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En un nuevo aniversario del golpe cívico-militar, Oral Y Público recordó historias, sensaciones y vivencias de diferentes personalidades: ¿Qué estabas haciendo el 24 de marzo de 1976? Esa fue la consigna propuesta a los entrevistados para recabar testimonios del horror. Referentes de derechos humanos, dirigentes de organismos, ex detenidos desaparecidos, militantes sociales, profesionales, víctimas de la represión del Estado en democracia y familiares de sobrevivientes pusieron en palabras sus recuerdos de la jornada del anuncio oficial del comienzo del golpe que institucionalizó, 40 años atrás, el genocidio que ya había comenzado a tomar forma en el gobierno de Isabel Martínez de Perón. Te invitamos a dejar cómo comentario debajo de esta nota tu vivencia acerca de aquel 24 de marzo de 1976. (Por La Retaguardia)Foto: Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora en la cabecera de la marcha del Encuentro Memoria Verdad y Justicia.Víctor Basterra – sobreviviente de la ESMA“En esos momentos activaba muy duramente contra la dictadura. Ya se habían desatado las tres A (Alianza Anticomunista Argentina) y se veía venir. Es más, había compañeros de otras organizaciones que lo alentaban. Yo, desde pibe, entendí que nunca es cuanto peor mejor. Cuanto peor uno está, menos posibilidades de defenderse tiene. Hay que acumular fuerza, mondongo, espalda para soportar la adversidad. Si ves que el conjunto está a la deriva, vulnerable, triste solitario y final, como diría Soriano, no es fácil enfrentar adversidades. Uno se preparaba ante la alternativa factible que se daba en ese momento de distinta forma. Por eso hablaba de que estaba duramente comprometido. En el interior, en Córdoba, estaba el Comando Libertador de América, acá las tres A, la CNU (Concentración Nacional Universitaria), el CdeO (Comando de Organización), todos los grupos de derecha que venían cascoteándonos, y uno lo soportaba como podía. Andábamos activando, creando agrupaciones. Esa es la historia. Yo era un obrero, un trabajador que andaba en distintas tareas peleando y activando. Vivía en un hotel en Caballito. Ese 24 de marzo lo escuché y me dije a mí mismo: ‘La puta madre que lo parió, mala que viene la cosa’”. Diana Gallardo – Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos“El 24 de marzo de 1976 estaba en mi casa. Esa noche teníamos una reunión con compañeros, militaba en la Juventud Peronista. Toda la célula ya lo venía oliendo, presintiendo, estábamos cerca de los televisores. Todos juntos escuchamos la noticia en casa. La mayoría de mis compañeros han desaparecido, todos. Uno, dos o tres pudieron zafar como yo, sobrevivientes. Seguimos para levantar la bandera de los 30.000 compañeros ex detenidos desaparecidos”. Marlene Wayar – Activista trans, integrante de la Colectiva Lohana Berkins“Yo nací en 1968, era muy pequeña y nadie me lo contó. El primer recuerdo que tengo es con mis hermanas. Teníamos una habitación que daba a la calle en barrio Parque Montecristo, en Córdoba Capital, y una noche me despiertan unos golpes secos, como en los cuerpos, revolcándose en el piso. A mí me dio mucho miedo y me volví a dormir. A la mañana siguiente pregunté en casa qué había pasado y mamá me dijo que no sabía, pero que no podíamos salir de noche porque se estaban llevando a las personas. Me dijo que no importaba que fueras una persona linda, o mala, te llevaban. No hay más relato hasta que yo empiezo en mi pre adolescencia a cursar, junto con el secundario, la escuela provincia de cerámica, el profesorado artístico y técnico de cerámica. Allí era la única gurrumina, con compañeros y compañeras que eran, el más chico, de 25 años, y la más grande de 60. Ahí, sobretodo mis compañeras, empiezan a contarme que en este país donde yo había pasado una infancia feliz con mi familia y demás, existían 30.000 desaparecidos, algunos eran familiares de ellas. Me horrorizó la idea, sobre todo del silencio, de no haber tenido noción hasta ese momento y de haber sido en el mismo momento feliz. Si me preguntaban, mi familia era la familia Ingalls. Eso hizo que yo juzgara a mi papá y a mamá, a quienes declaré inimputables porque se recogieron en su casa a educarnos con el mayor amor y cuidado posibles y sé fehacientemente que no marcaron a nadie, que nunca nos hablaron del odio hacia nadie, nunca nos dijeron que había terroristas; se llamaron al silencio porque eran muy jóvenes con criaturas y obviamente tenían miedo. Papá iba de casa al trabajo y del trabajo a casa. Esos son los primeros recuerdos, creo, y la primera sensación al enterarme fue de espanto por no comprender ese mundo que había pasado frente a mis ojos”.Alfredo Grande – Psiquiatra, psicoanalista y conductor del programa Sueños Posibles “El 23 de marzo de 1976 yo estaba de guardia en Garín, provincia de Buenos Aires, ciudad emblemática que había sido ocupada en su momento por Montoneros. Me fui a dormir aterrorizado porque ya se veía venir. La provincia de Buenos Aires era como una lupa, todo lo que en Capital Federal parecía diluido, ahí era muy concentrado. El 24 me desperté pensando que tenía que atender un paciente y era una enfermera que me decía que desde Escobar le contaban que había habido un golpe de Estado. Garín era un bastión peronista y la sensación de todos fue de terror. Yo, a diferencia de otros compañeros torturados, presos o exiliados, hice un ‘incilio’ interior. Mi hijo mayor, que ahora vive y está muy bien en Brasil, ya había huido por la Triple A. Me quedó esa tarea difícil de resistir y realmente me enteré la brutalidad del genocidio cada semana que iba a Garín por la Panamericana viendo los retenes policiales. Durante meses no supe qué hacer, si huir o quedarme, deseando poder seguir viendo a mi hijo”. Mónica Alegre – mamá de Luciano Arruga“Yo vivía en Morón. Siempre les cuento a mis hijos que mis recuerdos son muy tristes, era la realidad de ese momento. La noche… se sentía el ruido de los coches, que se abrían las puertas, los perros que ladraban,

A pocos días de cumplirse el 40 aniversario del golpe genocida, Alfredo Grande e Irene Antinori dialogaron con Pablo Pimentel, referente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de La Matanza, en el programa Sueños Posibles, que se emite por Radio La Retaguardia. Sus recuerdos del 24 de marzo de 1976, la importancia de marchar este jueves, las deudas de la democracia a la que calificó como “preadolescente” y la necesidad de construir un contrapoder popular fueron algunos de los temas de la charla. (Por La Retaguardia) El 24 de marzo de 1976 “Estaba caminando por la calle Florida, era muy temprano, 8.30, 9 de la mañana, iba a una oficinita que mi viejo tenía en la vieja Galería Güemes, y en el puesto de diarios que está sobre Florida y Bartolomé Mitre veo el título ‘Junta Militar se hace cargo del gobierno nacional. Comienza el gobierno de la Reorganización Nacional’. Me acuerdo que después nos juntamos con mi viejo y me puso al tanto de cómo venía el tema”, así relató Pablo Pimentel su primer recuerdo relacionado con el comienzo de la última dictadura cívico militar.Su viejo era Eduardo Pimentel, cofundador de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, cuya sede en La Matanza integra Pablo. Alfredo Grande, para quien Eduardo fue una de las pocas personas que influyó muchísimo en su vida, le consultó a Pablo qué le decía