Polémica por el boliche Zoom: ¿homofobia o prostitución?
Por LR oficial en Uncategorized
(Por La Retaguardia) Un fuerte cruce de declaraciones cruzadas y acusaciones entre la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) y la Fundación La Alameda, se generó hace unos meses luego de que la ONG que preside el ahora legislador Gustavo Vera, denunciara el funcionamiento de un prostíbulo en el boliche gay Zoom del barrio porteño de Recoleta, caracterizado como lugar de encuentro por la CHA, que motivó su cierre temporario y la apertura de una causa judicial.
El conflicto lleva ya varios meses pero en octubre cobró mayor notoriedad luego de que la justicia resolviera volver a clausurar el boliche Zoom tras las reiteradas denuncias de La Alameda y vecinos de la zona, que incluyeron escraches, y la posterior carta presentada por la CHA en la Legislatura porteña para rechazar la asunción de Gustavo Vera a su banca tras ser electo en los comicios del 27 de octubre pasado.
“El problema con Zoom viene hace bastante tiempo y La Alameda no clausura ni habilita espacios, sino que lo que hacemos es denunciar concretamente lugares donde entendemos que hay infracciones a la ley que van desde la violación a la ley de profilaxis, trata de personas, narcotráfico, etcétera. En el caso puntual de Zoom, estaba dentro de un paquete de 45, 50 prostíbulos que presentaron los vecinos de Recoleta en el mapa del delito. Lo logramos comprobar a través de los testimonios de un montón de vecinos, y está en una causa del juez federal (Ariel) Lijo que en Zoom se pagaban efectivamente los pases. Zoom funciona como ‘el swinger de Anchorena’, en sí mismo que sea un swinger no es ni bueno ni malo, queda a criterio subjetivo de cada uno, pero la trampa del swinger era que muchos tipos iban solos y obviamente había un plantel de diez chicas, que quienes no tenían pareja para intercambiar pagaban el servicio sexual. Zoom es exactamente lo mismo, nada más que a nivel masculino. Si vos vas solo a Zoom y no levantás a nadie, si querés garpás y tenés un servicio sexual. Le estás garpando a la empresa Linnon S.A. Se pagan los pases, tiene cuatro clausuras, tiene una causa abierta en el juzgado federal, no estamos hablando de suposiciones sino de cosas concretas, y que vos seas homosexual, de color negro, de cualquier minoría históricamente perseguida te da derecho a plenos derechos pero no derecho a violar la ley”, explicó el legislador por el bloque Verde Alameda, Gustavo Vera, en dialogo con La Retaguardia.
Cuando Vera habla de mapa del delito, se refiere a un trabajo colectivo que hacen los vecinos que comienzan a juntarse en asambleas, preocupados por hechos de inseguridad o por la aparición de talleres clandestinos: “entre todos los vecinos vamos elaborando lo que se llama un mapa del delito, que es tomar la jurisdicción de una comisaría y a partir de ahí organizar actividades de denuncia”, agregó el titular de la Fundación La Alameda.
Sin embargo, desde la Comunidad Homosexual Argentina, su presidente César Cigliutti, en declaraciones al programa radial Sueños Posibles, que conduce Alfredo Grande, manifestó: “todo empezó por varias denuncias, realizadas por una ONG que se llama La Alameda, que es bastante conocida, porque uno de sus representantes es el señor Gustavo Vera. Con el tema de la trata y todas esas denuncias, empezaron a denunciar cualquier cosa, y entre ellos los lugares de encuentro de nuestra comunidad. Y entre esos lugares de encuentro está Zoom, que es un bar donde se encuentra la gente, se conoce, se toma algo, hay mesas. Lo que sucedió es que por estas denuncias se hicieron varias razzias. La primera fue el 17 de mayo, con todo lo que implica una razzia:, prender las luces, agarrar a todas las personas que están adentro, palparlas, revisarlas, anotarlas en una planilla, esto lo hizo el titular de la Agencia Gubernamental de Control (AGC), que se llama Juan Gómez Centurión, y cerraron el local. Después Vera salió a decir que era un antro de perdición, que había trata, todo un montón de mentiras que se están investigando ahora. Nosotros estamos en contacto con el dueño, conocemos el lugar, sabemos que lo que no existe ahí es justamente trata de personas ni ninguna cosa relacionada a la prostitución, y estamos defendiendo el lugar de encuentro como lo hacemos históricamente, hace 29 años, porque son lugares de reivindicación de nuestra orientación sexual”.
