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El psiquiatra Enrique Stola pasó por el programa radial La Retaguardia. El médico que se define feminista aportó su análisis sobre el machismo en los medios de comunicación. También reflexionó acerca del crecimiento de los ataques hacia los feminismos a nivel global y sobre la Justicia patriarcal. Entrevista: Fernando Tebele/Pedro Ramírez OteroRedacción: Nicolás RosalesEdición: Pedro Ramírez OteroIlustración: Chechu Rodríguez/La Retaguardia El médico psiquiatra Enrique Stola analizó el caso de Lucio Dupuy, el niño de cinco años que fue asesinado por su madre, Magdalena Espósito Valenti, y su pareja, Abigail Páez. “El caso Lucio, creo que lo que tenía por detrás apareció rápidamente. Un abogado amigo experto en esta temática me dijo hace unos muy pocos días que este es un caso donde no hay héroes. Porque todas las personas adultas fallaron en cualquiera de sus estamentos, de sus ámbitos familiares. Pero aparecieron quienes tratan de utilizar estos casos, donde aparecen mujeres asesinas, en contra de todas las conquistas que las mujeres feministas y personas del movimiento LGTBIQ+ han logrado”, dijo. El psiquiatra, quien se define feminista, se refirió al rol de los medios tradicionales de comunicación que reprodujeron discursos que buscaban transformar el caso “en un crimen de género, de odio de género, de odio a los varones”. En este sentido, planteó: “Ahí están metidos todos los grupos y grupúsculos machistas, masculinistas que hay en Argentina que dicen que están llenos de denuncias falsas. Sabemos que de cien casos de abusos a niños, sexuales, de incesto paterno filial, solamente tres o cuatros casos llegan a juicio, y de esos uno o dos son condenados”. Por otro lado, Stola opinó sobre el crecimiento de los ataques hacia los feminismos a escala mundial. “Hay un ataque fuerte a la lucha feminista, y no solo en el caso de Lucio, porque esto se está dando en todo el mundo, en todo lo que es occidente y el área de dominio sobre los países del norte y los del sur, sobre África o los países del este. Están avanzando los sectores más retrógrados y reaccionarios en contra de la comunidad homosexual, trans travesti, de las feministas, del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo. Además, esto se expresa en los partidos de derecha y ultraderecha que tiene consignas claramente antifeministas, en contra de las mujeres”, dijo. Mujeres, machismos, y medios El psiquiatra habló acerca del espacio de las mujeres en los medios y la perspectiva de género: “En los medios de comunicación en general hay poquísimos varones que tienen perspectiva de género y formación, y muy pocos que se identifican con el feminismo. Y también hay muy pocas mujeres feministas. Los grandes periódicos han puesto editoras de género pero me da la impresión de que es pura gallery, es porque es políticamente correcto. Pero el poder que les dan es muy poco, y lo que pasa es que en muchas notas pasan a ser altamente cuestionadas. Además las feministas, ya sean locutoras, economistas, analistas políticas, son calificadas como las quilomberas, las que pueden romper en cualquier momento con la dinámica masculina que se impone en los debates. Hasta podemos ver en los canales más progres que en las mesas de debate no invitan a ninguna mujer. Salvo que haya el asesinato de una mujer, ahí las llaman, porque es necesario traerlas”. La Justicia patriarcal y el falso SAP Stola planteó que en todo el mundo las mujeres sufren castigo por parte del poder judicial. “La mujer que se atreve a denunciar incesto paterno filial escandaliza. No queriendo aceptar que la mayor cantidad de agresiones sexuales a niños y a niñas se da por personas conocidas. Y dentro de las estadísticas, el incesto paterno filial representa casi un cien por ciento. Es decir, el padre biológico o el padrastro son los agresores sexuales. A estas mujeres también se las ataca con el falso fenómeno del SAP (Síndrome de Alienación Parental), y está el grupo denominado ‘Infancia compartida’ y otros chantas masculinistas que hay por ahí que intentan no hablar de síndrome sino de alienación parental donde las mujeres madres le lavan la cabeza a los chicos y les inventan una realidad que no existe y que los pibes están psicóticos, alienados. En la mayoría de los casos, los hijos o hijas son entregados a las familias de los tipos violentos, a los agresores sexuales”, explicó. El poder judicial, dijo el psiquiatra, en cada una de las estructuras “es el más conservador que hay, porque tiene que garantizar la dominación de clases, la racial blanca, y el sexismo, la dominación masculina”. Y agregó que en el último tiempo se están volviendo a instalar viejos discursos machistas: “Y cómo la derecha ha perdido la vergüenza dice claramente lo que piensa. A veces vemos profesionales mujeres machistas que son las portadoras de ese discurso, defendiendo a los varones y colocando a los varones como víctimas. Y esto también atraviesa el poder judicial. También sucede en gente que trabaja en la salud mental”.