respecto al golpe: “me acuerdo que él estaba muy preocupado, inclusive yo había estado en reuniones previas a la organización de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos que se hacían en la primera iglesia metodista, que está en Avenida Corrientes al 600, y había estado acompañándolo junto con hombres y mujeres de distintos partidos de izquierda y de sindicatos organizando a la APDH, y advirtiendo que la triple A venía haciendo estragos y que era necesario constituir un organismo más para que se sume a la Liga Argentina por los Derechos del Hombre que junto al Serpaj eran en ese momento los únicos 2 organismos que estaban. Ellos venían advirtiendo la desaparición de personas, había gente que ya se había acercado a denunciar y a presentar habeas corpus que por supuesto eran rechazados. Yo tenía 19 años y mi viejo me dijo ‘yo no les voy a coartar la libertad, lo que les pido es que a partir de ahora a cualquier lado que vayan me digan dónde van a estar’. Estamos hablando del año ’76, que si alguno tenía teléfono de línea en la casa era porque era un privilegiado, no había forma de comunicarse, y en esos momentos quienes estábamos en plena edad de salir a bailar y demás era un problema. Así que yo recuerdo esa charla con él primero respecto a la visión política y después también como padre, las recomendaciones que me hacía”. El 24 de marzo de 2016 Al ser consultado acerca de cuál eran sus pensamientos y reflexiones de cara al 40 aniversario del golpe genocida, Pimentel afirmó: “creo que el mejor homenaje que le podemos hacer a los 30.000 compañeros detenidos desaparecidos, a los miles y miles que tuvieron que cambiar su vida porque se tuvieron que exiliar, a los nietos que todavía no han sido recuperados, es salir a la calle a un grito, aunque sea en distintos horarios de marcha en todo el país, de fuerte reaseguro de que todas las ideas que los compañeros tenían para cambiar un país, para hacerlo totalmente diferente a lo que viene siendo en estos 32 años de democracia, con los más y con los menos, con lo progresista o cuasi progresista, hay un montón de gente con la voluntad de seguirlo y se lo vamos a estar marcando permanentemente a quien esté frente al gobierno, sobre todo con este que viene a restaurar las ideas de Martínez de Hoz, que empezó la dictadura militar justamente con ese proceso de entrega, donde se endeudó para no hacer absolutamente nada con la industria, donde se generó cantidad de desocupados y la deuda creció de 5.000 millones a 35 mil millones para cuando asume Raúl Alfonsín. Con este acuerdo perverso con estos buitres, este señor Macri está reeditando de alguna manera el incremento de la deuda del país, donde va a hipotecar nuevamente a 4 generaciones más”.En este sentido, pidió no tomar al 24 de marzo como un feriado argentino con asado y fútbol: “la verdad que no estoy de acuerdo con el feriado, creo que ese día hay que llamar a la reflexión y marchar, y el que no marcha estar en su fábrica, en la universidad, en el lugar que sea haciendo un acto de reflexión y memoria, porque sino el día de mañana cuando pasen 30 años más va a ser un feriado y cuando pregunten qué pasó dirán ‘hubo un golpe, qué se yo’, como por ahí tomamos el 25 de mayo o el 9 de julio. Creo que hay que poner a discutir nuevamente las organizaciones y llevar al Parlamento que el 24 debe ser un día de memoria y de reflexión donde se discutan por ejemplo todas las violaciones que se vienen cometiendo en democracia. Recordar que en estos 32 años de democracia tenemos a 200 chicos que las distintas policías han hecho desaparecer perversamente, más de 4000 chicos han sido aniquilados por el gatillo fácil y el armado de causas, la cantidad de mujeres que mueren todos los años por femicidios y la locura violenta de este machismo perverso, me parece que todos los días pero el 24 particularmente tiene que ser un día que refleje justamente los derechos que se violan en esta democracia que todavía está en pañales, o en una preadolescencia que para madurar le falta mucho”.Por este motivo, Pimentel consideró que este 24 se debe salir contundentemente a la calle a plantear las barbaridades que está llevando adelante el gobierno de Mauricio Macri: “está echando a tanta gente, tienen que parar con esta ola de despidos, tienen que ser reincorporados. Y debemos

Lo dijo el abogado Nicolás Tauber, miembro y coordinador de Liberpueblo que integra el Encuentro Memoria Verdad y Justicia (EMVyJ), en relación al intento de distintas organizaciones de convocar a una marcha única para el 40 aniversario del golpe de Estado cívico militar. Durante una entrevista con Sueños Posibles, el programa que conducen Alfredo Grande e Irene Antinori por Radio La Retaguardia, Tauber explicó las posiciones en común, las diferencias y por qué habrá finalmente 2 marchas, tal como ocurre desde hace 10 años. (Por La Retaguardia) Daniel Feierstein, doctor en Sociología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires, fue quien dio el primer paso. Convocó a distintos organismos de derechos humanos a una reunión con el objetivo de coordinar la realización de una sola marcha de cara al próximo 24 de marzo, día en que se cumplen 40 años del golpe genocida. Asistieron organizaciones que integran el Encuentro Memoria Verdad y Justicia y también organismos vinculados al último gobierno de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.  “Se empezó a conversar sobre la posibilidad de hacer una sola marcha y nosotros llevamos la propuesta de nuestras consignas. Veníamos marchando con consignas independientes y queríamos que esta marcha también reflejara las violaciones a los derechos humanos durante los últimos años, durante estos 33 años de gobiernos constitucionales. Ahí hubo un intercambio, se quedó en una segunda reunión a 15 días y el mismo día que íbamos a volver a vernos los organismos más referenciados en el kirchnerismo levantaron la reunión, dijeron que no aceptaban seguir discutiendo y convocaron a su marcha media hora antes del horario que estábamos pensando nosotros. Ellos ya sabían que nosotros íbamos a convocar 14.30 y ellos convocaron a las 14 para marchar desde Avenida de Mayo y 9 de Julio, con lo cual las negociaciones lamentablemente se rompieron, no por iniciativa nuestra. Tampoco fue posible algo que se planteó que fue tratar de sacar alguna solicitada o tener algún marco de acuerdo a los efectos de que aunque se realicen 2 marchas se pueda tener una actividad ordenada que permita que se expresen los millones de argentinos que salen a la calle, más allá de tal marcha o tal otra, a expresar su repudio y expresar la lucha por la vigencia efectiva por los derechos humanos hoy. No fue posible, hubo conversaciones y quedaron 2 marchas, la de los organismos más referenciados con el gobierno anterior que plantean hacer una movilización en la que se reivindique expresamente al gobierno de Néstor y Cristina Kirchner, y una marcha independiente, la de todos los años del Encuentro Memoria Verdad y Justicia, que concentra a las 15.30 en Congreso para marchar a Plaza de Mayo”, explicó Tauber.  “Nosotros tampoco teníamos muchas intenciones de hacer una marcha en donde queden relegadas las posiciones independientes – continuó Tauber – y quede diluido en un golpe antimacrista desde el kirchnerismo, por eso también hay 2 marchas, amén de lo que diga cada uno y las reuniones y demás. Nosotros no vamos a bajar ninguna bandera, ni ninguna de las luchas porque los otros organismos de derechos humanos que se referenciaron en el gobierno anterior mantuvieron un silencio cómplice con las violaciones a los derechos humanos durante estos 10 años. No se trata de contarle las costillas a nadie sino de plantarse y tener una posición política clara. A su vez era hipocresía y oportunismo plantear de juntarnos en una única marcha sin documento o con 2 documentos distintos sin discutir absolutamente nada porque por algo, como planteamos en la reunión, venimos marchando en forma separada desde hace10 años. Hasta 2006 había una sola marcha, pero ese año cuando el Encuentro Memoria Verdad y Justicia hizo uso del micrófono y se dijo que en Las Heras había criminalización, represión y tortura, desde el sector del kirchnerismo tiraron piedras al palco, ahí fue cuando se rompió la marcha única del 24, no la rompimos nosotros”. En diálogo con Sueños Posibles, Tauber se refirió al problema político que surgió durante la primera y única reunión en pos de una sola marcha: “el kirchnerismo nos planteaba que ahora el enemigo era uno, Mauricio Macri, que había que unir todo contra él y no había que tener ninguna consigna, ni crítica contra el gobierno anterior, no mencionar absolutamente, se negaban a plantear el tema de la derogación de las leyes antiterroristas, no aceptaban hablar de la criminalización de la protesta, no planteaban la aparición con vida de Jorge Julio López, había un sinnúmero de puntos que no eran meramente reivindicativos. Entonces era una marcha antimacrista kirchnerista o una marcha independiente obviamente opositora al macrismo pero sin dejar de señalar cómo se llegó a esta situación. Los organismos de derechos humanos no pueden ser oficialistas, tenemos que ser críticos del oficialismo que esté aunque sea de nuestra simpatía, porque sino no cumplimos, el Estado viola derechos humanos entonces si nosotros dejamos de decir eso, dejamos de denunciar y de pelear no hay posibilidad. El propio Lenin durante la Revolución de Octubre se negaba a que dejaran de existir los sindicatos y se dejara de pelear contra el Estado por sus reivindicaciones, es un tema básico”. De todos modos, las conversaciones se mantienen. Uno de los puntos es evitar que, tal como ocurrió otros años, la movilización kirchnerista no permita ingresar a la otra a la Plaza de Mayo: “actualmente hay como una pequeña mesa de negociación donde ellos acordaron salir de la Plaza a las 17, otros años no han cumplido el acuerdo, esperemos que esta vez lo cumplan a los efectos de que puedan estar las 2 marchas y se puedan escuchar todas las voces que hay y que el pueblo se manifieste tranquilamente. Para nosotros, obviamente lo peor que le puede pasar al movimiento popular es que haya un problema el 24 de marzo, así que por nuestra parte que marchemos cada uno en la marcha que quiera, muchos independientes marcharán en las 2, otra gente se quedará en la Plaza, la

Dialogamos con Facundo Trotta, el fiscal de la Megacausa de Córdoba, que se encuentra en etapa de alegatos. El representante del Ministerio Público Fiscal describió las características de la primera causa que juzga al mismo tiempo hechos cometidos antes y durante del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976. (Por La Retaguardia)Foto: un sector del ex CCDTyE La Pera (EAAF)A pesar de que se la conoce como la Megacausa La Perla, este juicio abarca los delitos de lesa humanidad cometidos en los centros clandestinos de detención, tortura y extermino La Perla, La Ribera, el Departamento de Informaciones (D2) y distintos destacamentos y comisarías que funcionaron en el interior de Córdoba.Este proceso judicial comenzó en diciembre de 2012 y actualmente está en etapa de alegatos. La fiscalía inició su exposición final en noviembre del año pasado y está previsto que culmine en abril o principios de mayo.“La etapa de alegatos es muy importante para la fiscalía, para el Ministerio Público tener esta posibilidad de dar a conocer sus conclusiones luego de haber pasado 3 años de audiencias. De todos modos, yo siempre digo que el momento más importante en un juicio es escuchar el relato de las víctimas”, expresó el fiscal de la Megacausa, Facundo Trotta, en diálogo con Oral y Público.“Esta causa es conocida en todo el país como la Megacausa La Perla por la sencilla razón de que fue el campo de concentración más grande que tuvimos en nuestra provincia, con la mayor cantidad de víctimas, pero esta causa abarca los centros clandestinos más importantes no solo La Ribera sino también el Departamento de Informaciones y distintos destacamentos y comisarías, con lo cual yo digo que es ‘la’ causa de la nefasta dictadura y el Terrorismo de Estado implementado en Córdoba en un período que va incluso desde el año 1975 hasta 1978, porque nosotros también abarcamos hechos cometidos con anterioridad al golpe. Creo que si uno quiere conocer cómo golpeó la dictadura cívico militar en nuestra provincia con la Megacausa La Perla, como es conocida, uno tiene una visión bien acabada de cómo operó el aparato represor del Estado”, aseguró Trotta.“Hasta ahora hemos tenido juzgamiento de hechos cometidos con anterioridad al golpe –aclaró el fiscal–, pero no de manera conjunta como lo estamos haciendo nosotros en Córdoba. En este caso estamos abarcando precisamente hechos cometidos un año antes del golpe junto con los crímenes cometidos desde el ’76 hasta fines del ’78. En esto sí es una novedad este gran juicio que estamos llevando a cabo en Córdoba”, expresó Trotta ratificando que es la primera causa en la que se juzgan en el mismo proceso hechos cometidos antes y después del golpe de Estado.Respecto al tratamiento que desde el trabajo de la fiscalía se hace de la etapa previa al golpe y de los delitos cometidos ya en dictadura, Trotta explicó que es exactamente el mismo: “nosotros tenemos ya la posición de que el Terrorismo de Estado comenzó mucho antes del golpe y esto queda acreditado en esta causa, obviamente que hay otras causas que también dieron cuenta que los crímenes de lesa humanidad se cometieron con anterioridad al golpe pero lo que se advierte aquí es cómo se dio esa continuidad del terror estatal, de utilizar herramientas, elementos del Estado para cometer crímenes. En este caso es manifiesto, (Luciano Benjamín) Menéndez, que era quien estaba a cargo del III Cuerpo del Ejército, el principal responsable de todos estos crímenes, comenzó a tener responsabilidad a partir de octubre de 1975 cuando asume el control y la jefatura del III Cuerpo, pero ya en marzo veíamos cómo personal militar, vinculado con personal civil; cuya denominación era Comando Libertadores de América, que era la versión de la Triple A en Córdoba, al mando de (Héctor Pedro) Vergez, enviado por el tristemente célebre (José) López Rega; ya estaba abocado justamente con personal del Departamento de Informaciones y bajo las directivas también del interventor (Raúl) Lacabanne, a la comisión de crímenes de lesa humanidad. Los secuestros, torturas y desapariciones en nuestra provincia e incluso específicamente en nuestra ciudad se empezaron a evidenciar mucho antes del golpe”.En este punto de la charla intervino Víctor Basterra, sobreviviente de la ESMA, quien manifestó su aspiración a que la justicia cordobesa se expida, al momento de la sentencia, como corresponde ante este tipo de delitos: “hay antecedentes