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Lo dijo Jorge Adaro, secretario de Acción Gremial del  sindicato. En diálogo con el programa radial Estás Muteadx, habló acerca de la historia del gremio y estableció un paralelo entre la actual crisis educacional con la que se vivió en la década del 90. Entrevista: Pedro Ramírez Otero / Julián BouvierRedacción: Nicolás RosalesEdición: Pedro Ramírez Otero / Bárbara BarrosFoto: Ademys El gremio docente Ademys se fundó el 20 de agosto de 1983 y es reconocido por la lucha por los derechos de las y los docentes y por la defensa de la educación pública. El sindicato representa a docentes de la Ciudad de Buenos Aires y la Provincia de Buenos Aires en todas sus áreas y niveles.  ―Ademys cumple 40 años, ¿qué se festeja? ―Por los ataques del gobierno que sufre la docencia y nuestro sindicato, no nos iban a quitar la posibilidad de festejar. Son 40 años de una organización democrática, de un sindicato que lucha, que se ha mantenido independiente de los gobiernos y que ha practicado la democracia sindical sin ningún tipo de dudas. Incluso con distintas conducciones, porque Ademys surge en el 83 una vez regresado el orden constitucional. Ha tenido básicamente una estructura y un estatuto o un ordenamiento que es super democrático, ya que en Ademys, por ejemplo, no hay mayoría o minoría. Hay un sistema donde en la mesa directiva están expresados todos los sectores que participan en un acto eleccionario por proporcionalidad. Entonces, esto es una de las referencias que ya pocos sindicatos la tienen y para nosotros es un orgullo. Hay que recuperar que este sistema no es un invento nuestro, sino de la Ctera (Confederación de Trabajadores de la Educación) en sus orígenes. ―En cuanto a la actual crisis educacional, ¿hubo otro momento similar en la historia? ―Si bien cada proceso tiene su particularidad, efectivamente la década del 90 fue sin ninguna duda un momento crítico, donde algunos cambios negativos que tuvimos persisten. Fue una época también donde la tradición que tiene este país en relación a la educación pública y en ese marco de ataque, fue impresionante como el pueblo salió a defender la educación. Hubo movilizaciones multitudinarias contra todo un sistema de reformas que ya, obviamente, advertíamos en ese momento que iba a un proceso de privatización del sistema educativo. Había un proceso de atomización del sistema, y esto no era para nada bueno. Creo que este fue uno de los momentos más críticos desde el punto de vista educativo. Igualmente, todo esto está ligado a los gobiernos y a las políticas que emprendan. El menemismo aplicó una política fuerte e importante, sin embargo, en la conciencia del pueblo no se ha podido lograr. Hicieron la Ley Federal de Educación, y entre tantas otras cosas, cambiaron el concepto de lo que es la escuela pública. Ellos decían que la educación pública, bajo la ley, tenía distintas gestiones: una de ellas estatal, la otra la privada. De esta manera, daban un salto cualitativo en la privatización del sistema educativo y en desarrollar un concepto para entender no a la educación como un derecho, sino como un servicio. Este momento tuvo algunas líneas de continuidad. Hoy hay una expresión clara de un nuevo ataque en ese mismo sentido con gobiernos que han venido aplicando políticas orientadas a la Ley Federal de Educación durante todos estos años. Gracias a la lucha, los avances que han querido tener los organismos internacionales y los gobiernos subordinados a estos organismos, siempre han sido limitados por la respuesta de los trabajadores, trabajadoras y de la comunidad en general.  El secretario gremial de Ademys contó que el festejo por los 40 años del sindicato seguirá durante lo que resta del año, “porque no estamos en un año muy tranquilo”. El miércoles pasado realizaron una actividad en el Profesorado Joaquín V. González, y habrá también una serie de eventos sobre los derechos humanos de los maestros y maestras desaparecidas en la Ciudad de Buenos Aires. Además, dijo, harán una fiesta en algún salón para brindar “como corolario de todas las actividades”. 

