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Claudio Cormick es Doctor en Filosofía (UBA) y trabaja en el CONICET. En comunicación con La Retaguardia, explicó a partir de algunos ejemplos por qué hay que defender la investigación en Ciencia y Tecnología financiada por el sector público, desde la investigación en energía nuclear hasta las relacionadas con el Mal de Chagas. Además, contó acerca del festival Elijo Crecer, que se realizó simultáneamente en casi todas las provincias del país para acercarle a la población todo el desarrollo que impulsa el CONICET. Escuchá la entrevista completa

Con un tono fabulesco, pensamos el presente que atravesamos (¿o que nos atraviesa?) mientras transcurre el primer gobierno argentino de ultraderecha del siglo XXI. Redacción: Sergio ZalbaEdición: Valentina Maccarone Ilustración: Chechu Rodríguez / La Retaguardia En 2007, Oliver Clerk publicó un libro que alcanzó cierta notoriedad: La rana que no sabía que estaba hervida y otras lecciones de vida.  Clerk, escritor suizo contemporáneo, trabaja sobre el espacioso y sutil universo de la autoayuda considerándose a sí mismo como especialista del perdón y del desarrollo personal. En el primer capítulo de su libro, propone una especie de tragicomedia: “Imaginen una cazuela llena de agua, en cuyo interior nada tranquilamente una rana. Se está calentando la cazuela a fuego lento. Al cabo de un rato el agua está tibia. A la rana, esto le parece bastante agradable, y sigue nadando”. Pero el agua se sigue calentando, dice Clerk, la temperatura sube y aunque el calor le produce algo de somnolencia, la rana no se inquieta. A los pocos segundos, con el agua muy caliente, ya no le resulta tan agradable, pero carece de fuerzas para patalear. Poco a poco, la rana queda hervida, casi sin darse cuenta. Es bien seguro, dice el autor, que si se la introduce de una vez en un recipiente con más de 50 grados de calor, saltaría inmediatamente de una sola zancada. En las sociedades y en las vidas personales, concluye este especialista en felicidad humana, ocurren situaciones similares. Cuando la tragedia se hace cotidiana, naturalizamos sus causas hasta caer, mansamente, en su inevitable desenlace: la muerte. ¿Nos estarán hirviendo como a la rana del cuento? Puede ser. Hace tiempo abandonamos el asado, después raleamos las verduras, ahora la polenta sale sin tuco ni queso y vivimos en penumbras escamoteando el consumo de energía.  ¿Cómo pasamos del ímpetu revolucionario por conquistar derechos a la apatía de la supervivencia? ¿Cómo no nos avivamos que, desde hace mucho tiempo ―no sólo cuatro meses― estamos inmersos en una cazuela con agua avanzando a la ebullición? El canibalismo liberal-capitalista nos hierve para su propio alimento. Eso lo sabemos desde hace mucho. Lo que aparece como cierta novedad es que nos sintamos tan cómodos dentro de la olla; que no estemos pataleando, que hagamos la plancha en la misma pileta que nos cocina. Embajadores de la Luz Hace más de diez días, la Agencia Judía de Noticias (AJN) anticipó una información: “Milei y su hermana, Karina, recibirán la distinción Embajadores Internacionales de la Luz por su inquebrantable dedicación a difundir la libertad”. Vaya galardón. Tan ignoto como extraño, ese galardón será otorgado a Javier y Karina por un Centro de Jabad Lubavitch (organización del judaísmo ultraconservador) en Miami. Y hacia allí partieron, el martes 9 de abril, en un vuelo comercial.  Mientras tanto, la hornalla sigue encendida. Y el pueblo argentino adentro de la olla. Sin embargo, el Presidente junto con la secretaria general de la Presidencia están siendo honrados por “su inquebrantable dedicación a difundir la libertad, la esperanza y la positividad frente a la oscuridad”, tal como reza la invitación a semejante evento. Invitación en la que, además, les agradecen por “sus incansables esfuerzos por Israel y la comunidad global (y por ser) un faro brillante que ha inspirado un mundo más luminoso y compasivo”. Por otra parte, el mismo Javier Gerardo Milei, en una entrevista con su periodista-amigo Alejandro Fantino, dijo que este lunes se reveló una extraordinaria noticia. “Soy el segundo presidente con mejor imagen del mundo”, afirmó. Por supuesto que no mencionó la fuente ni quien le reveló semejante verdad. Pero, tengo una fuerte sensación: mientras sube el fuego de la cocina y nos revuelve con su mágico cucharón, el tipo está convencido de que todo eso es verdad;  que efectivamente es un faro brillante, luminoso y compasivo. Y que, gracias a su capacidad y a las Fuerzas del Cielo, volveremos a ocupar ―en términos económicos― los primeros lugares del planeta. No terminar como la rana Así estamos. A punto de hervir en una cazuela gigante, sin demostrar capacidad de reacción y con un presidente que bambolea entre el desquicio y la perversidad. Sin embargo, no se avizoran cambios en el horizonte inmediato. ¿Cuántas muertes tienen que ocurrir para que nos dispongamos a salir masivamente de la olla? ¿Cuántos cadáveres tendrán que flotar alrededor nuestro? (A propósito, mientras se escriben estas líneas, la Policía Federal y de la Ciudad reprimen a manifestantes de las organizaciones sociales que reclaman alimentos para sus comedores. Y también, claro, gasean y balean a trabajadores y trabajadoras de prensa que cubren ese acontecimiento).  