Canción actual

Título

Artista


Klaukol


Se trata de Las Mercedes, al fondo de La Matanza. Las diez manzanas que constituyen el barrio son linderas, pegadas, a la fábrica de Parex Klaukol, cuya actividad industrial implica la expulsión de material particulado, especialmente sílice, a través de sus chimeneas. El periodista Andrés Masotto de Radio Presente entrevistó hace semanas a Susana Aranda, una de las más aguerridas activistas, y luego publicó lo que la vecina contó en un hilo de tweets. Eso provocó la reacción de la empresa, que mediante una carta documento le exigió que borrara las publicaciones y dejara de ‘injuriar’ a la industria. Por esa razón, se convocó a una conferencia de prensa en la sede del SiPreBA para denunciar la persecución a la prensa. Luis Angió realizó por La Retaguardia la trasmisión en vivo la convocatoria.  (Por Luis Angió y Rosaura Barletta para La Retaguardia)Fotos: Luis Angió Dramática es literal, la población se redujo a la mitad, y murieron grandes y niños con problemas en el sistema respiratorio, digestivo, en la piel y cáncer. Los que quedan vivos, se bañan sentados y respiran con un puff. Susana Aranda, cuando empezó a sospechar que algo no era normal, barrió el polvillo que volaba periódicamente desde la planta hasta el patio de su casa y lo juntó en un frasco. Un frasco grande, como de aceitunas. Hoy puede tomar ese frasco y, a la luz del sol, se observa el color metalizado de lo que respiran todos en Las Mercedes. En la conferencia de prensa, Andrés Masotto explicó que “hay estudios que reconocen que la población del barrio está afectada por el material que despide Klaukol. Los vecinos padecen enfermedades respiratorias, dermatológicas y cáncer. Parex Klaukol también habría incumplido con obligaciones legales”. Y se refirió a la respuesta que dio la empresa por medio de la carta documento: “Le hago saber que no existen constancias ni estudios de que la actividad de mi representada cause daño alguno al ambiente y/o la salud de la población y que Parex Klaukol SA no ha incurrido en violación de la normativa ambiental y que cumple debidamente con sus obligaciones para llevar a cabo su actividad industrial. Sus afirmaciones falsas han causado y causan un daño reputacional a la compañía, dado que la conducta en la que usted ha incurrido ampliamente excede el derecho a la la libertad de expresión y claramente escapa a la ética de la profesión del periodista, profesión que usted dice ejercer. Por lo expuesto, lo intimo a abstenerse de continuar realizando manifestaciones falsas, maliciosas e injuriantes contra mi representada en cualquier medio y a que, en el plazo perentorio de 24 horas de recibida la presente elimine las publicaciones agraviantes de la plataforma de Twitter bajo apercibimiento de iniciar las acciones judiciales penales y civiles que corresponden.ATTE Gabriel Macchiavelo, apoderado de Parex Klaukol SA”.Masotto aclaró, luego de leer la intimación, que “Parex Klaukol viola todos los tratados ambientales, está probado en dos informes que sí está envenenando a la población de Las Mercedes, que contamina el suelo, el aire”.El patio trasero Para Susana Aranda, una de las principales activistas, los vecinos en peligro viven en el patio trasero de La Matanza que es Virrey del Pino. “Es un lugar densamente poblado. Somos todos clase trabajadora. Mi barrio es de diez manzanas. Quedamos pocos vivos. Murieron más de la mitad. Familias enteras que ya no están, ya están callados para beneficio de Parex Klaukol. Acá hay tres responsables. Uno, son los medios monopólicos, que saben de esta situación y lo tapan por el poder adquisitivo de Parex Klaukol porque compran la franja más cara para sus propagandas. Literalmente controlan la prensa. Lo que está pasando en mi barrio no es aislado, no es algo que se puede minimizar. Estamos condenados a morir, nos están matando”, denunció. Además, Aranda ofreció precisiones: “Estamos respirando vidrio molido discriminado en cuarzo que es letal y no hay escapatoria. No tenemos agua potable, compramos agua envasada. En mi casa no se puede usar escoba porque tengo nietos, mi nuera, tenemos que usar todo húmedo porque Klaukol tiene que facturar a cielo abierto porque así es más económico. Klaukol puede trabajar sin contaminar, pero es muy caro, entonces no es rentable”, planteó.Susana se refirió, además, a la categorización de la industria y que incumple los parámetros establecidos: “Tenemos a la fábrica encima. Está en la calle Miravé, y enfrente vive gente. De los que quedan vivos, porque muchos no están. Hay diez vecinos diagnosticados con cáncer. Un barrio de mil y pico de personas y más de la mitad murieron. No me puedo ir porque tasamos las dos casas que tenemos y se licuó el precio de las propiedades por esta situación. Nadie quiere ir a vivir ahí. Cuando nosotros compramos ahí no había una fábrica, era una zona residencial, eucaliptos y donde está Parex Klaukol había un tambo de leche. Raúl Magario les dio el permiso en 2003. Plena vigencia de la ley que establece que una industria de categoría 3 no puede estar en una zona urbana ni mixta, sino en una zona rural”, aseguró.“Parex Klaukol usa pesticidas, fungicidas, plaguicidas en su pintura de alta performance. Es líder en su producto, pero mata. Respiramos sílice día y noche sin ninguna protección. Deberíamos tener mascarillas con filtros especializados. No tendríamos que tener la piel expuesta. En mi barrio todo el mundo usa puff para respirar. Los hombres llegan a los 40 años y se bañan en la ducha arriba de la silla porque no les da el pulmón para poder bañarse y secarse. No podés limpiar el jardín, atarte las zapatillas. Te falta el aire. Así vivimos, pero somos invisibles. La Justicia Federal tardó diez años en una causa de 23 cuerpos para decir que no son competentes. Ahora está durmiendo en la UFI 6 de San Justo”, explicó sobre la intervención judicial en el caso.Además, Aranda planteó las razones de su posición y lo que espera de la lucha que emprende: “Yo no voy a morir en mi cama,