Acusaciones cruzadas
Cigliutti aseguró que tras las denuncias, desde la CHA le informaron a La Alameda de qué se trataba Zoom, desde hace cuánto tiempo funcionaba, dieron cuenta de las habilitaciones en orden, y de las inspecciones del gobierno de la ciudad superadas: “evidentemente acá hay otra cosa –continuó Cigliutti–, hay una intención que la tendrán que explicar ellos. Mucha gente agita sus propios fantasmas a veces y piensa que posiblemente si hay muchos gays reunidos hay un tema de prostitución, todos esos prejuicios que todavía quedan en muchas personas de la sociedad. Pero cuando estamos hablando de un estado de democracia, de un bar gay que tiene las habilitaciones en orden, de personas que fueron revisadas en una razzia policial de parte de la Policía Metropolitana, puestas en una pared, y los registraron con nombre y apellido en una planilla, ya es otra cosa. También pidieron escuchas telefónicas del lugar y no encontraron absolutamente nada, sino justamente lo contrario, ratifica lo que nosotros estamos diciendo y lo que sucede en ese lugar”.
En el mismo sentido, Pedro Paradiso Sottile, coordinador jurídico de la CHA –también en diálogo con Sueños Posibles– señaló que al enterarse de las denuncias intentaron acercarse a La Alameda para aclarar las cosas: “todas las personas y todas las instituciones podemos equivocarnos, no hay dudas; nadie es perfecto y todos desde nuestro activismo y militancia podemos hacer cosas mejores y peores. En este caso, como no lo conocíamos a Vera en persona nos comunicamos con él a través de la ex diputada Fernanda Gil Lozano que le avisó que nosotros estábamos diciendo que se habían equivocado, que estaban denunciando y haciendo un escrache en un lugar que no era un tugurio ni un lugar de delincuencia, sino un bar y un lugar de encuentro de la comunidad gay, y la respuesta fue no sentarse a dialogar. Frente a eso, obviamente, la gente del local comenzó a hacer las cuestiones legales pertinentes, una mediación y demás en relación a los daños y perjuicios que le ocasionaron en este sentido, no solo comercial, sino también la cuestión ética, el hecho de ser públicamente denunciados como delincuentes y promotores de la trata de personas. Ese discurso es muy peligroso y más allá de que sea legislador hay que actuar en estas cuestiones porque es muy importante, y va a tener que responder como persona y ciudadano por los daños y perjuicios y también por el hostigamiento. Que no se haya sentado a dialogar la verdad que nos sorprendió, tratándose de un representante de una ONG que trabaja en cuestiones de derechos humanos y contra la trata. Es la primera vez en la historia de la CHA que una organización de Derechos Humanos ni siquiera se digna a contestar para sentarse a dialogar, y justamente puedan informarse y poner a disposición todo lo que sea para que se den cuenta que lo que estaban diciendo y haciendo era una barbaridad”.
Así como desde la CHA denuncian la falta de diálogo por parte de La Alameda, Vera hizo hincapié en que recibieron presiones: “hubo una audiencia –explicó– donde nos apretaron con un abogado del Gobierno de la Ciudad, que este es un dato que no se dice, porque todo esto viene a cuento de una denuncia que hace La Alameda en la que decimos cómo puede ser que el Gobierno de la Ciudad clausure Zoom pero el abogado del boliche sea Ignacio Palozuelos que es el director ejecutivo del Comité de Prevención y Seguridad Deportiva porteño. Entonces viene este abogado a amenazarnos con que él había trabajado en juzgados federales, y que si nosotros no retirábamos la denuncia nos iba a hacer una campaña feroz en todos lados, y, bueno, ya lo está haciendo”.