LO QUE NO QUIEREN QUE VEAMOS Las salidas sectoriales son importantes. Pero resultan insuficientes. Una vez efectuadas, parece que se vuelve a la pileta de cocción. Si no queremos terminar como la rana de Clerk, habrá que buscar otras formas. Las instituciones tienen sus caminos legales. Es hora de comenzar a transitarlos.

Alberto Olivares, abogado e integrante de La Casa de la Memoria de Rosario pasó por el programa Hora Libre de Radio La Retaguardia. Allí, realizó un profundo análisis estructural de Rosario, la violencia y el narcotráfico. Además remarcó el fracaso de las políticas públicas a la hora de intentar resolver este grave problema.  Entrevista: Natacha Bianchi / Matías Bregante / Rodrigo FerreiroRedacción: Nicolás RosalesEdición: Pedro Ramírez OteroFoto: Natalia Bernades / Archivo La Retaguardia Rosario vive una violencia que se ha acrecentado en el último tiempo con asesinatos a civiles. La ciudad tiene la mayor tasa de homicidios del país. Existe un negocio de “narcomenudeo” generado principalmente por el puerto agroexportador, ubicado sobre el canal de transporte Hidrovía Paraguay-Paraná. Esta, también es utilizada para contrabandear droga, en particular cocaína con destino a Europa y Oceanía. Por otro lado, existen más de 30 bandas que operan y extorsionan en la zona. A pesar de que los jefes narco fueron apresados, continuaron dando órdenes desde la cárcel gracias al amparo de las fuerzas policiales y de parte de la justicia corrupta.  “Hay tres aspectos que me parecen fundamentales, uno de ellos es no tener un enfoque coyuntural inmediatista respecto a lo que ha explotado en los últimos días, sino que hay que tratar de tener una mirada mucho más comprensiva, abarcativa, y más analítica con respecto a lo que ha pasado con Rosario en, por ejemplo, los últimos 40 años”, dijo Alberto Olivares, abogado, militante de derechos humanos, e integrante de La Casa de la Memoria de Rosario.  “El segundo punto que me parece importante analizar es el fracaso de las políticas de seguridad pública desde el 83 en adelante después de la salida de la dictadura. El fracaso pasa por la prédica punitivista y represiva del gobierno, con la muerte de cuatro laburantes”, continúo.  La transformación estructural de Rosario El militante de derechos humanos historizó sobre la ciudad de Rosario: “En la década del 60 y 70 se hablaba de esta zona con un gran despliegue de industrialización con una presencia del sujeto obrero en una gran dimensión. Por otro lado, en los años 74 y 75 estuvo la operación Serpiente Roja que anticipó lo que fue la aparición de la Triple A y lo que iba a ser después el terrorismo de Estado. La zona industrial luego se transformaría en un cementerio y se convirtió en un gran Rosario donde tenemos el ‘narcosojismo’ transformando a la economía como primarizada que exporta y se lleva las divisas”. Olivares explicó que el 60 por ciento de los productos que se exportan pasan por Rosario. “Y al mismo tiempo no hay ningún camión que sea controlado por el Estado. Es vox populi de que los barcos trasladan cantidades de drogas, que son las que salen a Europa, Estados Unidos, Medio Oriente, y África. Tampoco el río Paraná tiene ningún tipo de control”, dijo el abogado. “Rosario hoy está ‘uberizada’, es decir ha pasado de ser productora de industria a vender servicios y su vinculación financiera. El otro aspecto es la transformación inmobiliaria. Se habla de que se han lavado 30 mil viviendas que actualmente se encuentran ociosas y desocupadas. Del otro lado hay bolsones de miseria planificada, de desocupación, precarización laboral y pobreza”, planteó Olivares. Por último, insistió: “En cuanto al fracaso de las políticas públicas, el actual gobernador Maximiliano Pullaro, fue ministro de Seguridad del gobierno del partido socialista, y ahora está haciendo lo que no pudo hacer en aquella época pero de una manera obscena. Todo este discurso punitivista, de mano dura o de resolver las cosas con las cárceles, al estilo Bukele ( presidente de El Salvador). Hay dos grandes bandas históricas, la de Alvarado y la de Los Monos. Ahí, hay una gran disputa territorial que se hace a fuego de 9 milímetros y balas de la policía que está incorporada casi como una protagonista esencial en sociedad con estas bandas”.

