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“Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”

Escrito por el octubre 29, 2022


Con la cita de una vieja canción de Joan Manuel Serrat, el abogado querellante Gustavo Romano Duffau, definió la situación de los siete policías imputados por la Masacre de Wilde. Esta semana comienzan lo alegatos.

Por Colectivo de Medios Populares*
Redacción: Carlos Rodríguez

El miércoles de la semana próxima comenzarán los alegatos y todo indica que la Fiscalía y las querellas –que ya lo adelantaron–, pedirán la condena a prisión perpetua de todos los acusados.
La calificación del hecho y el pedido de condena es el mismo que adelantó a La Retaguardia el otro querellante, Ciro Annicchiárico. Lo mismo ocurrirá en el caso de los fiscales, Viviana Simón y Jorge Betini Sansoni, quienes desde la apertura del juicio sostienen que fue “un plan criminal” y por lo tanto “no hubo error ni causa de justificación” para un caso calificado por el Tribunal Oral 3 de Lomas de Zamora como “quíntuple homicidio agravado, en uno de los casos en grado de tentativa”. Fueron asesinados el vendedor de libros Edgardo Cicutín, el chofer del Peugeot 505, el remisero Norberto Corbo, y sus pasajeros Héctor Enrique Bielsa y Gustavo Pedro Mendoza. El único sobreviviente fue Claudio Díaz, quien iba en el Dodge 1500, junto con Cicutín. Este jueves terminaron las declaraciones testimoniales y desde el miércoles próximo, uno por día, se producirán los alegatos, en este orden: la Fiscalía, los querellantes y finalmente los abobados defensores.


“Actuaron como un grupo comando que sabía lo que tenía que hacer y lo que tenía que hacer era matar”, le dijo a La Retaguardia el abogado querellante Gustavo Romano Duffau, que representa a Patricia De Angelis, viuda de Norberto Corbo. “Nosotros hacemos un balance recontra positivo, porque a casi 29 años de sucedido este hecho, además de las pruebas que ya estaban incorporadas antes de iniciar el debate, se sumaron informes y testimonios de quienes pudieron concurrir, de quienes están vivos, de quienes pudieron ser encontrados y ratificaron todo lo que uno ya traía en la previa del debate”, aseguró.
Precisó que las pruebas incorporadas desde el inicio de la causa y ahora ratificadas, son –entre otras— “las pericias médicas, accidentológicas, balísticas; todo ha quedado ratificado en el debate”.


“Nosotros, que veníamos siguiendo el caso todo este tiempo, ya lo sabíamos, pero ha quedado ratificado también para los que no tenían hasta ahora ningún tipo de conocimiento sobre lo que había pasado”. Los jueces del Tribunal Oral 3 de Lomas de Zamora, Marcelo Dellature, Claudio Fernández y Luis Miguel Galván, en ocho días de sesiones continuadas, tomaron conocimiento –en vivo y en directo, más allá de la previa consulta del expediente— de uno de los casos más emblemáticos de violación de los derechos humanos cometidos, en democracia, por la “maldita policía”, el 10 de enero de 1994.


Romano Duffau afirmó que “incluso para los que no sabían nada del caso, el debate fue un recordatorio recreador de lo que había ocurrido y esto nos pone en la antesala de lo que van a ser los pedidos de condena, por parte de los acusadores públicos y privados”.
Recordó que desde la parte damnificada que representa “ya lo habíamos calificado como un cuádruple homicidio triplemente agravado y una tentativa de homicidio triplemente agradada, por alevosía, por el concurso premeditado de dos o más personas y porque el hecho adquirió una forma que puso en peligro a la ciudadanía”. En el operativo policial se hicieron más de 200 disparos en una zona concurrida del conurbano bonaerense y en pleno día.


Romano Duffau puntualizó que en el debate “hemos visto siempre lo mismo, que es no defenderse, tratar de cuestionar situaciones que realmente han ocurrido, además de no dar ninguna explicación sobre lo ocurrido y eso es lo que hicieron todos los imputados”. Señaló que “eso comprende a todos, incluso a Marcos Ariel Rodríguez, que habló por primera vez y que dio una novedosa versión de los hechos que él mismo se ha encargado de sepultar”. Recordó que el cabo que estuvo prófugo durante 20 años “aseguró que él nunca había estado detenido y que tampoco se había enterado de que estuvo prófugo por 20 años”. Precisó que Rodríguez dijo que “él no había firmado el acta de detención incorporada a la causa (data de enero de 1994), que la que aparece ahí no era su firma, pero la pericia realizada terminó de demostrar que sí, que era la firma de él”. El cabo había hablado de una pericia nueva, que confirmaba sus dichos, pero todo fue desestimado por los jueces del Tribunal Oral 3 de Lomas de Zamora.
El querellante sostuvo que “todo lo que está pasando en este juicio me hace acordar a una canción de Joan Manuel Serrat, esa que dice: ‘Nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio’”. Agregó que en esta causa “la verdad es absolutamente clara y no tiene ninguna explicación en contrario de parte de los imputados”.


Dijo que lo que resta ahora es que “la semana próxima todos acusemos (la Fiscalía y los querellantes) y pidamos las penas que corresponden para este tipo de delitos tan aberrantes”. Aseguró que “todos son responsables del mismo delito, porque acá no hubo división de funciones, fue un grupo operativo que salió al principio con tres móviles, después se sumaron dos más, pero sabían perfectamente donde iban y los que se sumaron recibieron las directivas por radio para saber a dónde iban, sabían que iban a buscar a dos autos y a los dos los acometieron de la misma manera, para eso llevaron el armamento necesario, para eso se distribuyeron las tareas como un grupo comando que sabía lo que tenía que hacer y lo que tenía que hacer era matar”.


Los acusados son Osvaldo Lorenzón, alias “El Pollo” (69 años), Eduardo Gómez (61), Roberto Mantel (65), Pablo Dudek (76), Julio Gatto (56), Marcelo Valenga (59) y Marcos Ariel Rodríguez (59). Quedó afuera del juicio Marciano González, porque sufrió un ACV y no está en condiciones de afrontar el proceso.

Lo que dijo la Fiscalía


“En esta causa, no existió error ni causa de justificación. Todos los imputados son co-autores de los homicidios”. Simón y Betini dijeron que los policías “contaban con medios para saber que estaban ejecutando sumariamente a personas” en el marco de “un estado de derecho”. Los fiscales señalaron en la apertura del juicio que en los años noventa se producían “ataques sistemáticos de la Policía
Bonaerense contra la población civil facilitados por el aletargamiento de la justicia y la inacción del Poder Ejecutivo de entonces”.

*Colectivo de Medios Populares: La Retaguardia / FM Riachuelo / Sur Capitalino / Radio Presente / Revoluciones


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