recientes de comenzar no a liberarlos pero sí a brindarles situaciones de mucha comodidad a aquellos que cometieron crímenes aberrantes. Yo aplaudo, saludo y me congracio con los compañeros, en este caso el compañero judicial, el fiscal, por su trabajo; es cierto que el tema del Terrorismo de Estado creo que se fue estableciendo paulatinamente. Esto era algo que se discutía mucho entre los compañeros, el hecho de si nos estábamos preparando para el golpe, muchos incluso equivocadamente alentaban que hubiera golpe de estado, con ese pensamiento de ‘cuanto peor mejor’, pero nosotros lo estábamos viendo en función de lo que pasaba en Córdoba con el ‘Navarrazo’ hasta lo que vino después, estábamos atentos y casi seguros de que se iba a producir algo sangriento, el problema fue la magnitud que tomó esto, y eso es una cosa que todavía nos sigue sorprendiendo”. El Nabo BarreiroAnte la magnitud de audiencias, víctimas e imputados, resulta inevitable comparar la Megacausa en Córdoba con la ESMA, que también se encuentra en etapa de alegatos. Al respecto, Trotta señaló: “tienen una cierta similitud por la cantidad de víctimas que tienen ambas causas, nosotros hemos superado incluso el número del juicio de la causa XIII (el juicio a las juntas), y eso obviamente lleva tiempo. Nosotros estamos teniendo 3 días de audiencias por semana, alegamos martes, miércoles y viernes. Por el volumen de la causa y la necesidad de analizar cada uno de los hechos, recordemos que el Ministerio Público representa los intereses generales de la sociedad y en esa medida tenemos que darle el trato a cada una de las víctimas y de los hechos que componen esta gran causa, esto

Repasamos junto a la fiscal Mercedes Soiza Reilly la importancia de los pedidos de penas contra los casi 60 genocidas que están en juicio, y de la publicación de notas reparatorias en medios gráficos de aquella época. También escuchamos el análisis de Víctor Basterra, querellante y testigo esencial de la causa. (Por La Retaguardia) En su alegato, los representantes del Ministerio Público Fiscal (MPF) pidieron prisión perpetua para 52 imputados en este tercer tramo de la megacausa ESMA y otras penas de entre 10 y 25 años. Sin duda, un punto destacado de las 108 horas que la fiscal Mercedes Soiza Reilly utilizó para dar a conocer su alegato durante 5 meses y 3 días, fue la solicitud a los diarios Clarín, La Nación, La Razón, Crónica, La Prensa, La Opinión y las revistas Para Ti y Gente para que publiquen notas rectificatorias de las informaciones mentirosas difundidas durante el Terrorismo de Estado. Para mencionar tan solo un ejemplo de los tantos que dio Soiza Reilly, retomamos sus palabras sobre el caso del menor Juan Pablo Moyano, hijo de Elba Altamirano y de Edgardo Moyano: “el día que Elba es secuestrada por los miembros del GT de la ESMA en el domicilio también estaba su hijo y varios menores de edad, hijos de militantes políticos. El 17 de enero de 1978, el Diario Crónica informó en una nota periodística el ‘drama de un niño solo. Cómo pudo perderse’. Y da cuenta de la ‘aparición’ de un niño de un año y medio en las inmediaciones de la calle Italia al 4200 en Munro. Claro está, la crónica omitió decir que la madre del menor fue abordada por integrantes de la marina, golpeada, maniatada y trasladada a un campo de exterminio. Elba fue vista en la ESMA por última vez con vida. Escuchamos en este juicio el relato de un vecino, Santiago Riancho, que nos contó que un sábado cuando llegó a su casa, su esposa tenía dos nenes, una nena y un nenito. Entonces, le preguntó qué pasa, quiénes son; y ella contestó: ‘hubo una redada de los militares, se llevaron a la señora y me dejaron los chicos a mí’. El vecino se dirigió a la comisaría de Villa Martelli, allí la policía argumentando no tener información lo mandó al Juez de Menores. Le contó lo sucedido al juez y éste le dijo que le mandaría a los diarios para que tomaran nota y publicaran la foto de los chicos. Veamos entonces qué dijo Riancho cuando los medios de prensa se acercaron a su domicilio. A su casa fueron los medios Clarín y La Nación, quienes se negaron a publicar la verdad de lo ocurrido, que Elba había sido secuestrada por fuerzas militares. Cuando llegaron los reporteros de Crónica le dijeron: ‘Mire, esto no se puede publicar. Vamos a decir que usted los encontró en la vereda’. Le sacaron una foto y así se publicó en el Diario Crónica. El testigo fue claro con la información brindada por los medios gráficos, una vez más, era falsa”. Crear atmósferas“Yo recuerdo que en el año ’76 se estableció una línea editorial en prácticamente todos los medios de comunicación, uno era bastante ávido de leer cosas, de enterarse, y todos tuvieron la misma impronta. Hubo un cambio notable que se produjo por ejemplo en La Opinión, que ahora no está, nos sorprendió, es como si fuese una especie de (Jorge) Lanata, una cosa espantosa de darse vuelta como una media, de ser una visión crítica y más o menos clara, sus analistas eran más o menos claros en sus exposiciones en los años ’74, ‘75”, expresó Víctor Basterra tras escuchar algunos de los fragmentos del alegato de la fiscalía.“Fue el modelo que se estableció a lo largo del tiempo por parte de esta gente, justamente para crear las distintas atmósferas para que el pueblo se ponga de punta contra los luchadores sociales, fundamentalmente”, agregó.En este punto, el querellante de la megacausa ESMA destacó el trabajo del MPF: “estaba pensando en la investigación tan precisa que ha hecho la fiscalía, es para felicitar calurosamente porque ha sido de una rigurosidad notable, porque ha seguido paso por paso cada una de las mentiras que han dicho estos tipos, tratando de desinformar más que informar como siempre”. Agradecimientos y ovación“Nuestra tarea durante todo el juicio fue activa, desde el Ministerio Público Fiscal tuvimos desde el primer día la tarea de ponernos al hombro lo que fue este juicio más grande de la historia, y frente a esto la verdad que nuestro trabajo fue muy intenso. Creo que este cierre tuvo que ver con esta intensidad que le pusimos desde el primer día de este juicio que lleva ya 3 años, primero en lo que fue la tarea de preparar el juicio con muy poco tiempo, porque nosotros fuimos nombrados 20 días antes de tomar el juicio ESMA, estudiamos toda la causa que es lo que nos llevó más tiempo, las pruebas, y también prepararnos para poder justamente preguntar a los testigos cómo son los casos, meternos en la historia de lo que había sido la Escuela de Mecánica de la Armada más profundamente, en las estructuras y demás”, afirmó Mercedes Soiza Reilly en el inicio de la charla con Oral y Público. El cierre de su alegato estuvo acompañado de una gran ovación de parte de la mayoría de los presentes en la sala de audiencia. En este sentido, la fiscal no tuvo más que palabras de agradecimiento: “a todos los sobrevivientes, en especial a algunos que estuvieron muy presentes siempre acompañando al Ministerio Público Fiscal, también a los familiares que no solo hicieron el aguante de volver a declarar nuevamente en un juicio como este, sino también después presenciarlo desde la sala de audiencias, porque nosotros tuvimos la sala del juicio siempre con mucha cantidad de público, los estudiantes que acompañaron. También está la parte del afecto de los sobrevivientes y de los familiares de las víctimas que nos acompañaron en todos estos largos años.