https://www.youtube.com/watch?v=QZG8uRcUJB8 Cobertura: Agustina Sandoval Lerner / Fernando Tebele Charla en la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires para abordar el caso del represor Luis Esteban Kyburg, quien se refugió en Alemania, país que no tiene política de extradición de sus ciudadanos. Kyburg iba a ser enjuiciado en ese país, pero murió a fines del año pasado. Participan: Anahí Marocchi, querellante y parte de Familiares de Mar del Plata.Fabián Hallgarten, querellante. Griselda De Antoni, Secretaría de Derechos Humanos. Alberto Zuppi, Profesor de Derecho Internacional.

Por iniciativa de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) se realiza hoy una jornada de lucha contra los despidos masivos en oficinas públicas. En ENACOM fueron cerradas todas las oficinas menos la de CABA, en la que se registrarían un centenar de despidos. En el INaDi trabajadores/as consiguieron ingresar. Esta modalidad se replicó en otras dependencias. En otros lugares, como el Ministerio de Salud, quienes tienen sus contratos vencidos a fines de marzo continúan trabajando sin que nadie les dé alguna precisión. https://www.youtube.com/watch?v=GNDBe3ISDg0

Lo anunció a través de su vocero, Manuel Adorni, quien explicó que se convertirá “en una dirección en la que quedarán 64 empleados” y eliminarán 900 puestos de trabajo. El Instituto se encargaba de coordinar y aplicar políticas para las y los pequeños productores, y para las familias campesinas. Un repaso por la historia del INAFCI y la opinión de Rosalía Pellegrini, de la Asociación Mujeres de la Tierra. Redacción: Sergio ZalbaEdición: Pedro Ramírez OteroFoto: Asociación Mujeres de la Tierra En un tiempo fue Subsecretaria de Agricultura Familiar y dependía del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca. Con los años, y tras cambios de gestiones nacionales devino, en noviembre de 2022, en Instituto Nacional de Agricultura Familiar, Campesina, Indígena y de la Pesca Artesanal (INAFCI). Organismo descentralizado cuyo objetivo central fue el de coordinar y aplicar políticas que atiendan a las necesidades de las y los más pequeños pescadores y agroproductores: quienes se organizan desde su estructura familiar, campesinos y campesinas que trabajan sus parcelas de tierra, las comunidades indígenas y a quienes viven de la pesca artesanal. La promoción de la agroecología, el mejoramiento del hábitat rural y, en especial, la permanencia en la tierra de los campesinos, campesinas e indígenas, en condiciones dignas, con seguridad jurídica y garantizando el acceso a sus derechos, fueron las prioridades del Instituto.  Es bueno recordar, en estas horas de su desmantelamiento, que el horizonte del Instituto se preanunciaba lejano. No por incompetencia de sus autoridades ni mucho menos por desidia, sino por el peso de su historia. Por una mochila cargada de limitaciones.  En diciembre de 2014, apenas iniciado el gobierno de Mauricio Macri pero impulsada por el gobierno saliente, se sancionó la ley 27.118, conocida como “Ley de Reparación Histórica de la Agricultura Familiar”. En esa ley, además de exigir el fortalecimiento de “la organización y movilidad social ascendente de la agricultura familiar, campesina e indígena”, se instaba a la aplicación obligatoria del Registro Nacional de Agricultura Familiar (RENAF),  instrumento promovido por el Mercosur en su resolución 25/07 y creado en Argentina en octubre de 2007.  Constar en el RENAF se hacía imprescindible para percibir cualquier beneficio. Pero esta ley quedó “dormida”.  