El jueves se realizó un paro y movilización docente a la Legislatura porteña por la situación educativa en la Ciudad de Buenos Aires. Mariana Scayola, secretaria general del gremio Ademys, pasó por el programa Hasta que vuelvan los abrazos, de La Retaguardia y Radio Sur y se refirió a las problemáticas educativas y a la falta de respuestas políticas. Además, comentó que la cuestión salarial es uno de los temas recurrentes en los diálogos entre docentes. Compartimos un fotoinforme. (Por La Retaguardia) 📷 Fotoinforme: Bárbara Barros/La Retaguardia 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Nicolás Rosales

En diálogo con el programa radial La Retaguardia, Melisa Correa, docente e integrante de la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores, se refirió a la designación de Gustavo Albonico como director de la Escuela 2 del Distrito Escolar 8 “Tomás Santa Coloma”, en Parque Chacabuco. La docente contó que Albonico se ha expresado abiertamente en las redes sociales en defensa de la dictadura militar, entre otros dichos repudiables. La comunidad educativa reaccionó rápidamente y realizó algunas acciones en rechazo. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Agustina Sandoval Lerner ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Diego Adur/Pedro Ramírez Otero 📷 Fotos: Nicolás Rosales/La Retaguardia La comunidad educativa se movilizó en repudio a la designación de Gustavo Albonico como director de la Escuela 2 del Distrito Escolar 8 de la calle Santander 1150 de Parque Chacabuco, en la Comuna 7 de la Ciudad de Buenos Aires. Albonico ha tenido discursos misóginos en reiteradas ocasiones, palabras y actos que van en contra de los derechos de las mujeres y otras identidades de género, según contó en un comunicado la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores. Por otro lado, la comunidad educativa entiende que la modalidad del Ministerio de Educación del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires  ha sido rotarlo por diferentes escuelas y comunidades evidenciando complicidad y protección a este personaje. Melisa Correa, maestra e integrante de la Red de Docentes, Familias y Organizaciones del Bajo Flores y parte de la Asamblea de Docentes del Distrito 8 explicó cómo se enteró del hecho: “No conocemos personalmente a este sujeto, sí desde las notas que han salido a raíz de su fallida designación como director de una escuela del Distrito décimo. Ahí se pudo frenar la misma, ya que se dieron a conocer estos dichos y el discurso que hace apología del Terrorismo de Estado y de los crímenes de lesa humanidad. También reivindica el gatillo fácil y tiene dichos misóginos, donde pretende cerrar el Ministerio de la Mujer, Género y Diversidades”. Por otro lado, Correa argumentó porqué es inadmisible que el director asuma el cargo: “No podemos tolerar que ningún integrante de conducción de un equipo escolar tenga este tipo de discurso porque nuestros lineamientos curriculares promueven la valoración de la democracia y de la construcción de la memoria familiar, social y colectiva. Es una ley que tenemos que cumplir, y claramente este sujeto representa lo contrario. Estaría fuera de la ley”. Entre las acciones llevadas a cabo, el miércoles pasado hubo una conferencia de prensa en la Escuela Primaria 2 D.E. 8 “Tomás Santa Coloma” y el viernes una radio abierta en la esquina de las calles Emilio Mitre y Asamblea, en Parque Chacabuco. En la conferencia de la semana pasada estuvieron presentes la ex directora del colegio, madres de alumnos y alumnas, e integrantes del gremio Ademys como la actual legisladora porteña del Frente de Izquierda Amanda Martín, la secretaria general Mariana Scayola, y el secretario adjunto Jorge Adaro. Del gremio UTE (Unión de Trabajadores de la Educación) se hizo presente el secretario de Derechos Humanos, Matías Zalduendo. Por último y en relación a las expectativas luego del repudio de la comunidad, Correa expresó: “Hasta donde sé todavía no hay una respuesta, pero deseamos que se remueva o rechace la designación. Lo del miércoles fue movilizante. Creo que no es una opción seguir rotándolo (de un colegio a otro). De continuar en su cargo se estarían violando los derechos de los y las alumnas”.   DESCARGAR