En octubre de este año, La Alameda denunció penalmente a Palozuelos por incumplimiento del deber de funcionario público, por ser el letrado de la empresa Linnon SA, que según la Fundación explota este prostíbulo, ubicado al lado de la sede de la Comuna 2, en la jurisdicción de la comisaría 19 de la Policía Federal.
En tanto, para el titular de la CHA, los dos responsables de esta situación son la Fundación La Alameda y el titular de la Agencia Gubernamental de Control, Juan Gómez Centurión: “nosotros nos habíamos comunicado con la gente de La Alameda, diciéndoles que se estaban equivocando, que ahí no pasaba nada, y que si querían buscar ámbitos de la trata vayan a otros lugares porque ahí eso no existe, pero insistieron, así que hay un poco de animosidad por decirlo educadamente, y lo mismo con respecto a Centurión porque le habíamos advertido lo mismo. En esta insistencia y en esta caza de brujas hay un factor que se llama homofobia, que es una discriminación por nuestra orientación sexual que es muy clara y evidente para nosotros. Y que también es histórica, ya que cuando empezó la democracia la CHA se inició justamente por eso, hace 29 años empezaron todos los lugares de encuentro, boliches, confiterías y demás y sistemáticamente había razzias policiales. Venía la policía, prendía las luces y se llevaba a la cantidad de personas que les entraban en los patrulleros. Frente a eso surgió justamente la CHA en el boliche Contramano, y a partir de ahí siempre hemos tenido problemas respecto a nuestros lugares de encuentro. Por ahí últimamente un poco más sutiles con el tema de habilitación y demás, pero esto de una razzia policial es algo gravísimo que a esta altura del partido requiere una acción muy importante”, aseveró Cigliutti.
“Centurión usó argumentos para dar de baja la habilitación comercial que habían sido desvirtuados sino que además en fallos judiciales habían sido anulados”, sumó Paradiso Sottile.
Proteger y defender los lugares de encuentro
Esa es la postura de la CHA, según indicó Cigliutti en diálogo con Sueños Posibles, como así también defender a quienes concurren a estos sitios: “si llega a haber, como ha sucedido en algunos lugares, una denuncia por temas de seguridad, nosotros por supuesto denunciamos que ese lugar no es seguro para nuestra comunidad; de la misma manera denunciamos cuando las personas atacan los lugares por un tema de discriminación, porque son lugares donde van gays a pasarla bien, a encontrarse, lo que sea. Lo que hacemos es defender nuestros derechos, nuestros deseos, que es algo esencial. Nuestros lugares de encuentro son mucho más vulnerables que otros, lo que a uno le puede parecer una cosa que más o menos sucede en un boliche heterosexual, son muy vigiladas y protegidas en nuestros lugares de encuentro. Por ejemplo el tema de que haya un menor en un boliche gay, es algo que diría que es casi imposible porque ya sabemos por tradición que si llega a haber un menor al otro día tenemos titulares en todos los diarios diciendo cualquier cosa. En mi experiencia, que no es poca, se cuida y protege mucho este tipo de cosas. Hace mucho tiempo, y esto también nos llevó años de trabajo, estuvimos con el tema de la habilitación de un boliche que se llama Amérika, y que los vecinos empezaron pidiendo que se cerrara porque era un boliche de gays que no querían en su barrio, después como se dieron cuenta de que no podían decir eso empezaron a hablar de ruidos molestos y estuvieron todo el tiempo con eso, años, y el juez cerró el lugar durante varios meses. También decían que era peligroso por el tema de los incendios y decían que era un futuro Cromañón, pero por ejemplo Amérika era el boliche de la Argentina que tenía el mejor sistema para enfrentar a incendios”, agregó.