La fiscal del juicio ESMA, Mercedes Soiza Reilly, solicitó hoy, además de los pedidos de pena para los acusados, que Clarín, La Nación, La Razón, Crónica, La Prensa, La Opinión, y las revistas Para Ti y Gente, publiquen notas rectificatorias de las mentiras publicadas durante la época, “como un acto moralmente reparatorio y de reconstrucción de memoria”. El Ministerio Público Fiscal se refirió a varios hechos que fueron tergiversados y falseados por esos medios y aclararon que “la verdad debe tener el mismo espacio que se empleara en aquella oportunidad con mentiras”.(Por La Retaguardia)Foto: publicación de Clarín acusando a la guerrilla por las desapariciones de las monjas francesas..La sala SUM del edificio de Comodoro Py 2002 desbordó de gente hoy por la mañana para escuchar el cierre del alegato de la fiscalía, que comenzó hace 5 meses y 3 días. La fiscal Mercedes Soiza Reilly, a cargo de la causa junto a Guillermo Friele, utilizó durante ese lapso 108 horas para rearmar el rompecabezas de la historia en el centro clandestino de detención, tortura y exterminio más grande de la última dictadura cívico militar, la ESMA. A poco metros, apenas cruzando la calle, se erigen dos edificios que tienen mucho que ver con la causa: el Edificio Libertad, sede de la Armada, y la capilla Stella Maris, donde Monseñor Emilio Graselli recibía a los familiares desesperados en la búsqueda de sus desaparecidos, y confeccionaba listas con ellos mientras les aconsejaba que no los buscaran más. Por suerte -y también por lucidez- no le hicieron caso. No solo los siguieron buscando sino que también asentaron la memoria sobre la que hoy se construye una justicia tan tardía como necesaria. El rol de los medios de comunicación Tras el secuestro deElba Altamirano, suschicos fueron mostradosen Crónica como abandonados “A partir del cúmulo probatorio analizado e incluido en cada uno de los casos que hemos probado, advertimos que la información brindada por los medios de comunicación de la época deformaron y falsearon la verdad de lo ocurrido”, expresó la fiscal Mercedes Soiza Reilly -a cargo del Ministerio Público Fiscal junto a Guillermo Friele- en su última jornada de alegatos del juicio por el tercer tramo de la megacausa ESMA.En este sentido, remarcaron que las fuerzas armadas han utilizado los medios de comunicación para difundir noticias sobre sus crímenes, presentando a las víctimas de los operativos como “delincuentes, sediciosos, terroristas”.“Estos reportes gráficos eran parte de la propaganda totalitaria para agitar en la población los fantasmas del miedo y del odio. Con claras intensiones de instalar, aún más, la división social entre los ciudadanos”, agregaron.Los fiscales vincularon estas conductas con el plan sistemático de exterminio, ya que los militares ejercieron “acción psicológica” a través de los medios de comunicación.Soiza Reilly remarcó que las fuerzas armadas controlaron los medios, pero además que cada uno de los responsables de estos emporios periodísticos se adaptaron, manipularon, encubrieron y deformaron la información, impactando a su vez de manera directa en cada una de las familias que obtenía una información inexacta de lo que había sucedido con su ser querido.Los medios mencionados por la fiscalía en su alegato son los diarios Clarín, La Nación, La Razón, Crónica, La Prensa y Opinión, al igual que las revistas Para Ti y Gente. En este punto, los integrantes del Ministerio Público Fiscal manifestaron que era “hora de reparar” tanto daño.Miguel Zavala Rodríguez, Norma E. Arrostito, Wenceslao Eduardo Caballero, Carlos Armando Grande, Juan Julio Roqué, Gustavo Grigera, José María Salgado, Fernando Diego Menéndez, fueron tan solo algunas de las víctimas mencionadas en el alegato de la fiscalía, cuyos casos fueron publicados en los medios de manera tergiversad. También hicieron referencia al emblemático caso de Thelma Jara de Cabezas, que habiendo sido secuestrada por los miembros del Grupo de Tareas de la ESMA el 30 de abril de 1979, fue forzada durante su cautiverio a brindar una entrevista gráfica con su testimonio falso. También se hizo referencia a los casos de los 12 desaparecidos de la Iglesia Santa Cruz, luego de que el grupo fuera infiltrado por uno de los imputados, el marino Alfredo Astiz, quien concurría a las reuniones haciéndose pasar por familiar de un desaparecido; Astiz se presentaba allí con una de las secuestradas de la ESMA, Silvia Labayrú, que fue testigo de la causa. En su edición del 18 de diciembre de 1977, el diario Clarín informaba que las religiosas francesas Alice Domon y Leonie Duquet, habían sido secuestradas por la subversión, mientras que el diario La Nación incluía en su publicación del 15 de diciembre de 1977 una crónica titulada “Vivas y con buena salud”. Ambas fueron víctimas de los vuelos de la muerte, que se juzgan por primera vez en este tramo de la megacausa.Los fiscales explicaron que todas estas notas periodísticas estuvieron dirigidas a poner en duda las detenciones ilegales: “los medios gráficos otorgaron a estas mentiras importantes espacios. Eso es lo que se debe rectificar. Ahora se le debe dar espacio a la verdad. El Estado Argentino tiene la obligación de reparar las graves violaciones a los Derechos Humanos cometidas por los miembros de las fuerzas armadas. Pero también debe reparar el daño que aparejaron las falsas informaciones dentro de la prensa. El derecho de las víctimas a que se rectifique la información falsa vertida sobre ellas y el derecho de las familias a una reparación integral de los daños causados. Los derechos a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición se encuentran consagrados en varios instrumentos internacionales de raigambre constitucional, pero sobre todo fueron receptados por nuestros jueces en sus pronunciamientos judiciales”.En este sentido, los fiscales recordaron el reciente veredicto del 25 de noviembre pasado en Bahía Blanca para retomar el pedido de los fiscales de esa causa, Miguel Ángel Palazzani y José Nebbia, quienes solicitaron una rectificación del diario local “La Nueva Provincia” de las publicaciones efectuadas durante el Terrorismo de Estado. También mencionaron la doctrina creada en este sentido por la Corte Interamericana de Derechos Humanos.En su alegato, Soiza Reilly