Lo dijo Griselda Galarza, docente e integrante de la Red de Docentes, Familias y organizaciones del Bajo Flores. En diálogo con el programa radial La Retaguardia, describió la grave situación por la falta de conectividad y dispositivos de la población más pobre de la Ciudad. Además, contó que desde la Red realizaron un relevamiento sobre estudiantes y familias sin posibilidad de conectarse y que se lo entregaron a las autoridades reclamando conectividad para todos y todas. Denunció la “total desidia del Estado” calificando de “criminal” la política que exige la presencialidad, y se refirió a la persecución que sufre el personal educativo con mecanismos de disciplinamiento. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Pedro Ramírez Otero/Fernando Tebele ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero 📷 Fotos: Red del Bajo Flores La Red de Docentes, Familias y organizaciones del Bajo Flores viene desarrollando una serie de relevamientos en el barrio a partir de encuestas antes y durante la pandemia de Covid-19. Luego de procesar y analizar la información exigen que sean cubiertas ciertas necesidades como, en el último caso,  de conectividad de las y los habitantes de esta parte de la Ciudad.  Sin conexión “Creemos que las autoridades tienen la obligación de resolver cuestiones tan urgentes como la alimentación, la salud, la educación y la vivienda. Estamos exactamente igual en todos los planos. En educación, más allá de la encrucijada de los últimos días de la presencialidad, la realidad es que estamos ante un escenario de mucha más restricción que la de ahora, por la cual la vuelta a la virtualidad plena es más que posible. Y nuevamente estamos dejando a una enorme mayoría, que son los más pobres, desfavorecidos, o más vulnerables; los más despreciados por esta gestión, a la intemperie. En nuestra escuela tenemos una matrícula de 480 pibes. Sacando a los del ciclo superior, de cuarto o quinto año que serán unos 100 que tienen su propio celular, el resto no. Por ende no tienen posibilidad de conectarse”, comenzó analizando Griselda Galarza, docente y vicedirectora de la escuela N° 3 del Distrito Escolar 19. Una política criminal Galarza denunció la inacción del Gobierno porteño y las necesidades reales de las y los pibes del barrio: “A pesar de la absoluta desidia del Estado, los docentes hicimos guardias pedagógicas para acompañar a los alumnos. El Gobierno de la Ciudad milita la presencialidad y es un desastre lo que están haciendo en términos sanitarios. Una política criminal, dice (el gremio docente) Ademys, y coincido con eso plenamente. No hay ninguna política en términos de preservar la vida humana, es en algún punto despreciar la vida. Porque si el Estado no interviene en ningún plano desde el cuidado, la protección o el amparo, de alguna manera lo que alienta es el individualismo, el sálvese quien pueda y también la violencia. La autorregulación en el territorio, que los pibes implosionen hacia adentro, que se maten entre ellos”, dijo. Vaciamiento y disciplinamiento estatal “La mirada que tiene el Gobierno a la educación pública va de la mano del vaciamiento presupuestario. Este año, hasta hace unos días atrás, no pudimos dar de alta ni a coordinadores de tutores, a tutores, coordinadores de área, ni EDI (Espacios de Definición Institucional), porque no se sabía si había partida presupuestaria para esa cantidad de horas. Estos cargos en mi escuela son fundamentales, porque en algún punto son ellos los que ‘campean’ la desigualdad. Hacen un seguimiento de los pibes, saben lo que les pasa, están atentos a que no se caigan de la escuela. Y eso último nos ocurre. Por otro lado, el vaciamiento va acompañado de todo un silencio de una cuestión intermedia entre el Ministerio y las escuelas. Meten miedo desde lo jerárquico y de las disposiciones que uno tiene que cumplir a través de lo que te mandan. Son rigurosos con lo administrativo, casi que tienen una política persecutoria y de disciplinamiento en este sentido”, culminó Griselda. La semana pasada, La Red de Docentes, Familias y organizaciones del Bajo Flores realizó un “semaforazo” en Cobo y Curapaligue. Exigieron “conectividad para todes”, lo que implica instalar cuatro antenas para unas 50 mil personas y dispositivos para las 3.764 familias de estudiantes con matrícula en las escuelas del barrio, según datos precisos que arrojó el último relevamiento. 