Fin de la clausura e impugnación ante la legislatura porteña
En la actualidad, Zoom se encuentra nuevamente abierto, algo que para Gustavo Vera se enmarca fuera de la ley: “el amparo que ellos mencionan no tiene que ver con los delitos de proxenetismo y lo que se está investigando en la justicia, porque está en el juzgado de Lijo, que es federal, si está en juzgado federal no es por trata sino por droga, y todavía está abierta la causa. O te la cierra automáticamente o al menos se declaran incompetentes y la pasan a otro fuero, pero se mantiene en fuero federal, o sea que la CHA está agarrándose de un amparo que tiene que ver con un tema de habilitación que lo tuvieron con la Agencia Gubernamental de Control, que en todo caso es esta agencia la que los clausuró, y se hizo no solo por la denuncia de La Alameda sino también de vecinos, porque eso es un quilombo total a las 2, 3 de la mañana… los vecinos no pueden dormir, y denunciaron cuatro prostíbulos en esa misma manzana que están al lado del CGP de la comuna. Todo bien con los plenos derechos y el matrimonio igualitario, pero la ley es la ley: si vos sos proxeneta hacete cargo, así de simple, y nos van a encontrar denunciándolos”.
No solo la causa sigue abierta, sino también – lamentablemente- el enfrentamiento entre las organizaciones, ya que la CHA presentó una impugnación contra Vera para intentar evitar su asunción como legislador porteño: “nosotros vemos una cuestión de persecución y hostigamiento dirigido hacia la comunidad LGBT (Lesbianas Gays Bisexuales y Trans) por parte de Vera, como presidente o responsable máximo de la Fundación La Alameda, en relación a los derechos de nuestra comunidad –dijo Paradiso Sottile– y expresamos nuestro rechazo a que fuera nombrado como legislador justamente porque no vemos que garantice la Constitución. Las acciones que ha venido desarrollando y que ha avalado o promovido, no solamente violan la cuestión de la diversidad y los principios de igualdad y no discriminación, sino también los artículos, específicamente el 11, de la Constitución de la Ciudad de Buenos Aires, y los pactos internacionales de derechos humanos que tienen rango constitucional. No puede ser que libremente y con impunidad se digan barbaridades, se planteen discursos homofóbicos y se trabaje para el cierre de lugares de encuentro para la comunidad LGBT; esto tiene que ver con una postura homofóbica, pero que va contra los preceptos constitucionales y de la Ciudad de Buenos Aires, por los que este señor va a jurar proteger y promover”, sostuvo Paradiso Sotille antes de la asunción de Vera. “Hay un encuentro con estas posturas de la Iglesia que frente a hechos terribles o hay una complicidad a través del silencio y la omisión o se traslada a las personas a otros lugares, se hacen los distraídos y este señor se ve que está actuando de la misma manera, teniendo la misma conducta que muchas veces la jerarquía de la Iglesia Católica ha tenido con nosotros y nosotras. La actitud de Vera en este proceso ha sido vergonzosa, una cuestión de persecución que tiene como objeto hasta un discurso que llamaría higienista, por una cuestión de querer marcar los lugares de encuentro como lugares de crimen, de delincuencia, con una mirada hasta diría muy antigua, muy repetida históricamente pero a las horas que está viviendo nuestra democracia claramente está como fuera de lugar. Hay una cuestión de homofobia muy fuerte, que nosotros pensamos que está enmarcada en su cercanía con la cuestión religiosa. Han armado hasta mapas de la inseguridad y es vergonzoso que pongan lugares como este, incluso han hecho presentaciones judiciales en este sentido, ligándolo también con el tema del narcotráfico, han allanado lugares como la casa de la madre de una activista trans fallecida al poco tiempo, la sede de las personas de travestis y trans. Además, desde la CHA llamamos a una atención de los legisladores y las legisladoras porque estamos ante un ataque y una persecución de grupos avalados incluso por, en este caso, Gómez Centurión de la Agencia Gubernamental de Control. Hay una embestida de grupos de fundamentalistas que aún no han entendido que la diversidad tanto sexual como cultural es algo para enriquecernos y que la democracia habla justamente de mayorías y minorías, no solamente de un solo modelo de sexualidad y del ejercicio de la sexualidad. Al hacerlo público, e incluso por escrito formalmente en la legislatura porteña, lo que nosotros queremos es alertar y repudiar estas acciones”.