Tiene 12 años y es de CABA. En 2017 su madre realizó la primera denuncia. Su progenitor irá a juicio oral el año próximo, pero el Ministerio Público Fiscal decidió no acusar. Redacción: Gabriela Suárez López Ilustración: Chechu Rodríguez – La RetaguardiaProducción y Edición: Eugenia Otero Hace más de 4 años que la mamá de Milagros pide que escuchen a su hija. El pedido es a la justicia, así, con minúscula, porque es una justicia que lo único que hace es reproducir la violencia del abuso obligando a la niña y a su mamá a relatar reiteradamente la historia para luego hacer caso omiso de sus testimonios y amenazarlas con revincular a Milagros con su progenitor acusado de abuso.   Todos los elementos de la causa convalidan el relato de Milagros: los y las profesionales que la han acompañado, testigos, una perito especializada y, por supuesto, la propia niña. El acusado no ha presentado ninguna prueba que ponga en duda este relato después de cuatro años de iniciadas las acciones legales y parece que está seguro de que no necesita hacerlo, pues todo el sistema actúa por él, basta con que solo diga que la madre indujo a la niña a mentir. Esto pasa diariamente en el sistema judicial y tiene nombre y apellido: Síndrome de Alienación Parental (SAP). N., la madre de Milagros lo explica claramente: “Hay una práctica reiterada y habitual de los tribunales. Es el SAP, que es una de las muchas maneras que tienen de silenciarnos y consiste en decir que cuando una infancia narra que atravesó un proceso de violencia sexual, se dice que está inducida, que ese niño o esa niña mienten porque hay una mamá malvada, mentirosa, resentida”. Junto al círculo de silencio que rodea a la víctima y a su madre protectora, otra manera de revictimizar a las infancias es señalar que la infancia miente porque la madre la indujo a hacerlo. Y es en este punto donde el sistema patriarcal presiona fuertemente sobre las víctimas para seguir funcionando, para que todo sea “normal”. Porque el abuso, como práctica social machista, marca los cuerpos no solo cuando ocurre de manera directa, sino también durante el largo camino de revictimización que puede comenzar a partir de la denuncia. Si a esto le sumamos que el abusador es un hijo sano del poder, el sistema los protege más y mejor. En este caso en particular, el abusador es un hombre de clase media acomodada, egresado de la Universidad de Buenos Aires, profesor de la Universidad de Lanús, muy activo en redes sociales, hijo de un político con vínculos estrechos con el poder. Y está claro que cuando un abusador tiene poder económico, político y simbólico, tiene más posibilidades de seguir impune. “Quienes acompañamos estas experiencias sabemos perfectamente lo que es el círculo de silencio alrededor, sabemos perfectamente lo que es la trituradora de carne del poder judicial, sabemos perfectamente lo que es dormir con miedo, sabemos perfectamente lo que es mirar una infancia que tiene miedo y dolor y sabemos perfectamente lo que cuesta socializar el dolor que nos atraviesa”, expresó N., madre de la niña en la 42° Marcha de la Resistencia de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora el 8 de diciembre pasado. La mamá de Milagros soportó muchas violencias y amenazas, directas e indirectas, en los últimos años. Han intentado obligarla a firmar la revinculación de la niña con su abusador. Ha recibido presiones de altas funcionarias públicas. Durante estos 4 años debió renovar las perimetrales cada 30 días, aún debe compartir su lugar de trabajo con el abusador porque “no está probado” lo que Milagros dice que le ocurrió. Además, desde el plano jurídico-administrativo, hubo desprolijidades en el procedimiento (sobreseer al abusador sin citarlo a declarar ni siquiera una vez) y diversas violencias institucionales sobre la madre y la hija (convocatorias reiteradas a declarar en lugares hostiles, olvidos de informes importantes, etc).  La niña, que hace un gran esfuerzo para testimoniar y relatar lo inenarrable, para poner en palabras, en gestos y silencios el horror, necesita de estrategias psico-jurídicas que estén a la altura de las circunstancias para evitar su revictimización.  