Recién se reglamentó en junio de 2023 cuando a Miguel Ángel Gómez, primer y único presidente que gobernó al Instituto, le quedaban menos de seis meses de gestión.  Después de diecisiete años de creado el RENAF y a diez años de la ley de reparación histórica, las familias campesinas e indígenas siguen padeciendo similares complicaciones. Conseguir un crédito en Banco Nación, por ejemplo, es un objetivo difícil de alcanzar.  “La inscripción en el Registro habilita a las familias y comunidades indígenas para acceder a un crédito, pero el banco les pide antecedentes comerciales que, obviamente, no tienen”, explicó Gómez en junio de 2023, en el programa Las Vaquitas son Ajenas de radio La Retaguardia. Como en tantos otros ámbitos de la economía popular, hay mucha voluntad organizativa pero casi nunca hay plata. O hay muy poca. Toda la tarea, de la Secretaría primero y del Instituto después, estuvo signada por el esfuerzo y la aplicación de herramientas concretas para el beneficio de la población. Los resultados, ante la inconmensurabilidad de las necesidades, siempre parecen escasos. El 10 de diciembre de 2023, el Instituto quedó a la deriva. No se designaron autoridades y nadie sabía que podía ocurrir. Aunque todos y todas lo imaginaban. Así como Macri, durante su presidencia, había ignorado a la agricultura familiar, era presumible que el gobierno de Milei la abandonara por completo. Como en otros casos, también en éste se intenta justificar el cierre por motivos económicos. Y lo que es peor, lo presentan como un ámbito que sólo servía para realizar transferencias discrecionales a cooperativas o como una empresa de empleo público. Lo cierto ―lo evidente― es que el motivo es profundamente ideológico. Pero además, parece que no tienen demasiada noción sobre el valor real y estratégico de la economía popular. Según un informe del SENASA, la Agricultura Familiar representa al 66% de las familias que viven en el campo y a 250 mil establecimientos productivos que involucran a más de 2 millones de personas. Los alimentos que producen abastecen a más de la mitad de los pobladores de sus territorios. La desconsideración de estas actividades productivas habla de un posicionamiento ideológico pero también de ignorancia. Frente a esta lamentable novedad, Rosalía Pellegrini, referenta de la Asociación Mujeres de la Tierra, dijo a La Retaguardia: “Nos estamos enterando de que van a eliminar el Instituto de la Agricultura Familiar, Campesina e Indígena. Desde que asumió Milei no había autoridades ni se estaba pudiendo hacer nada. La agricultura familiar y campesina logró institucionalidad a través de la lucha, a través de demostrar que producimos más del 60% de los alimentos que consume el territorio, cada vez en condiciones de mayor precariedad”. Además, contó cómo es la realidad actual de quienes producen alimentos: “Los aumentos de los insumos, del combustible y de las tarifas de electricidad están ahogando al pequeño productor. Hay muchas familias que están dejando las chacras, las quintas. Esto significa sumarse a una masa cada vez más grande de desocupados, salir a changuear. Las mujeres generalmente no tienen la posibilidad de changuear. Estamos con los pibes, cuidándolos. Hay una situación de empobrecimiento total. No podemos acceder ni siquiera a un proyecto, un programa o al RENAF, que es el reconocimiento de que somos agricultores familiares”. Por último, Pellegrini sostuvo: “El gobierno de Milei, quiere destruir al pueblo, a sus organizaciones y a cualquier política pública que entienda que el alimento es un bien social y que las familias productoras necesitan apoyo del Estado”.

