radio
Radio en vivo
La Retaguardia

Se levantó La Carpa Villera pero continúa la lucha por la urbanización

Por LR oficial en Uncategorized

Se levantó la Carpa Villera pero queda
la lucha por cumplir lo firmado

(Por La Retaguardia) Tras 53 días, los vecinos de las villas de la Ciudad de Buenos Aires levantaron la carpa que habían instalado en la Plaza de la República, al lado del Obelisco, para hacer visible su reclamo por la urbanización de las villas y asentamientos. Federico Fagioli, de la Corriente Villera Independiente, explicó a La Retaguardia cómo fue la negociación con el gobierno porteño y los desafíos que se presentan por delante.

Fue una resolución que sorprendió. Distintos funcionarios de la Ciudad insistían en que no iban a negociar con quienes acampaban frente al Obelisco porque consideraban que no representaban a nadie. Sin embargo, el jueves 12 de junio a última hora se supo que había un acuerdo entre las partes y que al día siguiente se levantaría la medida de fuerza.
Con la mediación de la Defensoría del Pueblo, vecinos y funcionarios firmaron un acta en el que las autoridades de la ciudad se comprometían a conformar una mesa general para debatir la urbanización de las villas. Además, se acordó la presencia de dos ambulancias para los barrios de Bajo Flores y Retiro, la reanudación de las obras de los troncales de descarga cloacal de las villas 1-11-14, la 31 de Retiro y la 20 de Lugano. A su vez, se promoverán mesas de ejecuciones barriales en las que se discutirá con los vecinos sobre los problemas de agua potable y tendidos eléctricos de cada barrio.
Para Federico Fagioli de la Corriente Villera Independiente, la resolución del conflicto los tomó un poco por sorpresa, pero también la consideran una victoria para los vecinos de las villas y una muestra de que le pudieron torcer el brazo al gobierno porteño: “todo lo que se ha negociado y lo que se ha charlado fue siempre entendiendo que teníamos enfrente un gobierno al que no le interesaba absolutamente nada de lo que estaba hablando en esas negociaciones pero que lo tuvo que hacer por la obligación y por la fuerza que tuvieron los vecinos al estar ahí en la Carpa Villera con huelga de hambre durante 53 días. En principio queremos rescatar que en las negociaciones con el gobierno estuvo presente la Defensoría del Pueblo, y algunas organizaciones cercanas, compañeras, que hacían como de veedoras; esto nos da como una cierta no garantía pero sí tranquilidad a la hora de darnos cuenta que no vamos a ser los únicos que vamos a luchar para que ese acuerdo se cumpla. Obviamente nosotros al salir de la carpa con ese acuerdo entendemos que la lucha continúa porque no hemos llegado a la urbanización y porque tenemos que salir a pelear para que obviamente se cumplan estos acuerdos. Si estos acuerdos no se cumplen es un mero papel firmado que no le sirve de nada a nadie, y eso implicará que los vecinos discutan cómo forzamos que eso se cumpla. Entonces si tenemos que salir a pelear nuevamente estamos todos dispuestos a hacerlo con muchísimas más fuerzas que nos ha dado esta victoria, que nos ha permitido fortalecernos el triple”, expresó Fagioli en diálogo con La Retaguardia.
La Corriente Villera Independiente fue la principal impulsora de la carpa que después contuvo a otras organizaciones, como La Poderosa. Incluso durante el desarrollo del acampe se comenzó a organizar una Central por la Urbanización y la Vivienda, que implicaría la confluencia de distintos sectores que generalmente no caminan juntos, como algunos partidos u organizaciones sociales de la izquierda, y ciertos sectores del kirchnerismo. Al respecto, Fagioli especificó: “eso fue en principio una medida pensada, pero por el momento no viene en buen camino, ahora no estamos teniendo diálogo con ningún otro sector, para ser más claro con el sector kirchnerista. En un principio se había pensado hacer una central por la vivienda en contra del macrismo, pero nosotros como Corriente entendemos que hay ciertas cuestiones con el gobierno nacional, con las organizaciones que le responden, con las que nosotros no compartimos y por lo tanto eso fue trunco y por el momento no estamos teniendo nuevas reuniones, porque obviamente entendemos que hay un pacto en la ciudad de Buenos Aires”.
Al ser consultado acerca de si esta Central que estaba comenzando a pensarse y organizarse pudo haber influido para que desde el macrismo cambiaran su actitud indiferente hacia la Carpa Villera y aceptara reunirse, Fagioli expresó: “se puede entender por un lado, pero por otro no porque ya se venía diluyendo eso, habíamos pensado el Congreso de conjunto y se diluyó ahí un poco. En realidad para nosotros el que este gobierno haya salido a dar una respuesta se debe netamente a la fortaleza de la medida y a la representatividad en las villas que tiene la Corriente Villera y eso se expresó cuando a los 50 días de carpa villera con huelga de hambre, que el gobierno y Macri seguían saliendo a decir que nosotros no representábamos a nadie, los vecinos discutieron en sus asambleas barriales salir a demostrar la representatividad y montaron lo que nosotros llamamos Villa Obelisco del otro lado de la Plaza del Obelisco, que fueron ranchos por barrios, fueron alrededor de veinte ranchos y eso yo creo que le molestó muchísimo al gobierno porque no pudo salir a decir nada a través de su discurso de ninguneo y de intentar dar a entender que nosotros no representábamos a nadie, y ahí arrancó la respuesta y de inmediato empezaron a llamar pidiéndonos que levantemos esa ranchada que habíamos armado y después obviamente se dieron estas negociaciones”. De todos modos, no se descarta el lanzamiento de la Central una vez que termine el mundial.
Sin duda, el acuerdo alcanzado es importante, haber logrado que funcionarios del gobierno de la Ciudad se hayan sentado a negociar con los vecinos de las villas y dejen por escrito la realización de algunos de sus reclamos es un paso hacia adelante. Ahora la pelea continúa para lograr que esas promesas, que quizás nacieron del fruto de la especulación política del Ejecutivo porteño, se transformen en las realidades que los habitantes de las villas necesitan para vivir dignamente. Ya se sabe, si el gobierno de la ciudad no cumple la ley sancionada por su propia legislatura para urbanizar la Villa 20, habrá que cuidar que cumplan este acuerdo con una organización social.