Mercedes Soiza Reilly, fiscal de la causa junto a Guillermo Friele, nos explicó cuáles fueron las organizaciones políticas perseguidas específicamente desde este centro clandestino de detención, tortura y exterminio que funcionó durante la última dictadura cívico militar. También se detuvo en el caso simbólico de Norma Arrostito, una de las fundadoras de la organización Montoneros. El 6 de julio comenzó el alegato del Ministerio Público Fiscal en juicio por el tercer tramo de la megacausa ESMA. Soiza Rilly se refirió además a la continuidad de las prácticas represivas que quedan evidenciadas en casos como el de Luciano Arruga.(Por La Retaguardia) Tiempos Mercedes Soiza Reilly y Guillermo Friele, como representantes del Ministerio Público Fiscal, se encuentran alegando desde hace 24 audiencias, o si se quiere 60 horas, porque cada jornada tiene una duración de alrededor de 2 horas, 2 horas y media. Sin embargo, el mismo día de la charla con Oral y Público, los fiscales recibieron una cédula del Tribunal Oral Número Nº5 en la que los compelen a terminar su alegato en las siguientes 10 jornadas: “esto es casi imposible en la medida que todavía queda alegar por los casos de los años ’76 al ’83 –afirmó Soiza Reilly– y lo que manifiesta el tribunal es que su pedido se da por la demora que está causando el alegato y el juicio en sí, pero lo que sorprende al Ministerio Público Fiscal es que uno de los jueces ha pedido licencia y en este momento el juicio no se está desarrollando, entonces no pueden pretender celeridad cuando son ellos los que suspenden por 10 días que se transformaron en 2 semanas. El juicio ahora está suspendido por una licencia que tomó uno de los jueces. Estas son las cosas que se viven en el mundillo judicial. El tema es que yo puedo decir que hace 20 audiencias que estoy alegando pero en realidad son muy pocas horas en comparación porque no son 6 horas por audiencia. Igual sabemos que es el megajuicio ESMA, es la causa más grande de la historia de nuestro país, por la cantidad de actores involucrados, por la cantidad de casos, de imputados, hace 2 años y medio que estamos transitando justamente el juicio, entonces tampoco se puede pedir celeridad en el momento más importante para el Ministerio Público Fiscal que es la acusación. Frente a esto nosotros no podemos dejar de nombrar las pruebas que acreditan los hechos ilícitos cometidos dentro del campo de concentración. Lo que vamos a hacer ahora es reponer la decisión y plantear las horas reales que nos quedan para alegar, porque a mí me pueden dar 10 jornadas pero si las jornadas van a durar 2 horas porque un juez o un abogado llega tarde y el juicio no inicia es casi una falacia. Si a mí me dan 6 horas yo sí puedo llegar a terminar el alegato en 10 audiencias. Igual creo que el alegato de la fiscalía está siendo muy dinámico en muchos aspectos, porque lo que nosotros hicimos fue comenzar a analizar la responsabilidad de cada uno de los imputados insertados en las estructuras represivas para ahora comenzar a analizar los casos que forman parte del objeto procesal del juicio”. La ESMA contra el grupo Lisazo La secuencia de caídas delPartido Auténtico “Lo que permite el megajuicio es ver este monstruo que era la ESMA, las acciones de inteligencia tendientes a desbaratar los colectivos políticos, y es así como la ESMA en 1976, se va a enfocar pura y exclusivamente en la zona norte del Gran Buenos Aires, y también en otros sectores pero concretamente los primeros secuestros se dan y se relacionan con la caída de lo que fue el grupo Lisazo o en realidad la caída del Partido Auténtico, que también militaba en la organización política Montoneros. Es el primer blanco de ataque de los miembros del grupo de tareas de la ESMA”, explicó Soiza Reilly al ser consultada por Oral y Público sobre los sectores a los que estaba dirigida la represión. Una de las integrantes de este grupo era Clara Laura Tauvaf de la que aún se intenta reconstruir su historia y que, todo indica, escapó de la patota de la ESMA; aún resta saber si lo hizo de aquel lugar o de un “paseo” fuera de la ESMA. Tauvaf fue recapturada y está desaparecida. Al respecto, la fiscal manifestó: “nosotros probamos eso y con el relato de una de las sobrevivientes históricas también pudimos determinar que uno de los captores, cuando la secuestró, buscaba material documental en la casa y encontró un cable de la agencia clandestina de noticias o puede haber sido de otra agencia, pero se hablaba de un cable donde justamente se daba cuenta de la fuga de una joven. Tendría que precisarlo mejor pero creo que fue Norma Burgos la que dijo que cuando fueron a secuestrarla hallaron en la casa este cable donde las organizaciones políticas advertían que en la Escuela de Mecánica de la Armada estaban secuestrando y torturando de determinada manera; frente a estas torturas una de ellas era el sonido de una sierra y amenazaban a esta joven Tauvaf con cortarle los dedos. Cuando uno de los represores secuestra a esta sobreviviente le dice que en realidad el ruido de la sierra era porque estaban haciendo refacciones y era la amenaza que le hacían a la joven que logra fugarse. Nosotros frente a esto pudimos hacer la reconstrucción, coincidiendo con este relato de la famosa fuga y el comentario que habría hecho esta joven a Arnaldo Lisazo; frente a esto Arnaldo activó la maquinaria o por lo menos las editoriales militantes y allí daban cuenta de la fuga de esta joven. Nosotros avanzamos un poco más en eso y pudimos determinarlo, pero no sabemos si se fugó de la ESMA o de otro espacio clandestino anexo a la Escuela de Mecánica”. Los mayores referentes del Grupo Lisazo eran María del Carmen “La China” Núñez y Jorge “Nono” Lisazo. Según explicó Soiza

Cómo obtuvo los negativos y las fotos de los militares y sobre todo cómo los sacó de la ESMA para luego presentarlos ante la Conadep. ¿Qué otros documentos rescató además de las ya legendarias fotos? En la mayoría de las emisiones de Oral y Público contamos con la palabra, la reflexión y la voz de Víctor Basterra. El sobreviviente de la ESMA es un integrante más de este equipo de trabajo; sin embargo, esta vez quisimos entrevistarlo para que nos cuente su experiencia en el Centro Clandestino de Detención, Tortura y Exterminio que funcionó en el predio de la Escuela de Mecánica de la Armada. (Por La Retaguardia) What can I expect from playing at Fair Go? Read our detailed review here https://www.solidsmack.com/gaming/offline-vs-online-casinos-in-australia-which-one-wins-big. Evaluate the benefits of playing at Fair Go: games, bonuses and player support. Víctor Basterra es -para el puñado de sobrevivientes, los fiscales e incluso para los imputados- el testigo clave de la Megacausa ESMA. También es el primer eslabón en la reconstrucción histórica. Si bien ese lugar lo ocupan todos los testigos con sus valientes testimonios, el aporte documental de Basterra y su capacidad para comprender, en el terrible momento de los hechos, la importancia de recuperar documentos, no solo de memorizarlos, lo coloca en ese lugar especial. Él lo sabe, y por eso resalta su testimonio gráfico por sobre el oral: “eso no tiene contra; además, en ese testimonio documental, se da una mirada muy precisa sobre -por ejemplo- los nombres de los tipos. Muchos ni sabían que alguien podía robarle el nombre de esa forma, y eso se hizo con esa memoria de la que uno está más o menos dotado. No me gusta la autorreferencia, no soy amigo de eso, uno siempre es parte de un conjunto, de un colectivo grandísimo y cada uno ha ido aportando un montón de cosas, por supuesto hay quienes siempre aportan un poco más; lo que sí señalo es que ha sido tanto el odio, la sorpresa o la decepción que les produjo en relación a sus procederes con respecto a mí o a otros compañeros, que los tipos entraron en una especie de furia. Leyendo alguna vez la sentencia en el Juicio a las Juntas, los jueces dicen y toman como ciertas las palabras de más o menos 25 represores, que en el momento de ese año ‘85 dan a conocer el odio que tenían hacia mí, (dicen) que yo era un personal rentado y un montón de cosas; y ahí yo me di cuenta de que les había producido mucho daño”. Mitigando el dolor con humor Algunas de las fotos de secuestrados en la ESMA que Basterra rescató. (Foto: IEM) Al ser consultado sobre si alguna vez había podido hablar de estas palabras de la sentencia con los jueces de aquel juicio, Basterra explicó: “lo que pasa es que