Esta mañana las fuerzas federales reprimieron en Avellaneda, en las cercanías del Puente Pueyrredón. Al mismo tiempo, la Policía de la Ciudad cargó contra quienes se manifestaban en Puente Saavedra. La Unidad Piquetera y la UTEP habían convocado a una movilización por la situación de hambre que se está viviendo en los barrios populares. La respuesta, lejos de solucionar el problema acuciante, fue otra vez la represión tendiente a desmovilizar. Compartimos un fotoinforme de lo que sucedió en Avellaneda. Fotos: Antú Divito Trejo

El periodista y delegado del Sindicato de Prensa de Buenos Aires por la Agencia Télam, se refirió a la situación actual de la empresa pública de noticias. Eliaschev repasó la historia y también recorrió algunas de las funciones que cumple como agencia de noticias a lo largo y ancho del país y también en el exterior. La charla se dio en el programa Oíd Mortales de Radio La Retaguardia. Entrevista: Luis Angió Foto: Natalia Bernades

El déficit cero que no se negocia pese al retroceso que significa. La canilla cerrada a Sandra Pettovello a cargo del Ministerio de Capital Humano. Los perros y los mosquitos. Crónica de las conferencias de prensa del vocero Manuel Adorni en Casa Rosada bajo la órbita del déficit cero. Un Javier Milei descontrolado en las redes sociales no es nuevo, solo que esta vez su ataque alcanza hasta a los gobernadores porque no aprobaron su mal llamada “Ley de Bases y Puntos de Partida para La Libertad de los Argentinos”. Las inversiones perdidas y las que llegan. El chaleco de fuerza permanece abierto en el Congreso Nacional enrejado. Texto: Paulo GiacobbeEdición: Pedro Ramírez OteroFoto: Emiliano Rojas Salinas  7.30 pm. 16 de febrero de 2024. Luis “Toto” Caputo, ministro de Economía, difundió: “El déficit cero no se negocia”.  Al máximo postulado liberal lo acompañó con cifras: “En enero el Sector Público Nacional registró un superávit financiero de $518.408 millones” y “el superávit  primario (antes de intereses de deuda) fue de $2.010.746 millones y el pago de intereses fue de $1.492.338 millones”. Banderitas argentinas acompañaban el texto en “X”. “VAAAAAAAAMOOOOOO TOTO…!!! El déficit cero no se negocia. VIVA LA LIBERTAD CARAJO”, festejó el presidente de Argentina, Javier Milei, en la misma red social. Es difícil entender esto, pero Milei ya había advertido que correspondía llevar en andas a Caputo. Una semana después la mayoría de los diarios publicaron en tapa que el Fondo Monetario Internacional (FMI) “apoya el ajuste” pero advirtiendo “que el ajuste no caiga en los trabajadores”. Para ese momento ya se desataba una pelea con todos los gobernadores (menos Tucumán) por la coparticipación, y la provincia de Chubut avisaba que suspendería la producción de gas y petróleo. La respuesta de Javier Milei a los gobernadores fue maratonear por la red social “X” a puro insulto. Algo usual en el presidente. Después del anuncio del 16 de febrero, como si se tratara del comienzo de una maldición bíblica, ocurrió en la Ciudad y el Gran Buenos Aires una invasión de mosquitos. Si bien los casos de dengue están en aumento en todo el país y estos mosquitos no transmiten esa enfermedad, el vocero presidencial, Manuel Adorni, se refirió al tema en su habitual conferencia de prensa, deslindando a la actual gestión de cualquier responsabilidad al respecto. Pero entre Javier Milei y los mosquitos existe un vínculo mucho más cercano. Juan Luis González, en el libro El Loco, la vida desconocida de Javier Milei y su irrupción en la política argentina rescató una charla radial de Celia Liliana Melamed en el programa No tan Millenials de Radio MDZ el 20 de febrero de 2020. Melamed dijo que se podía comunicar con los mosquitos: “Se puede hacer un trato, yo no te mato, vos no me piques, y se puede hacer, pero algunos lo respetan y otros no”.  Lógicamente, si se puede comunicar con mosquitos también puede hacerlo con otros insectos y con animales. Y no hace falta ser Sherlock o Enola Holmes para saber cuál es el vínculo con Milei. “Melamed fue la que terminó de introducir a Milei en el campo de la telepatía animal”, escribió González, “A partir de entonces empezaría a ‘hablar’ con (su perro) Conan, y Karina, su hermana, terminaría entrenándose con Melamed hasta desarrollar la misma habilidad y ser otra más de sus alumnas comunicadoras”. Visto de esta manera, la invasión de mosquitos podría tratarse de un reclamo a raíz de un trato incumplido por el libertario. Es que así estamos, dentro de un universo donde todo es posible. ¿O acaso el vínculo de Milei con sus perros clonados no condicionó su mudanza a la Quinta presidencial de Olivos?  “Afortunadamente estamos avanzando en la construcción de los caniles… ya pronto mis HIJITOS vendrán a vivir a la Quinta de Olivos conmigo… VIVA LA LIBERTAD CARAJO”, marcó con los dedos en su red social preferida el 13 de enero de este año.  Un par de días antes se había mudado desde el Hotel Libertador, donde fue su búnker de campaña, a la residencia presidencial. El detalle es que siendo presidente continuó viviendo en el hotel casi un mes, sin quedar registrada ninguna de las visitas que recibió ni quién abonó la estadía. Para colmo, a la fecha no existe comunicación oficial sobre la mudanza de sus mascotas a Olivos. Una lástima no saber sobre este asunto tan delicado de “hijitos” viviendo en caniles.  La vocería presidencial, a cargo de Manuel Adorni, en la habitual conferencia de prensa en su salón azul, últimamente, no habló de los perros del presidente. El lunes 19 dijo que el Ministerio de Capital Humano a cargo de Sandra Pettovello, encontró “irregularidades en la compra de medicamentos destinados a pacientes oncológicos o con patologías crónicas durante la gestión anterior”.  Hacían contrataciones por mail y entonces les cortaron la entrega de medicamentos a las personas enfermas.  Ese día, movimientos sociales marcharon frente al Ministerio de Economía porque el Gobierno, al asumir, dejó de entregar alimentos a los comedores comunitarios. Ante la pregunta en la rueda de prensa dijo que no le constaba que era por la falta de partidas en los alimentos. “Esto de que se cortó la asistencia a todos los comedores es falso”, dijo. Pero la calle lo desmiente. En la misma línea, el vocero garantizó que se sigue asistiendo a los que se asistía antes, solo se “eliminaron los intermediarios” y que todos los que cumplen con los requerimientos de Capital Humano siguen recibiendo la mercadería. También explicó que Milei nunca dijo que Capital Humano tiene dinero ilimitado. Anda a saber qué significa entonces “la única billetera abierta es para la ministra de Capital Humano”, tal cual expresó el presidente. Pero eso fue antes de asumir.  “Acá tenemos que entender que no podemos gastar más de lo que tenemos”, fue la justificación de Adorni ante los recortes en obra pública, educación, salud, asistencia social, jubilaciones y salarios para lograr el déficit cero. Luego se embarcó en la cruzada de maltratar los últimos

De las conversaciones con Conan, su perro muerto, a la construcción de poder a través del vínculo con la iglesia evangelista y el judaísmo. El presidente Javier Milei está rodeado de misterio. Recorremos sus acuerdos con los representantes terrestres de las “fuerzas del cielo”. Redacción: Sergio ZalbaEdición: Valentina Maccarone / Pedro Ramírez OteroIlustración: Chechu Rodríguez  La palabra “mística” proviene del vocablo “misterio”. Y, a su vez, “misterio” se origina en “myein”, verbo griego que significa cerrar o estar cerrado. La mística, el misterio y la cerrazón resultan sustanciales para el universo creyente; territorio que se nutre de lo desconocido, que sólo se abre al conocimiento de la fe, tan distante como distinto al de la razón. El presidente de las argentinas y los argentinos, por su parte, transita ese universo con suficiente amplitud.Ya sabemos que Javier Gerardo Milei mantiene conversaciones con Conan, su perro muerto. Claro indicio de su vínculo con el misterio. Pero ello no es más que una simple rareza. Lo extraordinario y, tal vez peligroso, es su forma relacional con las instituciones religiosas y sus entornos.La primera de sus giras presidenciales es bastante elocuente: comienza por Israel y concluye en el Vaticano. Primero va con Dios y después con el diablo, con “el representante del maligno en la tierra”, según sus propias palabras.Con rostro embelesado, el martes 6 de febrero, descendió del avión en territorio semita. Allí estaba Yisrael Katz, ministro de Asuntos Exteriores. Le trasmitió de inmediato el objetivo de su visita: informarle al mundo su solidaridad con Israel ante el terrorismo islámico y