de ninguna entidad para poder hacerlo. El domingo 13 de diciembre a las 20 horas se va a estar presentando en un festival, el Transterritorial de Cine Under de la Provincia de Buenos Aires. Será por streaming. Nos pasó que hace unas semanas atrás la pudimos presentar en el festival ATLANTIDOC de Uruguay. Estamos tratando de a poquito de hacerle un recorrido, una marcha. Y en paralelo buscamos algún tipo de financiamiento que nos pueda dar la posibilidad de darle un broche de oro y que técnicamente quede diez puntos.

Lucía Finocchietto y Eugenia Azurmendi, trabajadoras del programa Capacitación Situada del Gobierno de la Ciudad, visitaron Radio La Retaguardia en el programa Mis hijos están con el padre. Contaron la situación laboral de quienes trabajan en estas capacitaciones para docentes en las escuelas públicas, principalmente de primaria, con irregularidades que afectan aproximadamente a 400 personas. (Por La Retaguardia)🎤 Entrevista 👉 Silvio Florio/Braulio Domínguez✍ Redacción 👉 Braulio Domínguez💻 Edición 👉 Pedro Ramírez Otero Eugenia Azurmendi, quien está hace tres años trabajando en Capacitación Situada, nos explica la situación actual del programa: “Este año se da la profundización de la precarización. ¿Cómo implementa este plan la gestión del Gobierno de la Ciudad? Con contratos de locación de obra. Quienes venían trabajando desde antes, lo hacían bajo la forma de horas cátedra, que es el tipo de trabajo que ampara la realidad docente. El de locación del obra es como si un empresario firmara un contrato con el Estado, que es nuestro caso, que tenemos que ser monotributistas, facturar, y cobrar una vez terminado nuestro trabajo; como si estuviésemos construyendo un edificio o un puente”. Y denuncia que “Estos contratos no amparan la relación de dependencia en principio y además el Estado puede revocarlos en cualquier momento. No corre la antigüedad, no nos cubre la ART, no tenemos el aguinaldo, que son todos derechos estatutarios. Toda esta realidad venía de los años anteriores, pero este año se complicó aún más”.La docente Lucía Finocchietto nos aclara al respecto: “Dos personas que hacen el mismo trabajo deberían cobrar lo mismo. Dada esta precarización de los contratos que hay al interior de Escuela de Maestros, algunos de los compañeros tienen horas cátedra y otros compañeros –la mayoría– tienen contrato de locación de obra. Esto hace que por el mismo trabajo hay gente a la que le pagan 10 y hay gente a la que le pagan 18. Estamos trabajando en condiciones completamente injustas y raras”.La incertidumbre había empezado a fin de 2019, pero luego había mermado, tal como nos cuenta Eugenia: “A fin de año pensábamos que el plan se terminaba, pero nos anuncian que la Ciudad de Buenos Aires decide continuar y renovar su plan por cuatro años más. ¿Por qué? Porque realmente había sido muy bien recibida la capacitación entre los docentes. Nosotros lo sentimos así”.Sobre los distintos tipos de capacitaciones que llegan a las escuelas es pertinente la observación de Lucía: “Hay capacitaciones que recibimos los docentes de gente que viene y no conoce una escuela porque hace mucho, mucho, mucho tiempo que no va a una y de repente nosotras, que trabajamos de maestras, transitando la realidad cotidiana de las escuelas, tenemos otro conocimiento  de lo que pasa en el aula”. Azurmendi nos da algunos detalles sobre la vuelta al cole versión Gobierno de la Ciudad: “Cuando arrancó el año y volvimos en febrero a comenzar con estas capacitaciones masivas, empezaron a llegar contratos de dos meses a algunos, de tres meses a otros, de un mes a algunos compañeros, a otros de un año, sin firmar. Son propuestas de contrato, que llegan electrónicamente, nada de ver una cara. Todo es un click. Y con contratos de $10.000, cuando nos habían anunciado en diciembre que los contratos iban a ser de $15.000, equiparando el valor de la hora cátedra de nuestros compañeros. Incluso nos ofrecen menos que el año pasado”.Finocchietto da detalles de los reclamos formales presentados hasta el momento y en qué relación contractual se encuentran: “En Escuela de Maestros hay una autoridad, actualmente está Oscar Ghillione. Obviamente se hicieron numerosas cartas pidiéndole que tengamos una reunión para que nos explique lo que estaba pasando, porque estos contratos, que son muy precarios y muy malos, tampoco están llegando. Nosotras ya comenzamos a trabajar pero no tenemos contrato. Nuestra relación con el Gobierno de la Ciudad hoy sería como una relación de fe. Uno apuesta a que ahí hay una relación laboral. No sé cómo lo tomaría un abogado esto, porque papel firmado no hay ninguno. Pero nosotras ya empezamos a cumplir nuestra tarea. Esto también fue arduo de resolver en asamblea”. Y denuncia: “Empezamos a principios de febrero, con trámites a distancia, que primero te piden una cosa y después te piden otra, y ya la mandaste, no la encuentran, te mandan un mail. Llamás por teléfono y da ocupado, hasta que te atiende alguien y te dice ‘Sí, llegó, pero no llegó’ o ‘Sí, el contrato va a estar la semana que viene’. Hace un montón de tiempo que la semana que viene va a haber un contrato. El director, Oscar Ghillione, siempre se comunica por intermedio de los coordinadores de cada equipo, que son coordinadores pedagógicos, no son nuestros jefes. Además están tan precarizados como nosotros. Es una relación medio perversa esa de usar al coordinador pedagógico para que te venga a transmitir las pésimas o nulas noticias que hay. Están demostrando una gran inoperancia, pocas ganas de resolver el conflicto y mucha capacidad para inventar otros que no existían. Pedimos reuniones por mesa de entrada, con cartas que se firman y demás, pero no se enteraron mucho”. También agrega: “Cuando teníamos que empezar a ir a las escuelas para hacer la capacitación situada dijimos ¿qué hacemos? ¿Vamos o no vamos? Porque es medio raro ir a trabajar sin contrato. Solo algunos tenían. Fue toda una discusión. Al final resolvimos que nos presentábamos, pero para comentar nuestra situación con las docentes de estas escuelas”. Eugenia explica cuál fue la reacción de sus autoridades cuando observaron que no iban a quedarse de brazos cruzados trabajando sin contrato: “Los días anteriores, viendo que estábamos pensando vías para reclamar, fuimos amenazados con que con un click no se iban a dar de alta los contratos. Fuimos advertidos de que íbamos a ser reemplazados por trabajadores de otros equipos”.La violencia va mucho más allá de dejar a centenas de personas sin trabajo o precarizadas. Sobre este tema Lucía reflexiona: “Junto con esa incertidumbre laboral, hay una gran desvalorización al trabajo, porque lo que