siempre lo tomo un poco a la chacota, lo tomaron ellos y yo también lo tomé. Justamente uno de los jueces es una especie de pariente mío, lamentablemente ya fallecido, el doctor Andrés D’Alessio; el hijo, Andresito, es el marido de mi sobrina mayor, y alguna vez cuando se casó mi sobrina, nos encontramos en la casa, estaban (Ricardo) Gil Lavedra, (León) Arslanián, (Julio César) Strassera, todos juntos charlando, y bebiendo copiosamente y me cargaban, me decían cosas. Me cargaban porque uno de ellos quería viajar y no había actualizado el pasaporte, entonces le decían que me lo encargara a mí, y yo les decía que atendía después de las 18 horas”. -Eugenia Otero: Debe haber sido doloroso que en la sentencia del juicio se haya dicho eso de vos… -Víctor Basterra: No olvidemos que los jueces (del Juicio a las Juntas) habían jurado en algún momento las actas del proceso. La Comisión de Asesoramiento Legislativo obligaba a los jueces a firmar una especie de aprobación de un estatuto propio de la dictadura, y ellos se atenían a eso. Todos estos jueces eran parte de ese Poder Judicial, no es que a partir de diciembre de 1983 habían sido jueces que aparecían recién… no, tenían sus trayectorias, todos ellos, incluso (Eugenio Raúl) Zaffaroni. Son tipos que han tenido una actitud digna posteriormente, pero yo no entraba a discutirles eso, yo lo que veía era toda la maniobra que había sido, para mí y para muchos de los sobrevivientes, el Juicio a las Juntas, al que siempre medio que se lo endiosa, y yo no soy muy amigo de endiosar esas cosas, porque fue la preparación del terreno para que vengan cosas malas; ponen una cosita ahí donde de miles de tipos que están involucrados quedan 3 nada más o 4, 5, y pará de contar, y durante 20 años hubo una impunidad absoluta, hasta que empezó a empujar desde España (Baltasar) Garzón y se fueron prendiendo y a lo último primero se derogaron y después se anularon las leyes, pero estos 20 años los tuvimos encima”. Herramienta de resistencia Algunos de los listados que recuperó de la ESMA. (Foto: La Retaguardia) La clave del testimonio de Víctor Basterra son sus fotografías, pero también su memoria para registrar nombres, apellidos y apodos de los represores. “Yo era bastante memorioso –recordó el sobreviviente de la ESMA– y después eso se agudizó porque era la única herramienta de resistencia, el único recurso que yo tenía para primero ir palpando cuál era la realidad que se vivía en esos lugares. Además soy un tipo muy paciente, soy de esos que son absolutamente creídos que la venganza es un plato que se come frío y es la hija del silencio, entonces uno vive en esa frialdad y en ese silencio interior, donde no puede permitir que le entren las balas de la angustia; si bien entran, uno debe sobreponerse a lo que está intuyendo que puede llegar a ser, eso es lo que a mí me dio lugar a ser paciente, tranquilo, ir midiendo todas y cada una de las cosas, y como resultado hice cosas que no sé si

Otro genocida que muere impune y en raras circunstancias: Oscar Rubén Lanzón, conocido durante mucho tiempo como “Horacio Gurati”, estaba por recibir condena en el actual tramo de la megacausa ESMA, pero apareció muerto por asfixia en su casa, sin que hayan quedado claras las circunstancias hasta aquí. Víctor Basterra describió al personaje que cumplía prisión domiciliaria y fue uno de los jefes del grupo de tareas de la ESMA, y no descartó que haya sido asesinado. (Por La Retaguardia) La Fiscalía Nº32, a cargo de Ana Yacobucci, se encuentra investigando la muerte de Oscar Rubén Lanzón. El represor apareció sin vida en el departamento donde cumplía prisión domiciliaria y en un principio se pensó que el fallecimiento se había producido por la inhalación del humo de un incendio; sin embargo aún no están los resultados de los peritajes que lo confirmen. En diálogo con Oral y Público, Víctor Basterra, sobreviviente de la ESMA, dio cuenta de sus dudas respecto a esta muerte. Antes de LanzónVíctor Basterra explicó que Lanzón fue jefe de inteligencia del grupo de tareas 3.2 de la Escuela de Mecánica de la Armada, que sucedió al capitán Luis D’Imperio, alias Abdala: “Lanzón asume en la administración del grupo de tareas en enero, febrero del año ’80 y es responsable de las desapariciones de todo ese año y parte del ’81. Durante 1980, cuando él asume, se endurece todo, comienza de nuevo con una rigurosidad que se había flexibilizado durante la época de Abdala. Yo siempre digo que Abdala fue un tipo contradictorio, generó muchas contradicciones a muchos compañeros; no a mí. Recuerdo que nos trasladó a muchos de los que estábamos en Capucha a unas fiestas que se hicieron en el Casino de Oficiales, en el sótano, al lado de la huevera donde se torturaba. El 24 de diciembre de 1979 y el 31 de diciembre de 1979, en las fiestas de Navidad y Año Nuevo, donde había comida, manjares, bebidas, todo… Y ahí estábamos los que estábamos casi en el infierno junto con otros compañeros que estaban con un régimen distinto, y esto nos desestructuraba, nos rompía el esquema, muchos de los compañeros que fueron ahí incluso los llevaron a una quinta  y muchos están desaparecidos”. Lanzón / Gurati Quien sucede a Abdala al frente de inteligencia del grupo de tareas de la ESMA es Oscar Rubén Lanzón: “oficia de jefe de inteligencia durante todo el año ’80 siendo responsable de la desaparición de este grupo de compañeros al que se llamó el Grupo Villaflor (al que Basterra pertenecía y del que es el único sobreviviente), el responsable de la desaparición de los compañeros que habían caído a fines del ’79 y en el ’80, así que el tipo hasta las bolas metido en toda esta historia. Después fue a la jefatura de inteligencia de la Armada; un tipo que después entró en una especie de crisis, fue alcohólico, después tenía una clínica psiquiátrica; en los últimos tiempos tenía inconvenientes seguramente llamado por su conciencia, si es que la tenía… tenía por única compañera y amiga a una plantita, andaba con la plantita todo el día, creaba conflictos en Marcos Paz donde estuvo detenido. Y en la última etapa, en este último tiempo, se supo que tenía prisión domiciliaria”, expresó Basterra.Las dudasEn este sentido, Basterra se manifestó de acuerdo con un escrito de José Schulman, integrante de la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, respecto a la necesidad de “desterrar la prisión domiciliaria de los delitos de lesa humanidad”. Basterra dijo que “ha sido aprovechada por muchos de los represores para pasar una buena jornada y también para dar lugar a estas muertes sospechosas, porque Lanzón acaba de morir aparentemente por asfixia, pero se suponía que había sufrido un incendio en su casa, que no fue así. El submarino seco es una forma de producir asfixia y todos estos tipos que en algún momento entran en crisis, como pasó con (Horacio) Estrada, con (Héctor) Febres, son pasibles de las furias de los hombres de esta comunidad. No olvidemos que si bien en estos momentos están siendo juzgados más de 60 sujetos, detrás de ellos hay un montón de personajes que está en las más altas esferas de las jefaturas de la Armada o del Ejército, la Policía, de lo que sea, que no han sido nombrados y sin embargo tienen responsabilidades a lo largo del tiempo en todo lo que fue la represión sangrienta con los visos de persecución sistemática y de destrucción sistemática de la sociedad”, aseveró