El caso de Milagros no es el único. N. tomó como ejemplo el caso de la niña riojana Arcoiris: “(Delfina, la madre protectora) no puede salir, porque le tiraron encima a la Gendarmería, a la Policía de La Rioja y a la Policía de esta Ciudad de Buenos Aires. Y no puede salir porque si sale le secuestran a su hija y porque hay una orden para patear la puerta de su casa,” explicó. En el Reino del revés, mientras la niña y su madre padecen todos estos acontecimientos hostiles y desprolijos teniendo en cuenta que continúan vulnerando los derechos de una menor, el abusador vive una vida sin sobresaltos, viaja por el país, ejerce la docencia y tiene una vida muy activa en redes sociales. Como si todo esto fuera poco, el  fiscal  Claudio Ariel Josfal a cargo de la Fiscalía Nacional en lo Criminal Nª49, del Juzgado Nacional Nª25 recientemente abandonó la causa luego de que una jueza penal señalara que había datos suficientes para realizar un juicio oral. Josfal, representante del Ministerio Público Fiscal, que debe resguardar los intereses de la niña, abandonó la causa sin dar explicaciones, dejando a Milagros y su mamá sin representación legal en el juicio oral que prontamente deberán enfrentar. La situación de la niña se puede seguir en las redes como @escuchenamilagros

El anuncio de la presentación de un libro sobre el falso  Sindrome de Alienación Parental (SAP) en la Universidad de Buenos Aires generó un gran repudio. El SAP es uno de las herramientas que utiliza la Justicia para perpetuar el abuso sexual sobre las infancias y perseguir a las madres protectoras. Quiénes son los convocantes. Redacción: Tamara Alfaro Moreno / Eugenia Otero Muchísimas niñas, niños y jóvenes son víctimas de violencia sexual por parte de sus progenitores y sufren consecuencias psíquicas comparables a las de la tortura. Cuando logran expresarlo de diferentes maneras, suelen ser las madres quienes escuchan, creen, protegen y denuncian. Pero la justicia patriarcal, en lugar de cuidar a las niñeces y condenar a los abusadores, las hostiga y recurre a diversos mecanismos para desacreditarlas. La Academia es cómplice cuando desarrolla conceptualmente argumentos para perpetuar las torturas. El próximo 10 de noviembre la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires anuncia la presentación de un libro que sostiene la existencia del falso Sindrome de Alienación Parental (SAP), con el que se suele convertir a los denunciados en víctimas, desacreditar y criminalizar a las madres protectoras y perpetuar la tortura que significa el abuso en las niñeces. Lo que sostiene el SAP es que las madres alienan a sus hijas o hijos, inventan hechos de violencia sexual, le llenan la cabeza haciéndoles creer que sufrieron el abuso, y las y los niños lo repiten. Muchas voces se alzan para repudiar la presentación de “Alienación parental. Niños huérfanos de padres vivos”, de Mauricio Luis Mizrahi, titular de la Cátedra de Derecho de Familia, ex Juez de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil y Doctor en Derecho y Ciencias Sociales (UBA). En 2016 fue premiado en la Academia Nacional de Derecho y Ciencias Sociales por su obra “Responsabilidad Parental”. Pero no solo desde el Derecho hay profesionales que sostienen estas teorías que victimizan a los abusadores y culpabilizan a las madres cuidadoras, también se anuncia la participación de  académicas de otras disciplinas, que son docentes de grado y posgrado en diversas universidades, donde transmiten estas conceptualizaciones y estas prácticas a quienes están formándose profesionalmente en la UBA y en otras universidades de nuestro país.  Entre los expositores anuncian a Sandra Veloso, Jueza de Familia, Profesora de posgrado en UBA y UP; Claudia Moggia, Psicoanalista en niños, niñas y adolescentes y docente de la Práctica Profesional Clínica con niños y adolescentes Las formaciones del síntoma en la Facultad de Psicología de la UBA; Lina Pannía, Perito Trabajadora Social, Docente en la Capacitación para Peritos de la Facultad de Sociales de UBA. Coordina la presentación María Cecilia Burgos Baranda, Profesora de grado y de posgrado de Derecho de Familia, UBA. Cada día niños y niñas de nuestro país padecen diversas formas de ataques sexuales en nuestro país. El camino de la reparación es costoso, no solo desde lo material. Lograr ponerle palabras a eso que sucede en manos de quien te debe amar, cuidar, impedir que tales daños suceden, es inenarrable.  