Respecto a la cercanía religiosa de Vera, a la que Paradiso Sottile hace referencia, es conocida la relación de la Fundación La Alameda con Jorge Bergoglio, hoy Papa Francisco. Según explicó el propio Vera a La Retaguardia, en un principio la presencia del por entonces Arzobispo de Buenos Aires funcionaba como un respaldo de seguridad ante las denuncias que se hacían: “luego se fue consustanciando profundamente con la causa, que es local pero también global, lamentablemente el drama de la trata de personas, el narcotráfico, la mafia azota a prácticamente todos los países del mundo. Yo creo que Jorge ha sido fiel a esta cuestión, tiene que ver con sus propios genes, no hay que olvidarse que es jesuita, que son los que realizaron misiones socializantes en la época del imperio español y Jorge como buen jesuita reivindica todas las causas que tienen que ver contra la esclavitud”.
En relación a la impugnación en su contra en la Legislatura, Vera respondió: “esto hay que contextualizarlo, primero el que firmó la denuncia es un conocido y ferviente militante kirchnerista y casualmente me tiró esta denuncia y pretendió armar una semana y media antes de las elecciones una movida y una opereta haciendo pasar como que La Alameda tenía una posición racista u homofóbica. La última semana los kirchneristas estaban muy nerviosos, tenían razones para estarlo, la paliza a nivel legislatura fue importante, frente a esta desesperación hubo campañas sucias, entre ellas esta”.
A su vez, Vera afirmó que es una vergüenza que la CHA aparezca atrás de la impugnación: “no sé hasta qué punto la totalidad de los miembros de la CHA apoyan la paparruchada que hizo este señor que fue un papelón. En realidad no es la CHA, porque el tipo después aclara que firma la impugnación a título simbólico. Obviamente en la Legislatura todo el mundo, incluso (María) Rachid, rechazó la denuncia, además no hay nada más lejano a la homofobia que La Alameda. Hubo un año en que después de la marcha del orgullo gay pidieron la sede de la fundación para hacer una fiesta, nunca hubo problemas con ninguna minoría, al contrario. Esto no implica que así como hubo personas que eran perseguidas en el pasado y hoy montaron un taller clandestino para reducir a la servidumbre a sus propios paisanos, también dentro de la comunidad homosexual argentina hay algunos pillos que están haciendo las cosas mal”.
Más allá de las duras acusaciones cruzadas, Paradiso Sottile reconoció que en un principio le sorprendió la actitud de La Alameda: “por eso justamente estuvimos más de un mes esperando un espacio para sentarnos a charlar y contarles lo que estaba pasando antes de presentar nosotros una denuncia, y la respuesta fue que no querían encontrarse. No estamos enfrentados, pero desde la CHA siempre vamos a denunciar cualquier tipo de acto contra lugares de encuentro. Nosotros nacimos en un lugar así. Vera cometió un error gravísimo, evidentemente no tiene la grandeza o la humildad para admitirlo, lo va a tener que hacer judicialmente, y ha dejado al descubierto un accionar que pone en tela de juicio algo tan importante como es la lucha contra la trata de personas”.
Un conflicto que continúa
Desde la CHA afirman que su postura será seguir la denuncia: “vamos a acompañar a los damnificados en la acción de daños y perjuicios contra Vera y La Alameda, que tiene todo el derecho y posibilidad como organización de plantear su posición contraria a su presidente, hasta ahora no lo ha hecho, lo que deja entrever que a este señor no le interesa nada salvo la cuestión personal de difusión y demás, está llevando a un lugar triste y penoso con un tema de mucha trascendencia y actualidad como es la cuestión de la trata de personas, pero claramente banalizado y desprestigiado con acciones como esta, denunciando lugares que nada tiene que ver con esto”, afirmó Paradiso Sottile.
Por su parte, Gustavo Vera aseguró que mantendrán las denuncias contra Zoom, ya que reiteran que en ese local, habilitado como bar-juguetería, se ejerce la prostitución por cuenta ajena, algo que está penado por la ley.