Basterra.Lanzón no había recibido condenas y estaba imputado en el tercer tramo del megajuicio ESMA que se encuentra en etapa de alegatos. Como se manejó con un alias, Horacio Gurita, llevó mucho tiempo ubicarlo y recién fue identificado en 2003. “Varios compañeros lo identifican, lo reconocen primero por la foto que pude rescatar, y después se da el reconocimiento que logró a partir de distintos medios José Vales, el corresponsal de periódicos y diarios mexicanos, un compañero que es argentino; él pudo conocer su identidad cierta. Incluso Lanzón sin yo haberme dado cuenta, en el Juicio a las Juntas, en la primera sentencia, de la que se cumplen ahora 30 años, los tipos me acusan a mí de ser integrante del grupo de tareas como especie de colaborador rentado, como que yo cobraba como un suboficial… esas mentiras que dan al ser descubiertos, y este tipo estaba dentro de esa nómina, como (Alfredo) Astiz, (Ricardo Miguel) Cavallo, (Carlos) Capdevilla, todos tipos que conocía e identificaba perfectamente por sus nombres, pero no a este Lanzón, así que durante mucho tiempo permaneció en una especie de oscuridad llamándose Gurati, yo no lo involucraba como Lanzón que es su nombre real. Así que bienvenidas todas estas historias que se han ido conociendo a lo largo del tiempo, aunque lamentablemente este es un tipo que muere impune”.“Se empiezan a revisar las cosas –continuó el sobreviviente de la ESMA–, los tipos entran en crisis y pasan estas cosas. Estos ñatos, incluso

Raúl Scheller, genocida, uno que nomurió impune. (Por La Retaguardia) El miércoles 12 de agosto falleció a los 70 años el represor Raúl Enrique Scheller, capitán de navío (RE). “Mariano”, “El Pingüino” o “Miranda” fue integrante del grupo de tareas 3.3 de la ESMA y luego formó parte del Centro de Documentación de la Armada. Murió en la cárcel de Marcos Paz, con una condena a perpetua de 2011 y mientras era juzgado en el tercer tramo de la Megacausa ESMA, que ya está en etapa de alegatos. En el programa Oral y Público, que se emite por Radio La Retaguardia, Víctor Basterra, sobreviviente de aquel centro clandestino de detención y parte del equipo del programa, trazó un perfil de Scheller. “En el momento de nuestro secuestro en agosto de 1979, Scheller era el segundo jefe de inteligencia, el primero era (Luis) D’Imperio. Scheller era hombre del riñón propio de la armada dura, era un torturador; yo no lo vi a él directamente, vi a algunos cuando se me levantaba la capucha, pero seguramente estaba ahí. Sí participó en algunos momentos de las pausas que hacían, en las preguntas era él, él estaba ahí, es decir que al menos era interrogador en las sesiones de tortura, y seguramente era torturador también porque los tipos estaban dedicados a la inteligencia. Él era hombre de la armada, del grupo de tareas, mientras D’Imperio era hombre del SIN (Servicio de Inteligencia Naval). En ese momento la jefatura de Inteligencia estaba en manos del SIN, pero quienes estaban contrabalanceando el poder eran los del grupo de tareas y justamente el segundo jefe de inteligencia pertenecía al grupo de tareas, o sea que era un hombre de confianza”, relató Víctor Basterra.Raúl Enrique Scheller estaba detenido en la cárcel de Marcos Paz cumpliendo la condena a perpetua que había recibido en 2011 por los delitos de lesa humanidad cometidos contra 86 personas, en el marco del juicio por el primer tramo de la Megacausa ESMA. A Scheller en particular, el tribunal lo había hallado culpable de 19 casos de privación ilegal de la libertad e imposición de tormentos, y por 12 de ellos también se lo responsabilizó de sus homicidios calificados. Actualmente se encontraba entre los imputados del juicio por el tercer tramo, en el que junto a otros 67 represores estaba siendo juzgado por delitos contra 150 víctimas. MicrofilmacionesEn otro segmento de Oral y Público, Víctor Basterra relató que alrededor de junio de 1983, Scheller fue al centro clandestino de detención, tortura y exterminio que funcionaba en el predio de la ESMA junto al capitán Jorge “Tigre” Acosta, Alberto “El Gato” González Menotti y otros colaboradores que eran antiguos oficiales de inteligencia en el grupo de tareas: “aparecen a recopilar toda una serie de datos y microfilmaron todo el material, todo lo que consideraban importante. Microfilmaron miles y miles de hojas durante mucho tiempo, durante tres meses todos los días, hasta la noche, trabajaban con sus colaboradores. El material que ya había sido microfilmado fue quemado, esa había sido un poco la orden de Bignone (Reynaldo, último presidente de la dictadura), que más o menos la dio a conocer en octubre, creo que fue, pero ya había sido microfilmado todo. Sobre ese material se decía que lo tenía Acosta, se decían muchas cosas, en época ya del Estado de Derecho se habló de que había sido llevado a distintas partes del mundo y depositado ahí, todo manejado por la Armada. Eran elementos de inteligencia que se manejaron ahí, seguramente habrá habido algo en la SIDE”.Sobre la importancia de hallar estas microfilmaciones, Basterra explicó: “sería un gran ordenador porque se sabría perfectamente, si se lograra desclasificar todo eso, en qué área estaban, en qué centro clandestino estuvieron los compañeros… no nos olvidemos que ellos nunca hablaron porque si lo comenzaban a hacer se mandaban al frente entre ellos, por eso silenciaron a todos los que fueron silenciando desde (Horacio) Estrada hasta (Héctor) Febres y ahora se están muriendo estos. En algún momento hubo uno al que la muerte lo alcanzó antes de que terminara sus registros escritos, que fue Juan  Antonio del Cerro, ‘Colores’. Él empezó a hablar en la cárcel y así yo por ejemplo conocí los nombres de algunos ñatos que uno se preguntaba quién era, como el caso de ‘Rodilla’ por ejemplo, y este tipo los daba a conocer. Pero Del Cerro empezó a hablar y lo alcanzó la muerte antes”. Colores perversosEn relación a Juan Antonio del Cerro, Basterra recordó: “yo siempre era un espectador de los diálogos entre ellos, no participaba; en un momento determinado estaban jugando al ajedrez o a las cartas, Colores mira el reloj y dice ‘uh, se me está haciendo tarde, tengo que ir a la psicóloga’, y los compañeros le dijeron cómo iba a la psicóloga si él era muy fuerte. ‘No, boludo, ¿te crees que es fácil chuparse a un tipo y darle máquina?’, respondió. Ese tipo, en su momento, empezó a hablar algo, era un maestro de torturadores, terrible hijo de puta, fue el primero que me dijo ‘Sacate la capucha y mirame, la próxima vez que me veas en la calle, yo te voy a pegar un tiro en la cabeza’. Según decían, entre El Gato y Colores habían creado la Carolina, que era la máquina que por ejemplo me dieron a mí, que no deja marcas, produce el mismo efecto que la antigua pero sin dejar marcas, evitaban así el olor de carne quemada y las lastimaduras en el cuerpo”.Según relata Mario Villani en su libro “Desaparecido. Memorias de un cautiverio”, Del Cerro, conociendo las habilidades de Villani para reparar elementos eléctricos, le entregó una picana que había dejado de funcionar para que la reparara. Villani, que estuvo secuestrado en cinco centros de tortura de la dictadura (Atlético, Banco, Olimpo, Pozo de Quilmes y ESMA), dudó pero a la vez sabía que no podía negarse. Entonces inventó un acto de resistencia: la reparó, efectivamente, pero le dio un voltaje menor que