Ademys realizó ayer  una conferencia de prensa en la puerta de la Escuela Técnica N° 13 “Ingeniero José Luis Delpini”, en el barrio porteño de Villa Lugano, donde daba clases el docente Jorge Langone, quien falleció por Covid-19. La jornada de paro incluyó denuncias tanto al Gobierno porteño como nacional por la falta de medidas sanitarias en los colegios y el incumplimiento en la aplicación de protocolos necesarios para sostener la presencialidad de las clases. (Por La Retaguardia) ✍️ Redacción: Diego Adur 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero 📷 Foto de portada: Facebook Ademys Jorge Langone era docente en la Escuela Técnica N° 13, ubicada en Villa Lugano. Hace pocos días falleció tras haber contraído Coronavirus. El trabajador era afiliado a Ademys, por eso el sindicato dictó un paro de actividades para el pasado lunes y realizó una conferencia de prensa en la puerta del colegio. Las denuncias de las y los secretarios de Ademys apuntaron contra la responsabilidad política de sostener la presencialidad en las escuelas aun frente al notorio incremento de casos de Covid-19 en estudiantes y docentes. También criticaron las faltas de medidas sanitarias y el incumplimiento de los protocolos en los distintos establecimientos de la Ciudad de Buenos Aires. En el inicio de la conferencia, se ofreció el pésame a la familia del docente fallecido y criticaron “esta política de presencialidad sin cuidados”, tildada de “criminal por parte de (Horacio Rodríguez) Larreta, de (Soledad) Acuña y del ministro (Nicolás) Trotta”. Una y otra vez plantearon que la responsabilidad política es tanto del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires como también del Gobierno nacional. Frente algunas declaraciones de Rodríguez Larreta y de Soledad Acuña que ponían en cuestionamiento el lugar donde Langone se habría contagiado el virus, desde Ademys aclararon: “No nos interesa dónde se contagió Jorge, nos importa que hoy no está acá”, y aseguraron que existen “presiones para que no se apliquen los protocolos” y así lograr que los colegios permanezcan abiertos. Existe un notorio incremento de casos de personas contagiadas de Covid-19, tanto en docentes como estudiantes, y también se confirmó que en el país ya circulan las cepas de virus del Reino Unido, de Manaos, Rio de Janeiro y California. Incluso frente a estos datos, el Ejecutivo porteño estaba analizando la flexibilización del protocolo escolar: “La irresponsabilidad y el plan temerario al que nos han empujado está llegando a una situación extrema”, refirieron desde Ademys y ejemplificaron con los casos de que otros países que decidieron frenar con la presencialidad de las clases. La jornada de paro fue una de las medidas que dispuso gremio Ademys y la conferencia sirvió para expresar el dolor por la muerte del docente, y la preocupación porque estas situaciones sigan sucediendo.

El Secretario Adjunto del gremio docente Ademys, en diálogo con el programa radial La Retaguardia, se refirió a la propuesta de retorno a las escuelas en la Ciudad de Buenos Aires, en el contexto de la pandemia por Covid-19. Además, Adaro denunció que las decisiones tomadas desde el Gobierno nacional y el porteño hacen que finalmente la responsabilidad recaiga en las propias familias. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Fernando Tebele/Pedro Ramírez Otero ✍️ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero 📷 Foto de portada: lineasindical.com.ar ¿Cómo será la vuelta a las aulas en las escuelas de la Ciudad? Esa es la pregunta del millón. El Gobierno porteño tomó una decisión. La misma consiste en revincular a los y las estudiantes. Esto implica la apertura de algunas escuelas para ciertos grupos que cursan los últimos años y  pueden concurrir en forma voluntaria. Por otro lado,  y como una puesta en escena, los medios tradicionales de comunicación se encargaron de ir con las cámaras de televisión para imponer el hecho como noticia  en la agenda pública.    