la decisión del gobierno argentino de trasladar su embajada a Jerusalén, tierra santa para cristianos y santísima para musulmanes. En cuestión de segundos, Hamás emitió un comunicado, de esos que te erizan los pelos: “Condenamos enérgicamente el anuncio del presidente de Argentina… lo consideramos una infracción de los derechos de nuestro pueblo palestino a su tierra”. ¡Cuidado! Aún retumban los alaridos de la AMIA y la Embajada.Poco después, Javier Milei se enfrentó al “Muro Occidental” ―más conocido como “Muro de los Lamentos”―, pared que dejaron los romanos tras la destrucción del segundo templo judío. Lo habrían dejado para que nunca se olviden de esa derrota, para que la “lamenten” por siempre. Sin embargo, la tradición hebraica hace su propia interpretación, lo considera un regalo del cielo, el cumplimiento de una promesa divina. Ese resto del templo es considerado símbolo de la eterna alianza de Dios con el pueblo elegido. Cada cual hace su lectura. Y allí, frente al histórico paredón, el presidente lloró. No fueron simples lágrimas de emoción, fue llanto intenso y extenso. A su lado estaba Axel Wahnish, embajador de Argentina en Israel, operador sionista, su instructor de la Biblia y rabino de cabecera. Se abrazaron, a modo de consuelo, durante varios segundos. No sabemos por qué. Forma parte del misterio.Mientras tanto, en el Congreso Nacional, chocaba el ómnibus de la Ley de Bases. Ese delirio cuya continuidad aún desconocemos. Pero además, ocurrían otras cosas. Por un lado, el episcopado (católico) se hacía eco del hambre popular mediante un comunicado: “El pedido del pan de cada día es un clamor de justicia”, lo tituló. Y en sus primeras líneas citó al Antiguo Testamento, libro predilecto del misticismo presidencial: “No apartes tu rostro del pobre” (Tobías 4,7). Y, en clara referencia a la “cola del hambre” generada por la ministra de Capital Humano Sandra Pettovello, remató; “Por eso Jesús se identifica con los últimos en la fila de la vida, que padecen hambre, y dice: ‘Tuve hambre y me diste de comer’”. (Mt. 25,35).Por otro lado, y casi al mismo tiempo en que la ministra de Capital Humano le negaba la comida a las organizaciones sociales, se conoció el convenio de asistencia alimentaria que selló, la misma ministra, con la Alianza Cristiana de Iglesias Evangélicas de la Argentina (Aciera). Reunidos en la Fundación “Promesa Eterna” acordaron un subsidio de 177 millones de pesos para que asistan a los y las pobres de su feligresía.¡Viva Cristo! La paradigmática expresión evangélica había sonado, días antes, en el Congreso de la Nación. La diputada Lourdes Arrieta, libertaria y evangelista lo había vociferado al concluir su alegato en favor de la Ley de Bases. Quizá, ya sabía de ese convenio y lo estaba celebrando. Pero Nadia Márquez, neuquina, también diputada nacional por La Libertad Avanza (LLA), abogada y pastora, quien durante el tratamiento de esa ley puso todo su empeño intelectual y emocional a favor de la propiedad privada, no sólo lo sabía, participó en su elaboración. Resulta que es la hija de Hugo Márquez, también pastor y vicepresidente de Aciera, la organización cristiana que recibió el subsidio. Ahora falta el encuentro con Jorge Bergoglio. No será una simple reunión protocolar, se producirá en el marco celebrativo de la santificación de María Antonia de Paz y Figueroa, más conocida como Mama Antula, primera mujer argentina en ser canonizada. No podía ser un encuentro más cargado de milagros y misterios religiosos. Ya imagino a los fotógrafos buscando el cruce de miradas. Milei tendrá su propia estampita con el Papa Francisco. Abrazos con judíos, insultos con musulmanes, alianzas con cristianos, celebraciones vaticanas. Está todo bien con la mística y las religiones. Incluso, hasta podríamos aceptar, respetuosamente, que se converse con animales fallecidos. Lo que se debería cuidar, según creo, son sus posibles efectos colaterales: el hambre de millones que no están acompañados por organizaciones evangélicas, el vilipendio por cualquier líder religioso (más si es el Papa y si es argentino), ataques criminales que puedan emerger de un foráneo conflicto genocida y, particularmente, la promoción de nuevas angustias populares, las que crecen al calor del mesianismo político, el modo más execrable de cualquier misticismo.