11 años de la Masacre de Avellaneda: “Darío y Maxi no están solos”
Por LR oficial en Uncategorized
Nora Cortiñas, infaltable en la lucha |
(Por La Retaguardia) Este 25 y 26 de junio, se realizaron dos jornadas de charlas, actividades culturales, movilizaciones y cortes en la Estación Darío y Maxi, ex Avellaneda, y en el Puente Pueyrredón, para dar cuenta de que los ejemplos de Maximiliano Kosteki y Darío Santillán continúan multiplicándose. Repasamos las principales voces que se escucharon allí sobre la impunidad de ayer y de hoy, sobre las luchas y resistencias en Argentina y en toda Latinoamérica. Además, dialogamos con Hernán Ouviña, del Movimiento Popular La Dignidad, que junto a En Movimiento TV realizaron el documental “Maximiliano Kosteki, constructor de caminos”.
La transmi de la RNMA en la Estación |
Como todos los años, la jornada del 25 de junio estuvo acompañada por una transmisión especial de la Red Nacional de Medios Alternativos. Esta vez, una de las charlas se desarrolló bajo la consigna “Contra impunidad de ayer y de hoy”, y permitió de alguna manera hacer un repaso del contexto social y político al que se llegó a este nuevo aniversario de la Masacre de Avellaneda.
En representación de la Red Nacional de Medios Alternativos (RNMA), Fernando Tebele habló de los desaparecidos de hoy: “todos los días hacemos notas sobre este tema, a nosotros nos encantaría hablar con Norita Cortiñas, con Cacho Fukman, con los sobrevivientes y familiares de víctimas del genocidio, sobre la búsqueda de justicia, pero sin embargo seguimos hablando en nuestros medios de los desaparecidos de hoy. Logramos instalar el tema de Luciano Arruga pero todavía no pudimos instalar el de Daniel Solano, desaparecido en Choele Choel en 2011 por denunciar la época. Y la única manera de quebrarlo es con organización y lucha, y con medios que puedan acompañar la denuncia para que estas nuevas víctimas del sistema no se sientan solos”. Luego Federico Efrón, integrante del Centro de Estudios Legales y Sociales, se refirió a la criminalización de la protesta: “Si uno piensa en Félix Díaz, que es el representante de la Comunidad Qom La Primavera, elegido por la comunidad para salir a reclamar las tierras que les corresponde, ha atravesado en los últimos años cinco causas distintas. Una, por el delito de corte de ruta, es decir por estar en la calle protestando; dos por usurpación, es decir por ocupar las tierras que están reclamando, y las otras dos tienen que ver con lo que pasó el mismo día que los reprimieron. Este es como un mensaje para todos aquellos que surgen como referentes. Lo mismo sucedió con el Parque Indoamericano, costó muchísimo que se llame a indagatoria a los treinta y tres policías de la Metropolitana, y a doce de la Federal, pero no costó que avanzaran las causas contra los militantes sociales que estaban ese día. En las dos situaciones, la respuesta estatal viene a ser la represión y la criminalización. Lo mismo sucede con los delegados de Kraft que estuvieron reclamando en la Panamericana y están imputados por el delito de corte de ruta, que tiene una pena muy baja, excarcelable, y el fiscal de la causa hasta se tomó el trabajo de pedir la prisión preventiva para dos de los trabajadores”, indicó Efrón. En tanto, Enrique “Cachito” Fukman de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos dijo: “en la dictadura cuando desaparecíamos algunos decían ‘por algo será’, ya en democracia nos decían que ‘por algo fue’ que nos llevaron. Y tienen razón, por algo nos llevaron, esa es la verdad, no nos llevaron porque se equivocaron, porque eran muy malos, se nos secuestró, se nos torturó, se nos desapareció, se violó, se cambiaron identidades, se asesinó; por el lado de ellos porque querían destruir, hacer desaparecer cualquier forma de organización popular, pero del lado nuestro fue porque tuvimos la decisión y voluntad de enfrentarlos porque queríamos construir un país sin ninguna forma de opresión y explotación, y por lo tanto sí o sí debíamos enfrentar a esa dictadura genocida”. Finalmente, Nora Cortiñas, de Madres de Plaza de Mayo-Línea Fundadora, hizo un repaso por distintos países no solo de Latinoamérica en los que se viven momentos represivos y en donde también hay grupos de madres que reclaman por saber dónde están sus hijos desaparecidos. Además, se refirió a la importancia de asistir a los distintos juicios por de delitos de lesa humanidad que se están desarrollando: “tenemos que seguir, tenemos que apoyar, hay que ir a los juicios, porque a veces está lleno de amigos de los milicos y en donde tenemos que estar nosotros hay dos o tres familiares de algún testigo, entonces tenemos que ir. Y ya que tenemos algunos jueces como la gente, vayamos para decirles que queremos toda la justicia, toda la verdad, toda la memoria, y no queremos reconciliación, ni perdonar estos crímenes, queremos que vayan a cárcel común y para siempre”.