El Secretario Adjunto del gremio docente Ademys, Jorge Adaro, comenzó explicando: “En los últimos días  nos venimos enterando de lo que va a pasar por los medios. El Gobierno en este sentido no se está comunicando para decir las cosas con mayor exactitud. Tuvimos una convocatoria por parte de funcionarios para que nos informen qué es lo que habían decidido. Es un escenario, donde es muy difícil poder anticiparse. Lo cierto es que hubo unos días en que los grandes medios plantearon que vuelven las clases. Primera cuestión: no volvieron las clases. Esto ocurrió efectivamente, hasta la semana pasada, en dos escuelas técnicas. Según dicen los protocolos el planteo es para re socializar o revincular a los alumnos. Es todo muy extraño porque para eso convocan a los chicos y chicas de sexto año y de séptimo. Y se supone que si es a esta altura del año será para ajustar el tema de los contenidos, porque en un mes y medio finalizan una etapa. Pero nada de esto es lo que tiene el Gobierno en mente”. Delegando responsabilidades “Estamos hablando de escuelas donde hay que tomar una decisión de a qué chico o chica se convoca o no se convoca. Todo lo delegan a la dirección. Todo eso comienza en esta última etapa con un viraje que hizo el Gobierno nacional a la cabeza. Que sostenía una especie de polémica con la Ciudad en cuanto las condiciones, y de golpe unificaron discursos.  (Soledad) Acuña, ministra de Educación porteña, lo que hizo fue delegar la responsabilidad a las direcciones de las escuelas. Y al decir que es voluntario delega la responsabilidad en las familias. Y si existe un foco de contagio en la escuela es responsabilidad de la familia y no del Gobierno. El primer día, el alumno o la alumna tiene que ir con un mayor y firmar una especie de acta deslindando la responsabilidad. Es decir que no estamos tan locos para plantear que no hay condiciones para un regreso”, expresó. En este estado de confusión, Adaro clarificó: “No es un escenario en el que todos vuelven. Solo vuelve una porción de la porción”. Uno de los interrogantes es también la cuestión del traslado de cada estudiante a las escuelas, teniendo en cuenta que varias familias provienen del conurbano. “Las condiciones de mantenimiento y de personal tampoco están dadas para una situación de regreso a la actividad ya sea de socialización o pedagógica vinculada a los contenidos. En todo este tiempo no hubo un solo anuncio de haber destinado partidas presupuestarias dentro de la emergencia para resolver esas condiciones”, aseveró. La ausencia del Estado “Lo que sí me parece necesario es hacer un balance de estos seis meses. De cómo fue el desarrollo de las actividades y de cuál fue el rol del Gobierno. Que estuvo ausente, no garantizó nada: ni material impreso los días que se entregaban los bolsones, tampoco las computadoras. Y después vienen a decir que los quiere adentro porque piensa en los niños. También sabemos que no todo los pibes, no todas las personas en la Ciudad de Buenos Aires o en cualquier lugar del país tienen la misma posibilidad de respuesta ante un contagio, para afrontarlo en un sistema de salud garantizado. El único lugar que podés ir es una CeSAC (Centro de Salud y Acción Comunitaria) o a un hospital, que están totalmente desbordados”, planteó el Secretario Adjunto de Ademys. Por último, expresó con preocupación: “Tenemos como referencia el protocolo burbuja que se ha aplicado en otros países, pero esto no ha logrado frenar lo que es el desarrollo de la pandemia. En la Ciudad el protocolo dice: ocho chicos y uno o dos docentes. Es invariable, como una burbuja que protege. Pero esos mismos docentes tienen otro grupo a la tarde. Es muy difícil de controlar. En Francia, París,  hace poco reabrieron las escuelas con protocolo y son 80 las clausuradas por Covid. Tenemos que mirar qué ha pasado esto, y tener en cuenta que Europa está en una segunda etapa. Y sabiendo que está la posibilidad de que esto baje y que vuelva a subir, se hace urgente que los gobiernos se ocupen de proveer las computadoras y la conectividad. Porque aunque se vuelva, es muy probable que tengamos que retornar a la virtualidad en el mejor de los escenarios”.