La población en general podrá preguntarse: ¿Cómo puede un padre hacerle eso a un hijo o hija?. Para quien lo padece la pregunta suele ser: ¿Cómo pudo papá hacerme esto?. Es relamente duro si este proceso crudo de develamiento por el que debe atravesar una víctima de violencia sexual es descreído por cualquier persona representativa para ella; tanto que puede llevarla a retractarse de aquello que se animó a reconocer. Si esto sucede en los estrados judiciales, es violencia pura. Se descree de lo que dicen de distintas maneras, porque no utilizan los términos que las instituciones requieren para sancionar los hechos, porque la madre protectora les “llenó la cabeza” o denuncian a quienes llevan el tratamiento terapéutico de las víctimas. Finalmente, se las obliga a una revinculación forzosa con quien les somete sexualmente, perpetuando la violencia y acallando la “denuncia”, sino que además estamos sometiendo a las víctimas a una tortura de la que no tendrá escapatoria.  ¿Cuáles son los recursos de los se valen para hacer semejantes actos? la utilización de desarrollos teóricos como el SAP; falsas memorias, y otros, que la Defensoría de Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación calificó en 2020 como “argumentos que relativizan o no convalidan la ocurrencia de los hechos, basándose en prejuicios e ideas discriminatorias y culpabilizadoras de aquellos que debieran ser protegidos. Este tipo de fundamentos se basan en una falacia carente de rigor científico, que aún persiste entre los operadores judiciales”. Como lo demostró la multitudinaria muralla humana que se realizó el pasado viernes 21 en defensa de la niña Arcoiris y su mamá, la lucha de las madres protectoras debe apelar a herramientas del colectivo feminista para intentar frenar los embates de las personas denunciadas contra ellas, de quienes los representan y también de parte de organismos oficiales.  Intentá ponerte un segundo en el lugar de un niño o niña que padece este tipo de violencias, cerrá los ojos fuerte, pensá en que te animás a decirle a tu maestra o algún otra persona adulta lo que pasa, que tu vieja te acompaña a denunciar; pero más tarde no te creen, denuncian a tu maestra, a tu psicóloga, a tu mamá, te obligan a ver y residir con  tu agresor, ¿que harías? Indignate, armá redes, exigile al Estado lo que le corresponde, pero mientras construí colectivamente el cuidado porque esto no puede pasar.

En un comunicado oficial, la Organización de las Naciones Unidas advirtió sobre la incorrecta aplicación del Síndrome de Alienación Parental (SAP) en casos de violencia sexual en España contra niños, niñas y adolescentes. El organismo internacional se refiere a un caso específico en que la justicia desprotege a una madre y a su hija e ignora los testimonios de la niña que denuncia el abuso de su progenitor. (Por La Retaguardia) ✍️ Redacción: Tamara Alfaro Moreno 💻 Edición: Diego Adur 🖍️ Ilustración: Marilina Contreras   En los últimos días se hizo público un documento periodístico  en el que la ONU alerta que en España se encuentran utilizando falso Síndrome de Alienación Parental (SAP) en documentos profesionales periciales, forenses y judiciales en casos de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes. Esta falsa teoría desmentida por organismos internacionales y colegios de profesionales a lo largo de todo el mundo (en Argentina describen la gravedad de su uso la Dra. Eva Giberti o el Dr. Carlos Rozanski, por ejemplo), todavía es utilizada en informes profesionales que deslegitiman el testimonio invaluable de la persona que padece el abuso, con el esfuerzo psíquico que conlleva ponerle palabras a lo innombrable, y la exponen a violencias aún más graves por haberlo hecho. Además de que responsabilizan a la madre protectora por “hacerle creer eso al niño/a”.  