Desaparecidos en democracia, criminalización y judicialización de la protesta social, persecución a referentes de comunidades originarias, usurpación de tierras que ancestralmente les pertenecen, la búsqueda de cárcel común para todos los responsables del genocidio durante la última dictadura cívico militar son algunos de los temas que ocupan parte de los contenidos de los medios alternativos populares y comunitarios, y de las luchas que se libran diariamente, y recorrieron las jornadas de este 25 y 26 de junio, en el que se cumplieron once años del asesinato de Darío Santillán y Maximiliano Kosteki.
Durante estos dos días hubo tiempo para escuchar las experiencias de distintos referentes de organizaciones populares sociales y políticas de Latinoamérica en el panel “Voces de las Resistencias Latinoamericanas”. Además, se realizaron murales e intervenciones en las paredes de la Estación Darío y Maxi, y actuaron Raly Barrionuevo, Los Cumpitas del Barrio, Anarkumbia Tirapiedras y La Víctor Jarra. A su vez, se escucharon los testimonios de familiares, amigos y compañeros de militancia de Maxi y Darío, y se hizo un repaso de los responsables políticos de la Masacre, el estado de sus causas, qué cargos ocupan hoy, y quiénes son candidatos para las elecciones legislativas de este año. También se presentó el documental “Maximiliano Kosteki, constructor de caminos”, realizado por el Movimiento Popular La Dignidad (MPLD) y En Movimiento TV.
Desde La Retaguardia dialogamos con el sociólogo Hernán Ouviña, del MPLD, sobre cómo se llevó adelante este proyecto que rescata la figura de Maxi. “Ocurre que está muy presente en el activismo, la militancia, en general en los sectores populares la figura de Darío Santillán por el gesto noble que implicó entrar a la Estación e intentar socorrer a Maxi de la represión – explicó Ouviña –. Sin embargo, la figura de Maxi ha quedado opacada, y en ese sentido se conoce poco quién era Maxi, no solo la dimensión militante en el MTD, su leve pero intenso recorrido en Guernica, sino también toda su faceta cultural y artística, él era un dibujante muy inquieto, que plasmaba con toda su vocación artística esas inquietudes, esa búsqueda interior y también toda la solidaridad a través de esos trazos que están presentes en muchísimos de sus dibujos. La idea del documental es poder rescatar en todas esas dimensiones a Maxi Kosteki como un joven rebelde, contestatario y solidario y lo que va hilando el documental son los relatos de su familia, fundamentalmente de sus tres hermanas, de sus amigos y amigas, más del palo cultural del conurbano, que también es muy interesante ver cómo se entretejía a finales de los noventa, principios del 2000-2001 y cómo confluía esa cultura rebelde juvenil con los movimientos de trabajadores desocupados”.
En el documental aparece reflejado un montón de gestos nobles de Maxi tanto como artista como en términos más propiamente del movimiento piquetero al que él se había sumado muy poquito antes de ese 26 de junio, de hecho ese día estaba participando de su segunda marcha: “hay una frase muy recurrente que es que siempre planteamos a Maxi como un artista que no dejaron ser, pero también como un militante integral que no dejaron ser, estaba iniciándose de manera solidaria en el MTD”, aseveró Ouviña. Dos jornadas intensas en las que quedó marcada una vez más la lucha que desde diversos sectores se lleva adelante para construir un país sin ninguna forma de opresión y explotación, el mismo por el que peleaban Darío y Maxi, el mismo del que habló Cacho Fukman.