Ademys salió ayer a la calle para protestar contra el pago del aguinaldo en cuotas, que en la Ciudad de Buenos Aires regirá para salarios que superen los 50 mil pesos. Se movilizaron en autos desde la Jefatura de Gobierno porteño, pasando por el Congreso, hasta el Ministerio de Educación de la Nación. Marisabel Grau, integrante de la Comisión Directiva del gremio docente en CABA, habló en el programa Hasta que vuelvan los abrazos, en plena manifestación en caravana. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Fernando Tebele ✏ Redacción: Diego Adur 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero El Gobierno nacional estableció el pago del aguinaldo en dos cuotas para quienes trabajan en la administración pública, y cada jurisdicción lo aplicará con un piso salarial específico. En la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta dispuso que será para salarios que superen los 50 mil pesos brutos. En reclamo a esta medida, el gremio docente Ademys realizó una movilización hacia el Ministerio de Educación de la Nación, donde los y las docentes porteñas se trasladaron en diferentes vehículos para respetar el distanciamiento social. “Estamos haciendo una caravana en auto. En este contexto de pandemia buscamos la vuelta para llevar adelante nuestras demandas, nuestras protestas y seguir en la calle. Rodríguez Larreta anunció, como lo hicieron el Gobierno nacional y el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, que van a pagar el aguinaldo en cuotas. Nosotros manifestamos nuestro rechazo total. El aguinaldo es parte constitutiva de nuestro salario. Lo que están haciendo es robarnos descaradamente. Nos oponemos a eso. De la manera que podemos, estamos dando batalla para que eso no ocurra”, expresó Marisabel Grau, integrante de Ademys. Para Grau, esta decisión forma parte del accionar político que lleva adelante el Gobierno de la Ciudad en detrimento de la educación porteña: “Cuando se sancionó la ley de emergencia en la Ciudad de Buenos Aires decíamos que era un ajuste contra las familias trabajadoras. Acá vemos cómo sacan de nuestro salario, y no para invertir en hospitales o alimentación a las familias, sino para poner plata en la acumulación de las riquezas de las grandes fortunas y los negociados de la Ciudad de Buenos Aires, que no paran a pesar de la pandemia. La compra millonaria de armamento para la Ciudad, el escándalo de los barbijos, lo que es el negociado inmobiliario y de tierras en la Ciudad. Esto es en desmedro de las familias más pobres. Esto es una continuidad de la política de Larreta: sacarnos los salarios y quitar recursos de la educación”, denunció. Hubo organizaciones docentes que no acompañaron la protesta y justificaron el pago de aguinaldo en cuotas por la crisis sanitaria que se vive en el país. La docente propuso que esa quita de dinero no sea sobre los sectores trabajadores sino sobre las grandes empresas: “La alternativa no es quedarnos en casa llorando sino tratar de organizarnos y pelearla. No somos un sindicato que tenga una política meramente declamativa. Hay organizaciones que no acompañan estas demandas. Así estamos los trabajadores y las trabajadoras de la Ciudad. Hay organizaciones políticas y sindicales que lo justifican como una necesidad en el marco de la crisis”, dijo, y agregó que la plata debe sacarse de otro lugar y no de las familias trabajadoras. “El impuesto a las grandes fortunas que se iba a sancionar está ahí parado, todavía ni noticias. Nosotros planteamos que se le cobren mayores impuestos a las grandes fortunas. Se ha declarado que la minería es una actividad esencial. Las mineras no pagan ningún impuesto, dejan cero pesos en nuestro país y lo único que generan es contaminación. Están trabajando, están funcionando y siguen saqueando nuestro territorio. No se le puede cobrar a esas grandes corporaciones y se nos saca de nuestro salario. Es una vergüenza y no tiene justificación. Para cobrar impuestos a los ricos parece que no puede funcionar el Congreso, pero para sacar decretos que nos saquen los salarios a nosotros parece que sí”, manifestó Grau. Si bien los montos límites que se establecieron para el pago del aguinaldo en cuotas varían de acuerdo al distrito, la integrante de Ademys insistió en que, en cualquier caso, es injusto para los y las docentes: “En la Ciudad de Buenos Aires es más bajo que en Provincia. Es de 50 mil pesos y en Provincia de 80 mil. Cualquier maestra que tiene dos cargos cobra en bruto más de 50 mil pesos. Es un monto que afecta a la mayoría de la docencia y que, además, no representa tanto dinero. Es salario en bruto, sin todos los descuentos. No queda otra que salir a oponerse”, concluyó.