En el documento se recuerda que este no es un caso aislado. Que desde las relatorías de Naciones Unidas se ha pedido explicaciones al Gobierno español sobre el uso de estereotipos de género en la justicia y concretamente sobre lo extendido del uso del Síndrome de Alienación Parental en al menos cuatro ocasiones: “Nos preocupa que, a pesar de ellas, los problemas estructurales referidos sigan presentes de diferentes formas”, refiere el escrito. En estos lares, lastimosamente no cambia la situación.  En 2020, a raíz de una situación que sucedió en los medios de comunicación, la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Buenos, la Secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, entre otros organismos firmantes, manifestaron el rechazo al uso del SAP en un documento público (“La aplicación del denominado Síndrome de Alienación Parental produce severas afectaciones a los derechos de niños, niñas y adolescentes”). A pesar de ello y desoyendo estas sugerencias, lo continúan utilizando en evaluaciones solicitadas judicialmente. Esto se vio de manera evidente en el caso de la lucha de Daniela, madre protectora e impulsora del #Alerta Martin, quien se encuentra atravesando en este momento una dura lucha judicial para proteger a su hijo de los abusos de su progenitor. Convivimos con mitos a diario que nos impiden quitarnos el velo y ver la vida con otra perspectiva. En este caso el SAP potencia el mito de “las falsas denuncias”, y si quien lo dice es un equipo de profesionales especializados de la justicia o de donde sea, el impacto para las víctimas es irreparable. La violencia sexual existe, arrasa las mentes y cuerpos de quienes la padecen y en la mayoría de los casos sucede en los lugares que pensamos que son los más seguros.

Lo acusaron por violencia sexual contra su hijo. A pesar de que tenía denuncias anteriores, la justicia lo absolvió y ahora él pide la revinculación con el niño. El responsable es el Juzgado en lo Criminal 36 de CABA, a cargo de Alejandro Ferro y detrás de esta situación oscura e injusta estaría APADESHI, organización conocida por defender pedófilos usando el inexistente Sindrome de Alienación Parental (SAP) y por amedrentar a profesionales que trabajan combatiendo la violencia sexual contra niñas, niños y adolescentes. La indignación de la madre cuidadora y miles de activistas que saben que la revinculación con un abusador es tortura. (Por La Retaguardia) Compartimos el comunicado del grupo que acompaña a la mamá de Martín: 📣URGENTE : LA DEFENSA DEL ABUSADOR DE MARTÍN PIDIO LA REVINCULACIÓN EN EL JUZGADO CIVIL 🔴🔥 Martín reveló abusos sexuales de su progenitor. El juez penal Alejandro Ferro dictó escandalosamente el sobreseimiento del abusador y, mientras la medida es apelada por la mamá de Martín y sus abogadas, el acusado de abuso pidió la revinculación con el niño. 👉🏼Además, el progenitor de Martín fue imputado y sobreseído en 2004 en otra causa por abuso sexual a su hija mayor de una pareja anterior, cuando la niña tenía dos años y medio. En aquel abuso, pese a contar con pruebas físicas y una pericia psiquiátrica que manifestaba tratarse de “una personalidad hipernarcisista con rasgos perversos”, fue sobreseído. 👉🏼Siempre lo defiende la abogada Elsa González, quien sería miembro de APADESHI, organización conocida por defender pedófilos usando el inexistente Sindrome de Alienación Parental (SAP) y por amedrentar a profesionales que trabajan en abuso sexual infantil (ASI). 😡La revinculación con abusadores es una tortura, una nueva victimización y un acto de violencia contra el niño. NO A LA REVINCULACIÓN DE LAS NIÑECES CON SUS ABUSADORES El Poder Judicial tiene que dejar de ser un lugar de impunidad, secretos, silenciamiento y violencia. Necesitamos actos de justicia que sea reparadores. 🔴Ahora lxs responsables de cuidar a Martín son el Juzgado Civil Nro 25. Jueza Marcela Sommer Defensoría Nro 7. Defensora de Menores Carolina Paladini. ✋🏻 MARTÍN sufrió abuso sexual x parte de su progenitor. MARTÍN ya habló, su cuerpo también habla de lo que sufrió. No vamos a dejar que se viole su integridad nunca más. ✨Seguimos por el camino de LA VERDAD.✨🔥 #JuicioYCondenaAlAbusadorDeMartin. #SiempreHayMásDeUnaVictima. #AbusoSexualEsTortura. A Martín lo cuidamos entre todas y todos.