Lo dijo Jorge Adaro, integrante del gremio docente Ademys. Durante la cuarentena, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires estableció la distribución de alimentos en todos los niveles escolares para que los comedores sigan funcionando. Sin embargo, desde Ademys denunciaron que el personal auxiliar que realiza esta tarea no recibió los elementos de protección necesarios para prevenir la transmisión del coronavirus, y que la cantidad y calidad de los alimentos es insuficiente. Adaro dió detalles de la situación en diálogo con el programa radial Tengo una Idea. (Por La Retaguardia) 🎤 Entrevista: Graciela Carballo/Nicolás Rosales ✏ Redacción: Nicolás Rosales 💻 Edición: Pedro Ramírez Otero 📷 Foto de portada: lineasindical.com.ar Jorge Adaro comenzó describiendo la mala calidad de los alimentos que se entregaron en una primera instancia bajo el contexto de la cuarentena: “El primer marco que quiero dar es que esta cuarentena nos agarra en un proceso de eterno ajuste a los trabajadores y a los sectores populares. Lo que está pasando es que cuando el gobierno decide hacer la cuarentena tiene que, por presión por las familias y de los docentes , modificar el tema alimentario. Porque los primeros días el gobierno siguió dando las famosas viandas,  y digo que son famosas ya porque son un desastre. Eran un desastre antes de la cuarentena, y esto no ha cambiado por la cuarentena, sino todo lo contrario. Ahí empiezan a haber un montón de fotos con una fetita de jamón con una de queso y que ese era el alimento para el niño o la niña para todo el día. Nosotros empezamos a decir: esto no va, esto es una vergüenza, un desastre. Además, en el marco de la cuarentena no podemos hacer salir a las familias todos los días a las escuelas”. Bolsones de alimentos para las familias El integrante de Ademys contó la idea que el sindicato propuso, que el gobierno porteño consideró y llevó a cabo sin los cuidados necesarios para los trabajadores y trabajadoras que deben exponerse: “Proponemos que hagan bolsones con alimentos se supone de calidad, para 10, 15 días. El gobierno toma entre comillas esto y se produce la primera entrega la semana pasada (primeros días de abril) donde se produjeron, incluso un día con lluvia, metros y metros de filas de gente para buscar los alimentos. Es contraproducente con lo que se quiere evitar en un aislamiento social, empezamos a ver los problemas. Esa primera entrega se hizo por auxiliares, por directivos, por camareras de los concesionarios, y en la caso de los dos primeros no se contó con los elementos de protección sanitaria. El gobierno se había comprometido a mandar barbijos y alcohol en gel y no mandó nada. Nuevamente, son los trabajadores quienes asumen los riesgos por una política de ajuste del gobierno”, denunció. Y continuó: “Nosotros lo que queremos es que las familias tengan comida. ¿Qué es lo que hizo el gobierno?, a las escuelas de jornadas simples sólo les dábamos desayuno, y les dieron una vianda de desayuno. Las escuelas de jornada completa o con comedor van a tener otro bolsón, lo que ya produce otra diferencia entre lo que recibe uno y en lo que recibe el otro en el marco de una medida de aislamiento social, bajo un ajuste que lo que genera es que el trabajador autónomo o cuentapropista no pueda salir a ganar el mango. Entonces la situación para el que mandaba a una piba o a un pibe de jornada simple cambió. Exigimos que el bolsón lo tienen que mejorar, y tiene que ser para todos. Porque además ponen a los docentes y a los auxiliares en un lugar de tener que decirles: ‘a vos mamá te doy, a vos no te doy’. Es decir, estamos poniendo la cara en representación a una política que nosotros repudiamos de parte del gobierno”. Por último, Jorge Adaro expresó: “En un primer momento el gobierno dijo ‘se lo vamos a dar (el bolsón) solamente al que hizo el trámite de la beca para el comedor’, pero si les cuento lo difícil que es hacer ese trámite y más aún para lo que significa para las familias de los barrios más vulnerables que no tienen un acceso a la computadora o no tienen ese ejercicio, es terrible. Nuestra exigencia es que se le dé a la matrícula total de la escuela. Esto se ha ido solucionando por la voluntad de los trabajadores”.

El ajuste presupuestario en la educación porteña repercute directamente sobre la comida que se brinda en los comedores escolares. Se redujeron las porciones y la calidad es sumamente inferior. A esto se le suman dificultades en la inscripción online para acceder a las becas. De todo esto habló Jorge Adaro, docente y Secretario General de Ademys, en el programa Tengo una Idea, que conducen Graciela Carballo, Carlos Morchio y Nicolás Rosales. (Por La Retaguardia)Foto: lineasindical.com.ar La situación de los comedores y las viandas escolares es cada vez más preocupante: además de entregar productos que poco alimentan a los niños y niñas, el Gobierno porteño redujo -aún más- la cantidad y la calidad de las raciones. El Secretario General de Ademys, Jorge Adaro, explicó que “el ajuste a los comedores se aplica ya desde hace un año a estar parte, sin lugar a dudas. Hay toda una serie de elementos que configuran este ajuste. Por un lado, algo muy simbólico que fue quitarle las paneras a la hora del almuerzo. Puede haber cualquier excusa, menos que el gobierno esté interesado en resolver el problema de la obesidad infantil. Cuando uno ve lo que se come, lo que uno ve en primer lugar es una reducción de las porciones. Nosotros hemos llegado a tener en el plato de cada niño y niña 1/4 de pollo, hoy eso pasó a 1/8. Entonces la calidad de la comida ha bajado”. Inscripciones online“A esto hay que sumarle otros elementos: la dificultad, sobre todo en los barrios populares, de completar todo el trámite burocrático para que tengan la beca”, agregó Adaro sobre el trámite online que pone en evidencia la brecha digital que se vive, sobre todo en la zona sur de la Ciudad.Además mencionó otras dificultades similares que se viven con la inscripción online en las escuelas en general: “en determinados barrios, los locutorios terminan cobrándoles para hacer el trámite”. Detalló que no es un trámite amigable y que una vez finalizado, luego hay que dirigirse al CGP, para validarlo. “El traslado de la familia, el viático, hacen que esté todo preparado para que haya un degradamiento en ese sentido, y de hecho el gobierno después te dice ‘mirá, bajamos las raciones porque nos estamos ajustando a lo que han bajado como becas completas’”. Menos calidad y raciones más pequeñasEl docente explicó cómo funciona estructuralmente el plan alimentario porteño: “Básicamente el gobierno administra todo lo que es comedor y viandas a través de concesionarios. Es decir, la tercerización del servicio de comedor. Esto no siempre fue así, en algún otro momento, inclusive hay todavía escuelas donde las cooperadoras son las que se encargan de esto. Pero el 90% de las escuelas tiene un servicio tercerizado de comedor. Todos los concesionarios deben brindar el mismo menú en todas las escuelas”.También marcó otras diferencias en el menú: “Algo que no comen más, y los pibes extrañan mucho, es el pastel de papa, por ejemplo. Entonces eso se reemplaza por unas hamburguesas que dicen que no sé que tienen, que tienen lentejas, que no tienen lentejas. Es imposible saber de qué están compuestas esas hamburguesas. En el guiso, la carne es cada vez menos y el arroz es más. Los postres lo mismo. La otra vez publicamos -que nos costó un reto del gobierno y una amenaza- lo que era el flan: líquido”, aseveró.Además remarcó algunas diferencias según los barrios: “los servicios no son todos iguales en las escuelas. En las de pibes muy pobres el servicio es peor. Y la denuncia es mínima, entonces ese también es un elemento que juega, como las ‘marcas’. En algunas ocasiones hemos visto cómo en las escuelas de la zona norte de la ciudad se brindaba determinada marca de leche y en la zona sur otra.  El servicio es deficitario y con una tendencia a empeorar. Lo que el gobierno dice que debe comer un niño y lo que efectivamente día por día le dan, la diferencia es mucha”.Por último, al ser consultado por la cantidad de escuelas que el Gobierno de la Ciudad anuncia que se están construyendo, Adaro aseguró que “escuelas se han hecho poquísimas, este año efectivamente le hacen mucha propaganda. Se hicieron dos escuelas que recuerdo ahora, en el barrio de Lugano, en el Distrito 21; y la de Retiro”, finalizó.